1.- INTRODUCCIÓN.
2.- LA NORMALIZACIÓN.
2.1. Definición y concepto general.
2.2. Antecedentes históricos de la normalización.
2-3- La normalización española UNE y su concordancia con otras normas como DIN e ISO.
2.4. Clasificación de las normas.
2.5. Objetivos y ventajas de la normalización.
2.- ELEMENTOS ESENCIALES PARA LA CORRECTA CROQUIZACIÓN Y
ACOTACIÓN.
3.1. ¿Qué es un croquis? Principios básicos para su realización.
2.3. Proceso de realización de un croquis.
3.3. Elementos normalizados que forman parte de un croquis.
3.3.1. Formatos.
3.3.2. Escritura normalizada.
3.3.3. Líneas normalizadas
3.3.4. Vistas a representar.
3.3.5. Cortes y secciones.
3.3.6. Acotación.
4.- OTRAS FORMAS Y SIMBOLOGÍA EMPLEADOS EN DIBUJO TÉCNICO.
4.1. Representación convencional de roscas.
4.2. Signos convencionales para remaches y tornillos.
4.3. Simbología utilizada en la representación de diámetros, radios, cuadrados y
perfiles laminados.
4.4. Simbología y convencionalismos en la representación de engranajes.
4.5. Signos convencionales para resortes.
4.6. Representación simbólica de soldaduras.
4.7. Indicación de los estados superficiales en los dibujos.
4.8. Tolerancias geométricas.
4.9. Otras normas y símbolos gráficos.
5.- CONCLUSIÓN.
BIBLIOGRAFÍA.
RODRÍGUEZ DE ABAJO, F.J.: Curso de Dibujo Geométrico y de Croquización, Ed. Marfil. Alcoy.
DIEGUEZ GONZALEZ, A.: Dibujo Geométrico y Normalización. Ed. McGraw-Hill.
CORBELLA BARRIOS, D : Elementos de normalización. Ed. La Hispanense Industrial y Comercial S.A Madrid.
NORMAS UNE: Manual de normas UNE sobre dibujo. 3ª Edición. Ed. AENOR. Madrid.
NORMAS DIN: Manual 1 de Normas fundamentales. Ed. Balzola. Bilbao.
NORMAS DIN: Manual 2 de Normas de dibujo. Ed. Balzola. Bilbao.
1.- INTRODUCCIÓN.
Se puede considerar fuera de toda duda la necesidad de que en Tecnología convenga imbuir en el alumno la idea de universalidad del Dibujo Técnico como medio de expresión gráfica , haciéndole caer en la cuenta que para llevar a cabo la representación de cualquier elemento, mecanismo o proyecto que se haya de elaborar, es imprescindible conocer las normas básicas del Dibujo Técnico y la simbología y convencionalismos a utilizar, a fin de obtener representaciones claras y exactas que puedan ser interpretadas de manera fácil e inequívoca por él mismo, en el momento de ejecutar el trabajo y por quienes vayan a tener alguna relación con dicho trabajo.
Ahora bien, pretender exponer en el presente tema todo un conjunto de principios básicos de normalización y simbología relativa al Dibujo Técnico, como elementos constitutivos de un croquis acotado y el correspondiente plano de taller, es poco menos que imposible, salvo que no tuviéramos limitación de tiempo.
Téngase en cuenta que existen gran cantidad de tratados y publicaciones, tanto de autores particulares como de instituciones públicas tipo AENOR, dedicadas en exclusiva a la Normalización. Aún en estos casos, la limitación de espacio impide, a veces, recoger normas que parecen menos importantes para el Dibujo Técnico, pero imprescindibles si se quiere hacer un croquis correcto y completo. Es el caso de normas relativas a designación de materiales, tolerancias de forma y posición, simbología sobre soldadura, sobre instalaciones eléctricas, hidráulicas y neumáticas, tuberías, edificación y obra civil, etc.
Según lo dicho, al confeccionar un croquis acotado y/o el plano a escala de una pieza o mecanismo de escasa dificultad, utilizaremos una Normalización básica, que describimos en el apartado 3, mientras que en el 4 hacemos una breve referencia a otras normas y simbología de uso más específico.
2.- LA NORMALIZACIÓN.
2.1. Definición y concepto general.
Etimológicamente, la palabra norma, significa regla o conjunto de principios básicos a seguir en el desarrollo de una determinada actividad del hombre para llegar a un fin determinado. En 1940 el Comité Alemán de Normalización definió esta como “el término general que significa la reglamentación de un gran número de fenómenos, a fin de ordenarlos de una manera tan unificada y lógica como sea posible”.
Tiene su origen en la necesidad de efectuar una recopilación sistemática y
organizada por todos los estamentos interesados a fin de evitar la variedad técnica en lo referente a propiedades, características y dimensiones de los productos industriales y como consecuencia, conseguir su menor coste económico.
Desde siempre, el técnico ha entendido que normalizar es sinónimo de simplificar, unificar y especificar, esto es:
§ Simplificar, en cuanto a suprimir de la fabricación elementos inútiles y conservar en lo posible aquellos productos que se reconozcan como mejores, más útiles y necesarios.
§ Unificar: promulgando las medidas necesarias para favorecer la intercambiabilidad.
§ Especificar o definir materiales, productos y características de todo tipo a fin de evitar errores de identificación o de verificación.
El desarrollo de la normalización de un país está directamente relacionado con su
nivel industrial y con la facilidad para intercambiar tecnología con sus vecinos.
2.2. Antecedentes históricos de la Normalización.
Prácticamente, hasta finales del siglo XIX, los técnicos en general, dibujaban por
intuición y siguiendo ciertas modas o estilos de cada época y campo profesional, pero sin pautas preestablecidas por gremio, asociación o institución alguna. Si bien es cierto que los caldeos y egipcios tipificaron el tamaño de ladrillos y piedras de construcción y la teja árabe aún hoy día se sigue empleando como elemento normalizado, la normalización con base sistemática y científica nace con el actual siglo en países altamente industrializados ante la necesidad de producir más y mejor.
En la historia se pueden encontrar gran cantidad de hechos que demuestran el
interés por fijar reglas o pautas que facilitaran la realización de un mejor trabajo.
Los griegos, en arquitectura dimensionaban con relación al radio de la columna y
establecieron el Canon artístico, basado en las dimensiones del cuerpo humano. Más tarde Leonardo da Vinci y Durero realizaron estudios exhaustivos sobre el tema.
El establecimiento del Sistema Métrico Decimal en 1789 fue otro gran paso en pos
de la moderna normalización internacional, siendo la Revolución Industrial con sus numerosas fábricas, centros de producción y poderosas relaciones comerciales la impulsora de la creación de normas capaces de construir un lenguaje técnico comprensible y universal.
No obstante, solo a finales del siglo XIX y principios del XX se inicia un verdadero
movimiento científico en este terreno y el impulso definitivo llega con la Primera Guerra Mundial ( 1914 – 18 ) y la necesidad de abastecer a los ejércitos. Era necesario utilizar la industria privada exigiendo unas especificaciones de intercambiabilidad y ajuste de precios en el menor tiempo posible de fabricación.
En 1917 Alemania crea el “ Comité de Normas de la Industria Alemana”, que en
1925 pasa a ser el “Comité de Normas Alemán” ( DNA ), que se encarga de recopilar todas las experiencias anteriores. Este organismo empezó a editar las correspondientes hojas de normas con la contraseña DIN, que inicialmente expresaban Deustcher Industrie Normen y a partir de 1926 adoptó la nueva denominación de Das Ist Norm ( esto es norma) .
2.3. La norma española UNE y su concordancia con DIN e ISO.
Para facilitar el intercambio de productos entre países y recoger y coordinar
los trabajos de normalización de todos ellos, se creó en Londres en 1926 la “Internacional Federation of the National Standardizing Associations” ( ISA ), que en octubre de 1945, tras la Segunda Guerra Mundial, fue sustituida por la “Internacional Organization for Standardization” ( ISO ), con sede en Ginebra, dependiente de la ONU y editora de las NORMAS ISO. En el artículo 2.1 de su constitución se establece la finalidad de su función: “ impulsar el desarrollo de la normalización en el mundo a fin de favorecer los cambios de mercancías y las prestaciones de servicios entre las naciones y llevar a la práctica un acuerdo mutuo en los dominios intelectual, científico, técnico y económico”.
Sus miembros son los organismos nacionales de normalización de 91 países, entre los que se encuentra España desde 1957. El trabajo de ISO abarca todos los campos de normalización, a excepción de la ingeniería eléctrica y electrónica que es responsabilidad de la Comisión Electrónica Internacional (CEI ). ISO coordina el intercambio de información sobre normas internacionales y nacionales, reglamentos técnicos y toda clase de documentos normativos entre los centros nacionales de 60 países a través de la red de información SONET. Entre otros muchos, a ISO están adheridos los siguientes organismos: CNM (Comité Normalization Mecánique, de Francia ), USN ( Verien Schweizercher Maschinen, de Suiza ), ASME ( American Society of Mechanical Engineers, de EE.UU. ) , IRAM ( Instituto de Racionalización Argentina de Materiales ), BSI ( Normas Británicas ), AFNOR ( Normas francesas ), SIS ( Normas suecas),JIS ( Normas Japonesas ), UNI ( Normas italianas ), GOST ( Normas soviéticas ), UNE ( Norma española ), etc.
En España, la labor de normalización estaba encomendada al IRANOR ( Instituto de Racionalización y Normalización ) creado en 1946 por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas. En la actualidad, es el organismo privado AENOR ( Asociación Española de Normalización y Certificación ) el encargado de desarrollar las actividades de normalización y certificación para la industria española con la correspondiente coordinación con las recomendaciones ISO. Es el responsable de la publicación de las normas UNE ( Una Norma Española ) generadas en las Comisiones Técnicas de Trabajo.
Cada nueva norma se somete durante seis meses a la opinión pública y tras analizar las observaciones recibidas, el Comité correspondiente le da la configuración definitiva con las correspondientes siglas UNE, seguidas de un número de clasificación e identificación. Esta clasificación es decimal e indica: a) el grupo o Comisión Técnica; b) el número de orden de la norma dentro de los trabajos de dicha comisión y c) el año de su última revisión. Cada norma es sometida a revisiones periódicas a fin de actualizarla y en la hoja/s en que es publicada se indica a que otras normas sustituye y anula y su equivalencia o concordancia con la correspondiente ISO.
Como ejemplo aclaratorio analicemos la norma UNE 1 032-82. “Principios generales de representación”: la cifra 1 indica que pertenece a al Comisión Técnica de Normalización nº 1, que se ocupa de Normas Generales. 032 indica el orden entre las publicadas por esta comisión y 82 el año en que se hizo la 2ª revisión de esta norma que anula a la anterior de octubre del 74. Esta norma es equivalente a ISO 128-82.
Hasta no hace muchos años, el retraso de la normalización UNE respecto a otros países de Europa, obligaba a la industria española a manejar la norma DIN como si fuera propia. A partir de la década de los sesenta cuando el desarrollo de UNE y su coordinación con ISO favorecen la progresiva implantación de la norma española y el distanciamiento de la alemana.
2.4. Clasificación de las normas.
Independientemente de la clasificación decimal antes citada y su relación con la correspondiente Comisión Técnica, una clasificación más amplia y general puede hacerse atendiendo al contenido de la norma o a su ámbito de aplicación:
1. según su contenido:
§ Normas fundamentales de tipo general que incluyen y definen conceptos fundamentales de la ciencia o de la técnica, como unidades, símbolos, o terminología. Es el caso de los formatos, líneas, rotulación, vistas, secciones, etc.
§ Normas fundamentales de tipo técnico, como características de elementos mecánicos y su representación. Entre ellas se encuentran las tolerancias, perfiles de roscas, soldaduras, etc.
§ Normas relativas a la calidad de materiales, con especificación de designación, propiedades, composición y ensayos. Se incluirían en este grupo todas las normas relativas a la designación de todo tipo de materiales, metálicos y no metálicos, lubricantes y combustibles, etc.
§ Normas de dimensiones de piezas y mecanismos, especificando formas , dimensiones y tolerancias admisibles: construcción naval, máquinas herramientas, tuberías, etc.
2. según el ámbito de aplicación:
§ Normas internacionales, recomendadas por ISO como consecuencia de acuerdos y reuniones internacionales entre países de su organización.
§ Nacionales, redactadas y emitidas por el organismo de normalización correspondiente de cada país de acuerdo con su propia experiencia y con las recomendaciones de ISO en su caso.
§ Normas de empresa, redactadas libremente por las empresas industriales, que sirven de complemento a las nacionales en cuanto a las funciones específicas de las mismas y que deben estar coordinadas con ellas. En España, otros organismos nacionales de normalización son: INTA ( Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial ), CETA ( Centro de Estudios Técnico de Automoción ), UNE-TEX ( Sindicato Nacional Textil ), RENFE ( Red Nacional de Ferrocarriles Españoles ), AEE ( Asociación de Electrónica Española ). Otras normas de empresa de amplitud más o menos reducida son las utilizadas por CTN, UNESA, BAZAN, IBERDROLA
IBERIA, etc.
2.5. Objetivos y ventajas de la Normalización.
Desde comienzos del siglo XX se desarrolla el concepto de normalización,que de forma general aspira a unificar características y especificaciones de materiales y productos con vistas a economizar costos en la producción y disminuir los gastos de consumo, seleccionando los productos que reúnan las características más convenientes para racionalizarlas al máximo, a fin de obtener las formulaciones más sencillas y los procedimientos de fabricación más aconsejables.
Como consecuencia de todo lo expuesto hasta ahora, se pueden reunir los objetivos
de la normalización en:
§ Economía, debida a la simplificación, que disminuye el precio al facilitar la producción.
§ Utilidad, debida a la unificación, que permite la intercambiabilidad de elementos.
§ Calidad, debida a la especificación que garantiza las características de los productos.
Estos tres aspectos conducen al logro de la siguientes ventajas:
a) Tipificación o reducción del número de tipos diferentes de un mismo elemento.
b) Reducción y tipificación del empleo de semiproductos con el consiguiente abaratamiento de costes.
c) Simplifica las dificultades de diseño en las fabricaciones mediante el empleo de productos normalizados, con economía de tiempo y trabajo en la producción y montaje en serie.
d) Reducción de costes en archivos, embalajes, transportes, almacenajes. Etc.
Lo dicho hasta aquí con carácter general sobre la normalización en el campo industrial es totalmente aplicable al terreno específico del Dibujo Técnico, ya que, a través de la fijación de unos determinados convencionalismos se tiende a simplificar el trazado y dar valor universal a su interpretación, de manera que la lectura de los planos sea fácil e inequívoca por cuantos los consulten, independientemente de quien los hubiera realizado.
3.- NORMALIZACIÓN BÁSICA EMPLEADA EN LA CROQUIZACIÓN.
En el presente apartado trataremos de definir el concepto de croquis, indicar el proceso que debe seguir en su realización y enumerar las normas básicas que se han de tener en cuenta al confeccionarlo.
3.1. ¿Qué es un croquis?. Principios básicos para su realización.
En el campo industrial, es frecuente tener que realizar con relativa rapidez, el dibujo a mano alzada de una pieza o mecanismo, en el propio taller, a la intemperie, o en cualesquiera otras condiciones adversas. A este dibujo, que contiene la adecuada indicación de las dimensiones necesarias de la pieza para que después pueda ser fabricada en el taller, se le denomina croquis acotado. Al realizarlo deben tenerse en cuenta, entre otros, estos principios básicos:
§ La rapidez es compatible con la limpieza, el esmero y la atención en el trazado de las formas y la consignación de los signos, símbolos, cotas y demás elementos normalizados que indiquen todas las características de la pieza.
§ El croquis no se hará a escala, pero se procurará un mínimo de proporción entre el dibujo y las formas y dimensiones del objeto representado.
§ Cuando las dimensiones de la pieza lo permitan, se procurará dibujar el croquis a un tamaño parecido al real.
§ El croquis debe reproducir la forma y detalles de la pieza fielmente y contener toda la información técnica necesaria para la confección de planos de taller a escala .No debe olvidarse que en la mayoría de los casos, quien haya de fabricar la pieza, no tendrá más información de esta que el plano de taller o plano de fabricación, y estos han de dibujarse con la información que facilite el croquis.
§ Si el croquis a ejecutar, corresponde a un mecanismo o conjunto de piezas, deberá dibujarse un croquis del conjunto y tantos croquis como sean necesarios para la correcta representación de cada una de las piezas que componen aquel.
§ En cuanto a los materiales de dibujo a utilizar, el papel debe ser de tamaño normalizado, liso, blanco y opaco. No es aconsejable el cuadriculado o milimetrado porque perturban la claridad de la representación y la posterior visión.
§ Es conveniente el empleo de lápiz semiblando ( 2,3,4; o B, HB, F, H ) que facilita el borrado y corrección, aunque también puede emplearse el bolígrafo y la tinta china.
§ Antes de hacer un croquis, el dibujante se debe proveer de instrumentos de medida para tomar las dimensiones de la pieza: compás de espesores, pie de rey, regla graduada, escuadra y goniómetro, etc.
3.2.- Proceso de realización de un croquis.
La lógica y la práctica indican que es necesario tener una visión del conjunto de la pieza a croquizar y de la forma y posición de sus detalles para actuar en este orden:
a) Observación de la pieza para elegir el alzado y demás vistas a representar y su
posición relativa.
b) Encuadre de las vistas en el papel mediante el esbozo realizado con líneas paralelas horizontales y verticales, con separaciones proporcionales a las dimensiones de la pieza y trazado de los ejes de simetría y de revolución que tuviera cada un de sus vistas.
c) Dibujo de las vistas con líneas limpias y sin rebabas, cuidando la correspondencia entre vistas, completando arcos y circunferencias y posibles secciones.
d) Distribución de líneas de cota, empezando por las totales y reservando espacio para las más próximas al contorno de la pieza. Todo ello de acuerdo con las normas.
e) Consignación de cifras en cada línea de cota, tomando de la pieza la dimensión real con los instrumentos de medida disponibles.
f) Especificación de signos de mecanizado, tolerancias y todas aquellas indicaciones precisas para que el croquis quede acabado.
3.3. Normas básicas que intervienen en la confección de un croquis.
En un croquis, cualquiera que sea su complejidad, siempre intervienen los siguientes elementos normalizados, que podemos considerar como básicos o fundamentales.
1.- El formato del papel a emplear , en función del tamaño del dibujo, la forma de doblarlo, el cuadro de rotulación y despiece.
2.- El tipo de rotulación para cifras y letras que se hayan de escribir en un dibujo.
3.- Las líneas a utilizar, sus grosores y tipos, según el elemento a representar.
4.- Las vistas a representar y en su posición adecuada.
5.- Las secciones y cortes que sean necesarias aplicar para mayor claridad y simplificación del dibujo.
6.- La acotación de las dimensiones de la pieza.
A continuación hacemos una descripción de estos elementos normalizados que hemos considerado básicos, por formar parte de todo croquis, aunque la pieza representada sea de escasa dificultad.
Como soporte y ejemplo aclaratorio de las líneas que se irán exponiendo, hemos representado un croquis del conjunto y despiece de un sencillo mecanismo, que hemos denominado “DISCO DE ARRASTRE”. A él nos referiremos cuando mencionemos los sucesivos elementos normalizados.
3.3.1. Formatos.
Se llama formato a la hoja de papel en que se realiza un dibujo, cuya forma, posición y dimensiones en mm. están normalizados. En UNE 1 011 ( ISO 216 ) y UNE 1 026 ( ISO 5457 ) se especifican las características de los formatos, siendo las principales las siguientes:
a) Dimensiones.- El tamaño de la hoja de papel en bruto responde a las reglas de doblado, semejanza y referencia. Indican que cada formato se puede obtener doblando el inmediato superior; que la relación entre lado menor x con el mayor y es la del lado de un cuadrado a su diagonal y que se parte de un tamaño original de superficie 1 m2. Aplicando estas tres reglas se determinan las dimensiones de un formato original llamado
AO ( x = 0,841 m., y = 1, 189 m.).
La serie A de formatos se obtiene por doblado sucesivo del AO y siguientes. Para sobres, carpetas, archivadores, etc,. se utilizan formatos de las series auxiliares B y C. Los de la serie B se obtienen como media geométrica de los lados homólogos de dos formatos consecutivos de la serie A. Los de la serie C se obtienen como media geométrica de los lados homólogos de los correspondientes a las series A y B. Como ejemplo, indiquemos que las dimensiones del A4, B4 y C4 son respectivamente: 210 x 297 ; 250 x 353 ( archivador ) y 229 x 324 ( sobre ).
Excepcionalmente y para piezas alargadas se pueden emplear formatos “alargados” multiplicando por 2, 3, 4, … 9 la dimensión menor de un formato. Este es el caso del formato A4 x 6, de dimensiones 297 x 1261.
La norma UNE 1 027 – 95 especifica la forma de plegar los planos, en donde destaca que el plegado se hace en zig – zag, tanto en sentido vertical como en horizontal hasta dejarlo reducido al tamaño de formato de archivado y que el cuadro de rotulación siempre debe quedar en la parte anterior y a la vista.
b) Márgenes.- En la hoja de papel cortada al tamaño del formato correspondiente
se debe dibujar un recuadro interior para delimitar el espacio disponible para dibujar, siendo para A4 de 10 mm., excepto el margen de archivo que será como mínimo de 20 mm. Ver ejemplo en Dibujo 31, hoja 1 a 4.
c) Cuadro de rotulación.- Conocido también como cajetín, se debe colocar dentro de la zona de ejecución del dibujo, en la parte inferior derecha, siendo el sentido de lectura de este el mismo que el del dibujo ( UNE 1 026 – 83 ). En UNE 1 035 – 95 se indica la disposición que puede adoptar el cuadro con sus dos zonas: la de identificación, de anchura máxima 170 mm. y la de información suplementaria que se debe colocar encima o a la izquierda de aquella. En el Dibujo 31 de ejemplo, las hojas 1 y 2 tienen un cajetín tradicional y las hojas 3 y 4 tipos de los indicados en UNE 1 039 – 95 .Como ejemplo se ha elegido el croquis de conjunto y despiece de un mecanismo para poder mostrar también la lista de despiece y la correspondencia de sus elementos con los dibujos correspondientes en las hojas 2, 3 y 4 ( UNE 1 135 – 89 ). Como es sabido, no se ha dibujado croquis de tornillo, tuerca y arandela por ser elementos normalizados.
d) Señales de centrado.- Son unos trazos colocados en los extremos de los ejes de
simetría de la hoja de papel en los dos sentidos. De un grosor mínimo de 0,5 mm., atraviesan los cuatro márgenes y facilitan la reproducción y micrografía del dibujo.
e) Señales de orientación.- Son dos flechas o triángulos equiláteros colocados sobre las señales del centrado para indicar la disposición de la hoja sobre el tablero de dibujo.
f) Graduación métrica de referencia.- Es una especie de reglilla de 100 mm. de longitud, dividida en centímetros, que permitirá comprobar la reducción del original en casos de reproducción.
3.3.2. Escritura normalizada.
Todo plano consta de dos partes, el dibujo y la rotulación. Esta está constituida por las letras, números y signos que aclaran lo que las figuras no pueden expresar. Cumple una doble función, técnica y estética, a la par que facilita la reprografía y la micrografía.
En UNE 1 034 – 75 se especifica que la escritura debe ser legible homogénea y apta para el microfilmado y reproducción. Puede ser vertical o cursiva ( con inclinación de 15º a la derecha ). La norma distingue entre escritura tipo A, con grosor de trazo d = h/14 y escritura tipo B, con d = h/10. La de tipo A aparece como más esbelta al tener un grosor de trazo menor que la B.
Un rotulo se identifica o caracteriza por su altura nominal “h” que corresponde a la altura de una letra mayúscula o un minúscula saliente ( M, A, C, t, f, l, p, g ). La altura nominal que se adopte ha de ser proporcional al dibujo representado y al tamaño del plano y debe corresponder con alguna de las alturas normalizadas: 2,5; 3,5; 5; 7; 10; 14 y 20 . Las cifras tienen la altura de las letras mayúsculas y deben cumplir con la norma a todos los efectos.
3.3.3. Líneas normalizadas.
En el capítulo 3 de la UNE 1 032 – 82 ( ISO 128 ) “Principios generales de representación” se especifican ocho clases de líneas y sus aplicaciones:
DESIGNACIÓN | APLICACIONES GENERALES |
Llena gruesa | Contornos vistos. Aristas vistas. |
Llena fina (recta o curva) | Líneas ficticias vistas. Líneas de cota. De proyección. De referencia. Rayados .Contornos de secciones abatidas sobre la superficie del dibujo. Ejes cortos. |
Llena fina a mano alzada. Llena fina recta en zig-zag. | Límites de vistas o cortes parciales o interrumpidos si estos límites no son líneas finas a trazo y punto. |
Gruesa de trazos. Fina de trazos. | Contornos ocultos. Aristas ocultas. Contornos ocultos. Aristas ocultas. |
Finas de trazos y puntos. | Ejes de revolución. Trazas de plano de simetría. Trayectorias. |
Fina de trazos y puntos, gruesa en los extremos y cambios de dirección. | Trazas de plano de corte. |
Gruesa de trazos y puntos. | Indicación de líneas o superficies que son objeto de especificaciones particulares. |
Fina de trazos y doble punto. | Contorno de piezas adyacentes. Posic. Intermedias y extremos de piezas móviles. Líneas de centros de gravedad. Contornos iniciales antes del conformado. Partes situadas delante del plano de corte. |
Como se aprecia en la tabla, solo hay dos grosores diferenciados: línea gruesa y línea fina. La relación entre las anchuras de ambas no debe ser inferior a 2. La anchura de la línea deberá elegirse en función de las dimensiones o del tipo de dibujo, entre la gama siguiente: 0,18; 0,25; 0,35; 0,5; 0,7; 1; 1,4 y 2 mm., debiendo conservarse la misma anchura de línea para las diferentes vistas de una pieza, dibujadas con la misma escala. En el ejemplo dibujado se han señalado algunos de los tipos de líneas empleados, de acuerdo con la tabla anterior.
3.3.4. Vistas a representar.
En la misma norma UNE 1 032 – 82 sobre “ PRINCIPIOS GENERALES DE REPRESENTACIÓN”, en su capítulo 2 se establece que pueden utilizarse dos variantes de proyección ortogonal de la misma importancia:
· Método de proyección del primer diedro, conocido como método europeo.
· Método de proyección del tercer diedro, conocido como método americano.
Se diferencian claramente ambos métodos en la colocación de las vistas proyectadas
respecto al alzado. La simple observación de la figura adjunta es suficientemente aclaratoria. Cualquiera de los dos métodos puede utilizarse indistintamente, siempre que aparezca en el cuadro de rotulación en el distintivo correspondiente.
La norma también admite la posibilidad de disponer de vistas libremente, según flechas de referencia que indiquen la dirección de observación, acompañadas de una letra mayúscula. Esta letra identificativa se coloca en la parte superior o inferior de la vista.
El alzado o vista de frene debe ser elegida como la vista más característica e identificativa del objeto, y representarle en su posición de utilización. Las piezas que admitan cualquier posición se representarán en su posición principal de mecanización o de montaje. Al alzado le acompañarán en la representación de una pieza, las vistas y secciones que sean necesarias, bien elegidas, en número mínimo pero suficiente para definir el objeto sin ambigüedad , evitando con ello la representación de numerosos contornos y aristas ocultas y repetición inútil de detalles.
La misma norma contempla la posibilidad de utilizar vistas particulares y vistas parciales, señalando con una flecha y una letra mayúscula la dirección de observación y limitando su extensión, en el caso de las parciales, con una línea continua fina a mano alzada.
Para los elementos simétricos , se permite dar una vista local en lugar de una vista completa.
3.3.5. Cortes y secciones.
La norma UNE 1 032 – 28 , en su capítulo 4 fija las características y condiciones que debe cumplir la representación de cortes y secciones en los dibujos. Tanto unos como otras son convencionalismos empleados para conseguir claridad en la representación de detalles interiores de las piezas.
Se consiguen, cortando las piezas ( de forma imaginaria ) por el lugar más apropiado, proyectando la vista cortada, eliminando la parte anterior que obstaculiza la visión de los detalles interiores.
Hay que diferenciar los términos sección y corte. La sección representa la intersección del plano de corte con la materia del objeto. El corte representa la sección y la parte del objeto situada detrás del plano secante. En ambos casos, se deben cumplir las siguientes normas respecto al rayado:
La superficie seccionada se raya a 45º de inclinación respecto a aristas o ejes de simetría con un intervalo que depende del tamaño de la superficie a rayar. Las diferentes partes cortadas de una misma pieza deben rayarse idénticamente. El rayado de piezas contiguas debe orientarse o espaciarse de distinto modo para distinguirlas. ( Se puede observar en el ejemplo Dibujo 31, hoja 1 ). Si la superficie a rayar es muy grande, solo se raya parcialmente el contorno interior. En una sección quebrada, producida por planos paralelos, se emplea el mismo rayado, pero desplazado en la línea de división entre las secciones. Las secciones de espesor reducido pueden representarse completamente en negro, dejando un espacio de separación en blanco de 0,7 mm. entre las piezas representadas o perfiles que formen el conjunto.
Las reglas generales relativas a la disposición de vistas se aplican igualmente a la disposición de cortes.
Cuando es evidente la localización del plano de corte, no es necesaria ninguna indicación de su posición o identificación ( caso del Dibujo 31, hoja 4 ) . En caso contrario se recurre al empleo de una línea fina de trazo y punto, gruesa en los extremos y en los cambios de dirección de la trayectoria del corte. El plano se identifica con dos letras mayúsculas y el sentido de observación con dos flechas.
Como norma general, los nervios, elementos de fijación ( tornillos, tuercas, remaches, chavetas, pasadores, bulones ), árboles, radios de ruedas y otros elementos análogos, no se cortan longitudinalmente y en consecuencia, non se rayan. Como ejemplo, sirvan el tornillo, tuerca y arandela del Dibujo 31, hoja 1.
Se pueden representar diferentes tipos de cortes: por dos planos paralelos, por planos sucesivos, medios cortes ( muy utilizados en piezas simétricas y de revolución ) y cortes locales o parciales. Igualmente, pueden representarse secciones trasversales abatidas, sobre el plano del dibujo, sin desplazamiento ( con línea llena fina ) o con desplazamiento. En este último caso, como en el de secciones sucesivas, se dibujará el contorno con línea gruesa y se colocarán, bien en la posición de proyección cerca de la vista y unida a ella mediante una línea fina de trazos y puntos, bien en una posición diferente que esté identificada mediante designación de referencia.
3.3.6. La acotación.
La consignación de medidas o cotas es tan importante como la misma representación del dibujo. Su claridad y lógica disposición, siguiendo el orden del proceso de fabricación, debe dejar garantizado que en el taller sean fácilmente leídas y comprendidas, evitando que una cota mal consignada pueda dar lugar a la inutilidad de la pieza con la consiguiente pérdida de tiempo y dinero.
La norma UNE 1 039 – 94 en su capítulo 3 diferencia entre cota funcional ( cota esencial para la función de la pieza o hueco ), no funcional ( no esencial para la función de la pieza o hueco ) y auxiliar ( cota informativa sin papel importante en la fabricación ) y determina los conceptos de “ elemento” ( característica individual de una pieza ) y
“ producto acabado” ( pieza completa, acabada o semiacabada ).
Al consignar cotas debe tenerse en cuenta estas normas elementales:
§ Cada elemento se acotará una sola vez en un dibujo, colocando la cota sobre cortes, vistas o secciones que representen más claramente los elementos correspondientes.
§ Todas las cotas de un dibujo se expresarán en la misma unidad, sin indicar su símbolo, aunque sí puede ser reflejado en una nota o en un cuadro de rotulación.
§ No se indicarán más cotas que las necesarias para definir una pieza o producto acabado, excepto cuando sea necesario dar cotas adicionales o auxiliares que se refieran a estados intermedios de fabricación.
§ Las cotas funcionales deben expresarse directamente sobre el dibujo siempre que sea posible.
§ En la acotación intervienen los siguientes elementos: línea auxiliar de cota, línea de referencia, línea de cota, extremos de la línea de cota, la indicación de origen y la cifra de cota. Todos ellos utilizados correctamente, de acuerdo con lo señalado en la citada norma.
Respecto a la inscripción de las cifras de cota:
§ Puede efectuarse por uno de los métodos siguientes: a) cifra centrada encima y paralelamente a la línea de cota, como se ha hecho en el Dibujo 31; b ) cifras colocadas siempre en posición horizontal para ser leídas desde abajo, interrumpiendo la línea de cota en las verticales.
§ Cuando falte espacio para colocar la cifra, ésta se situará sobre la prolongación de la línea de cota, por fuera, o mediante una línea de referencia.
§ Si una cota está fuera de escala se subraya la cifra.
§ Para mejorar la interpretación de un dibujo, se dispondrán los signos: , R , SR , S , para expresar, respectivamente: diámetro, radio, cuadrado, radio de esfera y diámetro de esfera.
En cuanto a la disposición e inscripción de las cotas se observará lo indicado en el capitulo 5 de la mencionada UNE 1 039 – 94:
§ Se acotará en serie ( una a continuación de otra ) solamente cuando la eventual acumulación de tolerancias no afecte a la aptitud de empleo de la pieza.
§ Se acotará a partir de un elemento común cuando varias cotas con la misma
§ dirección se refieran a un origen común.
§ La acotación en paralelo debe hacerse a partir de una línea auxiliar común,
§ espaciando las líneas de cota lo suficiente para inscribir la cifra sin dificultad.
§ La acotación mediante cotas superpuestas es una acotación en paralelo simplificada
§ que puede utilizarse cuando falte espacio. Se hará un indicación del origen. El extremo opuesto de cada línea de cota debe estar terminado únicamente por una flecha. El sistema de cotas superpuestas se puede emplear en dos direcciones a modo de ejes cartesianos.
§ La acotación por coordenadas, mediante el empleo de una tabla facilita el trabajo
§ cuando existen muchos elementos iguales.
§ Si es necesario, en un dibujo se puede utilizar un sistema de acotación combinada
§ entre cotas en serie y cotas a partir de un elemento común.
Indicaciones especiales en la acotación, según el capítulo 5 de la norma:
v La longitud de una cuerda se acota con una línea de cota paralela a ella.
v La longitud de un arco se acota con una línea de cota concéntrica con él, y las
líneas auxiliares serán paralelas al eje, consignando un arco sobre la cifra.
§ Los ángulo se acotan con líneas de cota concéntricas al arco y líneas auxiliares en
§ prolongación de los lados del ángulo.
§ Cuando el centro de un arco se encuentra fuera de los límites del dibujo, la línea de
§ cota del radio se quebrará o interrumpirá, según sea necesario, o no, situar el centro.
§ Los elementos equidistantes dispuestos regularmente se pueden acotar consignando
§ la primera cota respecto del extremo de la pieza y después una cota total que indique el número de espacios iguales x longitud entre elementos.
§ Los chaflanes y avellanados se acotarán consignando el ángulo y la dimensión del
§ chaflán, medido axialmente. Si el ángulo es de 45º se simplificará, indicándolo así: 2 x 45º.
Aunque la norma UNE 1 039 – 94 es más extensa, hasta aquí hemos expuesto los principales aspectos que hay que conocer para poder realizar correctamente un croquis acotado de una pieza o mecanismo poco complejo.
4. OTRAS NORMAS Y SIMBOLOGÍA EMPLEADOS EN DIBUJO TÉCNICO.
Si la pieza o mecanismo a representar tiene una relativa complejidad, por su morfología, por su proceso de fabricación o por su acabado superficial, será necesario, además de lo anterior, recurrir a la normalización relativa a :
4.1. Representación convencional de roscas.
La norma UNE 1 108 – 83 especifica que las crestas de los filetes deben ser representados por una línea llena gruesa y el fondo de los filetes por un línea fina. La separación entre ambas líneas debe corresponder con la altura de los filetes, o en todo caso, no inferior al doble del grosor del trazo grueso y nunca menor de 0,7 mm.
En representaciones de roscas cortadas, el rayado debe llegar hasta la línea gruesa que representa la cresta. Ver figura adjunta.
Cuando se haya de representar una unión de dos piezas roscadas, deberá tenerse en cuenta que las roscas exteriores deben ocultar las interiores.
Las roscas se acotan con la dimensión del diámetro nominal ( indicando el tipo de rosca ) y la longitud roscada.
4.2. Signos convencionales para remaches y tornillos, ( UNE 1045 –51 ).
Esta norma contempla la posibilidad de que en los dibujos de taller, los remaches y tornillos se representen de forma simplificada. Su representación simbólica dependerá de sus características: En el caso de los remaches, de su diámetro en bruto, de que tenga la cabeza redondeada por ambos lados, o la cabeza superior embutida, la inferior embutida, ambas embutidas, remachado en el montaje o taladrado en el montaje. En caso de los tornillos, dependerá del diámetro de la rosca, de que sea pasante, de que se aloje en agujero roscado, de que se coloque en el montaje y de que requiera taladro en el montaje.
4.3. Simbología utilizada en la representación de diámetros, radios, cuadrados y perfiles laminados.
La norma UNE 1 039 – 94 sobre Acotación, en su apartado 4.4.4. indica la utilización de los signos o símbolos: Æ , R , , SR , S , para indicar, respectivamente, diámetro, radio, lado del cuadrado, radio de esfera y diámetro de esfera.
La UNE 1 032 – 94 sobre principios generales de representación, en su apartado 5.3.1. especifica que para indicar, sin vista o corte suplementario, las caras laterales de un paralelepípedo, o de un tronco de pirámide que formen el extremo de un eje, se pueden trazar con línea llena fina las diagonales de estas superficies.
La UNE 1 129 – 95 sobre dibujos técnicos para estructuras metálicas, en su tabla 5 muestra los símbolos a utilizar en la designación de los diferentes tipos de perfiles . Perfil angular L, perfil en T, perfil en I, perfil en U, perfil en Z, perfil de carril, perfil angular de bulbo, llanta de bulbo.
4.4. Simbología y convencionalismo en la representación de engranajes . UNE 1 044 – 75 )
Según la norma una rueda dentada se representa ( salvo en corte axial ) como una pieza no dentada, con el trazo de la superficie primitiva en línea fina de trazo y punto. Como regla general, no se representa la superficie de pie, salvo en los cortes y cuando resultara conveniente su representación sobre vistas no cortadas, se traza con línea llena fina.
Cuando sea necesario representar algún diente, se trazará con línea llena gruesa, al igual que la circunferencia exterior.
Se indicará, si procede, la orientación de los dientes de engranaje, mediante tres líneas finas paralelas en forma helicoidal, en ángulo o en espiral.
A continuación, y a modo de ejemplo, se representará un engranaje de ruedas cilíndricas en alzado y perfil seccionado y en representación simplificada con dientes rectos, helicoidales y en ángulo
4.5. Signos convencionales para resortes. ( UNE 1 042 – 75 ).
La norma establece seis grupos o tipos diferentes: de compresión, de tracción, de torsión, arandelas elásticas, resortes en espiral y resortes de láminas o ballestas. La representación en los dibujos puede ser real, en corte y convencional . A modo de ejemplo representamos un resorte cilíndrico de compresión en perfil de sección circular.
4.6. Representación simbólica de soldaduras. ( UNE 14 009 – 84 ).
Las soldaduras pueden representarse respetando las recomendaciones aplicables al dibujo técnico, esto es, en dibujos a gran escala, la soldadura se representa con sus medidas exactas, aunque lo normal es que el cordón de soldadura se represente coincidente con la línea indicativa del borde de las piezas a unir. Se escogerá como figura representativa del cordón de soldadura la sección de ella, adoptando en el dibujo un símbolo de forma que recuerde la mencionada sección. En el caso de no trabajarse en escala, el símbolo tendrá 5 mm. aproximadamente.
El símbolo se coloca en una línea de referencia, paralela al borde inferior del dibujo. Esta línea se une con el cordón o junta mediante una línea de marca, que acaba en una flecha, cuya punta descansa sobre aquel, situándose el signo tal como se vería desde la izquierda.
Las medidas de la sección de la soldadura se indican sobre la línea de referencia:
§ A la izquierda del símbolo, las cotas principales relativas a la sección trasversal.
§ A la derecha del símbolo, las relativas a las dimensiones longitudinales.
Se utilizan dos tipos de símbolos:
§ Símbolos elementales que recuerdan, en general, la forma de la soldadura realizada, por ejemplo: soldadura en v ( V ) , soldadura en ángulo ( ), soldadura en y ( Y ), soldadura por puntos ( O ), soldadura en entallas o tapones ( ), etc.
§ Símbolos suplementarios que complementan a los anteriores e indican la forma de
§ la superficie de la soldadura, pudiendo ser de tres tipos: plana ( ), convexa ( )
La norma muestra a lo largo de nueve tablas los diferentes tipos de símbolos y casos de aplicación. De todos ellos y a modo de ejemplo., hemos representado dos casos de soldadura en ángulo.
4.7. Indicaciones de los estados superficiales en los dibujos. ( UNE 1 037 – 83).
La presente norma especifica los símbolos y las indicaciones complementarias de los estados superficiales en los dibujos técnicos. Establece doce clases de rugosidad ( desde N 1 a N 12 ) en función del valor de la rugosidad Ra en micrómetros ( desde 0,025 a 50 m. respectivamente ) y especifica la simbología a utilizar para expresar la dirección de las estrías del mecanizado final ( = , , X , M , C , R )
El símbolo general utilizado para la indicación del estado superficial es el representado en la figura adjunta, en el que al estar el triangulo cerrado por la parte superior indica que hay arranque de viruta. Si estuviera abierto pero con un pequeño circulo interior tangente a los dos lados restantes expresaría que no se permite el arranque de viruta. En él,
a = valor de la rugosidad Ra en micrómetros o número de la clase de rugosidad,
b = proceso de fabricación, tratamiento o recubrimiento,
c = longitud básica,
d = dirección de la estrías de mecanizado,
e = sobremedida para mecanizado y
f = otros valores de rugosidad.
El símbolo puede situarse directamente sobre la línea que representa la superficie de la pieza, sobre una prolongación de ella, o mediante una línea de referencia con flecha.
4.8. Tolerancias geométricas. ( UNE 1 121 – 91 ).
Aunque las tolerancias lineales y angulares ocupan una parcela importante en el campo del dibujo técnico por su trascendencia en el proceso de fabricación y montaje, no nos detenemos en ellas por estar dedicando esta parte del tema a la simbología.
La norma UNE 1 – 148 especifica las dimensiones y proporciones que deben tener los símbolos empleados en las tolerancias geométricas.
La norma UNE 1 – 121 – 91 establece los principios básicos de simbolización e indicación de tolerancias de forma, orientación, posición y oscilación en los dibujos técnicos. Completa y especifica características y simbología relativas a la Forma : rectitud
( ) , planicidad ( ) , redondez ( ), cilindricidad ( ), forma de una línea
( ), forma de un superficie ( ); a la Orientación : paralelismo ( ),
perpendicularidad ( ) , inclinación ( ); a la Situación: posición ( ) ),
concentricidad ( ), simetría ( ) y Oscilación: circular ( ) y total ( )
Las indicaciones necesarias para especificar las tolerancias geométricas se colocan en una caja rectangular dividida en dos o más compartimentos, que contendrán, de izquierda a derecha, el símbolo de la característica a controlar, el valor de la tolerancia en las unidades utilizadas en el acotado lineal ( precedido por el signo, si la zona es circular o cilíndrica), y , en su caso, la letra o letras identificadoras del elemento de referencia. Se adjuntan dos sencillos ejemplos de aplicación de la norma. ( pg. Anterior )
4.9. Otras normas y símbolos gráficos.
Por razones obvias de tiempo y amplitud de estas materias resulta imposible describir en este espacio normas relativas a elementos mecánicos como rodamientos, acoplamientos, tornillería, valvulería, etc. y otras normas del campo de la electricidad, electrónica, hidráulica, neumática, cinemática, etc
5. CONCLUSIONES.
Consideramos que el conocimiento de la normalización y su aplicación al correcto trazado de croquis acotados y planos a escala, es trascendental en el campo del Dibujo Técnico y en el temario de oposiciones no está tratado con la suficiente atención y amplitud. Es muy difícil recoger en unas pocas hojas de papel o exponer en un corto espacio de tiempo, aunque sea de forma resumida, lo más importante de cada una de las normas básicas empleadas en la confección de un buen croquis acotado de una pieza o mecanismo, por sencillos que estos sean.
En el Dibujo Técnico del Bachillerato, creemos que es importante hacer comprender al alumno la trascendencia de la Normalización en el campo industrial, por su influencia sobre la economía de materiales, la simplificación en métodos y técnicas de trabajo y la disminución de tiempos y costos.
La Normalización, utilizada por el alumno de forma activa, con el manejo de información documental y su aplicación a ejercicios prácticos, bajo la supervisión y guía del profesor, estimulará en aquel, el desarrollo de una mente ordenada, lógica y racional.