APROVECHAMIENTO DE LA VISIÓN RESIDUAL. El aprovechamiento de la visión residual se convierte en un elemento imprescindible si lo que se pretende conseguir es que el deficiente visual adquiera los hábitos y habilidades necesarias para desenvolverse en el medio que le rodea. Para ello, es vital estimular lo más temprano posible y aprovechar sus residuos visuales. Existen programas de aprovechamiento visual que persiguen, entre otros, los siguientes objetivos; Percepción y localización de una fuente luminosa. Acomodación a la luz. Discriminación visual y atención visual. Estabilidad en la percepción y discriminación visual. Acomodación visual. Seguimiento visual. Este programa puede completarse con el uso de aparatos que facilitan una mejor integración y desarrollo de todas sus potencialidades, lupas, megascopios, telescopios, proyectores de amplificación,… | LOS RECURSOS MATERIALES PARA EL ALUMNADO CON DISCAPACIDAD VISUAL. · ADAPTACIÓN DE LOS RECURSOS DIDÁCTICOS PARA CIEGOS. · ADAPTACIONES DE ACCESO A LA LECTURA Y ESCRITURA PARA EL ALUMNADO CON BAJA VISIÓN. · MATERIAL ADAPTADO PARA LAS ÁREAS CURRICULARES. ADAPTACIÓN DE LOS RECURSOS DIDÁCTICOS PARA CIEGOS. Siguiendo la clasificación de José Mª Durán Vélez, cualquier texto es susceptible de ser adaptado para las personas carentes de visión. Basta sustituir el soporte y el sistema de lectoescritura visual por otros perceptible para el tacto y el oído. Los dos sistemas habitualmente utilizados son: Transcripción Braille. Sustitución del sistema de lectoescritura habitual en tinta destinado a ser percibido visualmente, transfiriéndolo al sistema Braille específico para ser percibido a través del tacto. Grabación sonora. Registro en cinta magnética de la dicción del texto para ser reproducida en aparatos magnetofónicos, utilizando la audición como canal perceptivo. El mismo autor, distingue 3 tipos de medio e instrumentos para la escritura en braille. Escritura manual con pauta y punzón. Escritura mecánica con máquina Perkins. Es la herramienta de trabajo imprescindible del alumnado con ceguera, prácticamente en todos los niveles educativos. Escritura informatizada utilizando software de edición de textos y de conversión braille, asociados a hardware específico en impresoras braille. · ADAPTACIÓN DE ACCESO A LA LECTURA Y ESCRITURA PARA EL ALUMNO CON BAJA VISIÓN. El criterio seguido para el alumnado con baja visión es el de aprovechar sus restos visuales en la mayor medida posible y durante el mayor tiempo posible. Para ello se recurre al entrenamiento en discriminación visual y al empleo de ayudas técnicas para la amplificación de la visión o del material. Recursos técnicos para la ampliación de la visión o la mejora de las condiciones de la misma. Gafas con los cristales graduados a las necesidades visuales del alumnado. Gafas tipo telescopio para la visión de la pizarra, carteles y murales. Lupas especiales de mano o de sobremesa. Lámparas y flexos para la iluminación directa de cuadernos y libros. Recursos técnicos para la ampliación del material visual. Empleo de macrotipos en las pantallas de ordenador. Ampliaciones de los textos mediante fotocopia ampliada. Utilización de la telelupa para la lectura de libros y revistas a través de un monitor. MATERIAL PARA LAS ÁREAS DEL CURRICULO. |