Tema 1 – La música como lenguaje y como medio de expresión.

Tema 1 – La música como lenguaje y como medio de expresión.

VALOR FORMATIVO DE LA MÚSICA. PERCEPCIÓN Y EXPRESIÓN. IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN MUSICAL EN LA ETAPA PRIMARIA. EL CURRÍCULO DE EDUCACIÓN MUSICAL EN LA CONCRECIÓN DE UNIDADES DIDÁCTICAS GLOBALIZADAS.

1.- LA MÚSICA COMO LENGUAJE Y COMO MEDIO DE EXPRESIÓN.

1.1.-EL VALOR FORMATIVO DE LA MÚSICA.

1.2.-OBSTÁCULOS DE LA EDUCACIÓN MUSICAL.

1.3.-PERCEPCIÓN Y EXPRESIÓN.

2.-IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN MUSICAL EN LA ETAPA PRIMARIA.

3.-EL CURRÍCULO DE LA EDUCACIÓN MUSICAL EN LA CONCRECIÓN DE UNIDADES DIDÁCTICAS GLOBALIZADAS.

4.-BIBLIOGRAFÍA.

1.-LA MÚSICA COMO LENGUAJE Y COMO MEDIO DE EXPRESIÓN.

La formación musical no consiste en crear grandes virtuosos de la interpretación de un instrumento, sino que va mucho más allá.

Se trata de crear un ser humano y desarrollar todas sus posibilidades físicas, psíquicas, afectivas, motoras, etc.

Cultivando la sensibilidad y la belleza interior, desarrollando su capacidad creadora y haciendo que los conocimientos musicales no queden en el intelecto de los alumnos como un cúmulo de datos incomprensibles en la mayoría sino, de hacer música viva.

Dice Dalcroze “trata de hacer sentir y no de conocer intelectualmente la música y crear una necesidad de expresión con ella”. La música ha tenido muy poca importancia en las escuelas de Enseñanza Primaria, siendo una actividad complementaria para cuando “sobraba tiempo” sin apreciar su valor formativo.

En la actualidad, pese a la revalorización que grandes músicos y pedagogos han venido realizando, como Justine Ward, Edgar Willems, Carl Orff, Zoltan Kodaly, etc., y modificando y creando nuevos métodos y técnicas más modernas y eficaces, sigue faltando esa revalorización de las materias artísticas.

No tiene sentido enseñar la música “sin ton ni son”, si objetivos, que es como usualmente se da la música, sino, saber apreciar y enseñar que a través del canto, por ejemplo, se desarrolla la capacidad lingüística del niño, tanto comprensiva como expresivamente. Con la ejercitación de las vocalizaciones y articulación de las palabras se corrigen defectos de pronunciación como dislalias, cacofonías, dislexias, etc.

Algunas tendencias pedagógicas, se inclinan por la globalización en la programación de diferentes asignaturas, sobre todo en la educación Infantil y primer ciclo, siendo muy importante el papel de la música en este campo.

En otros ciclos no ocurre así, no se combina la formación del niño, o a veces se comete el error de seguir globalizando, siendo la música el medio para conseguir otros fines que nada tienen que ver con el contenido musical, perdiendo ésta su propia identidad.

Dice Platón “La música es la parte principal de la educación porque se introduce desde el primer momento en el alma del niño y se familiariza con la belleza y con la virtud.”

1.1.-EL VALOR FORMATIVO DE LA MÚSICA.

La actividad musical ha estado postergada largo tiempo en las escuelas. La razón de esa falta de interés hacia esta disciplina es fácil de adivinar.

En una concepción de la educación musical marcadamente intelectualista y de signo pragmático como lo que ha caracterizado a la pedagogía tradicional, poco puede aportar el grupo de las disciplinas artísticas, y por ende la música, al ser consideradas todas ellas como “distractivas y de valor puramente ornamental”.

En la actualidad, gracias a la concepción integral de la educación, donde se hallan representadas las distintas facultades de la personalidad, las asignaturas se valorarán según su virtualidad y su capacidad de desenvolvimiento de la personalidad infantil y no ya sólo por la comunicación de un conjunto de conocimientos juzgados de primera necesidad en la vida.

Este cambio de criterio, trae como consecuencia el que las materias artísticas dejen de tener ese carácter circunstancial o complementario y ocupen el lugar que les corresponde en el programa escolar que durante tanto tiempo se les ha negado.

A partir del año 1958, fecha en que tiene lugar el II Congreso de la UNESCO sobre pedagogía musical, celebrado en Copenhague, existe un grupo de pedagogos y músicos entre los que se destaca Jaques Dalcroze, Ward, Martenot, y Carl Orff, cuya principal preocupación ha sido la revalorización de la Educación Musical en la escuela.

Los argumentos de este grupo de didactas para implantar la educación musical en la escuela son tener en cuenta, la educación musical sobre todo, porque los resultados prácticos han sido significativos y alentadores.

-El canto es un medio excelente para el desenvolvimiento de la capacidad lingüística del niño, en su doble vertiente expresiva y comprensiva.

Por otra parte, viene a suprimir determinadas formas de argot y defectos de pronunciación gracias a un cuidado minucioso en la articulación y vocalización de las palabras.

-Por medio de la práctica musical se crean toda una serie de lazos afectivos y de cooperación, tan necesarios para lograr la integración en el grupo, con la consiguiente pérdida de sentimientos contrarios a la labor educativa: recelo, timidez, etc.

-La educación musical, por desenvolverse en un ambiente de abierta camaradería y de sana alegría, actúa como un verdadero relajamiento para el niño y viene a romper ese tono de tensión y seriedad de que es preciso dotar a otras materias.

-Es un magnífico recurso para desarrollar la sensibilidad estética del niño a la vez que educa el buen gusto.

1.2.-OBSTÁCULOS DE LA EDUCACIÓN MUSICAL.

A pesar de los valores formativos que se le reconocen a la educación musical, ésta sigue siendo casi impracticable en las aulas.

Un buen número de maestros enseñan a sus escolares un repertorio de canciones populares o infantiles, para enseñar a cantar cinco o diez¼ canciones, desconectadas de un programa integral de educación musical, alejadas de los intereses artísticos de los niños, desprovistos de toda intención formativa y utilizando un método repetitivo, no es impartir una enseñanza musical, por lo menos en el sentido que se debe dar.

Claro está, la enseñanza musical alcanza su objetivo estético y formativo, cuando las canciones seleccionadas de acuerdo con las aptitudes interpretativas e intereses del niño sirven para conocer y vencer las dificultades de entonación y de rítmica.

Entonces el canto se convierte en medio y fin de la educación musical.

Estos criterios deben dirigir la acción docente para que la enseñanza musical no quede reducida a límites primarios en que unas cuantas canciones justifican todo un programa.

Las causas que determinan el actual retraso en la educación musical son:

. La falta de un adecuado ambiente musical.

. La falta de una adecuada preparación musical de profesor de Educación Musical.

. La ausencia de un método atractivo y realista aplicado en las aulas.

Una enseñanza musical que se hace exclusivamente con el aprendizaje de la nomenclatura musical o en la definición de hechos o fenómenos musicales resulta teórica y carente de sentido.

El método tradicional partía de la enseñanza del solfeo, y el lugar de comenzar por la emisión de los sonidos, se aborda el estudio a través de los símbolos de la lectura y escritura musicales.

De este modo, lo que podría ser motivo para la educación de la sensibilidad y el buen gusto, se convierte en una carga que el niño rechaza.

Enseñar música significa transmitir el lenguaje musical de forma viva. El niño debe aprender música haciendo música.

1.3.-PERCEPCIÓN Y EXPRESIÓN.

La Música es una forma de representación y comunicación basada en la ordenación temporal de la emisión de cierto tipo de sonidos.

Como forma de expresión, la música utiliza las cualidades del sonido para la manifestación de sentimientos, emociones e ideas. Constituye un elementos de comunicación interpersonal y permite la expresión creativa.

La música es expresión y también comunicación. Percibirla conscientemente y utilizarla como tal, equivale a lo que en lenguaje ordinario significa el hablar y el comprender. También el lenguaje musical se desarrolla teniendo como ejes la expresión y la percepción. La música, por otro lado, puede ser fuente de alegría, gozo y placer; todo lo cual no quita al ejercicio del análisis y de la crítica, como selección y valoración de lo percibido.

La música tiene una presencia permanente en la experiencia cultural, cuando se presenta cotidianamente y de manera persistente, gracias a medios de reproducción audiovisual. La música se encuentra hoy en día a altos niveles de difusión y comercialización. Su presencia amplia, sin embargo, no corresponde por igual a su disfrute consciente y reflexionado por parte del oyente.

Por todo ello, la educación musical resulta hoy indispensable. Con ella se pretende educar al alumno para observar, analizar y apreciar la realidad sonora general y, en particular, la música, producida tanto por materiales naturales inversos y la propia voz humana, como por instrumentos musicales mecánicos y electrónicos. Se pretende prepararle para gozar de las diferentes manifestaciones y participar en las actividades musicales, tanto en la escucha activa como en la producción o elaboración propia: canto, instrumentación y composición.

La educación musical ha de contribuir, además, a que los alumnos se formen criterios para valorar la calidad de la música y desarrollar preferencias y procedimientos específicos, como la audición, el análisis de datos sonoros, la prevención y defensa de agresiones sonoras y ambientales, el canto, la interpretación con instrumentos, la danza y el movimiento expresivo musical.

En Educación Primaria, la enseñanza de la música incluye percepción o escucha atenta y la expresión y elaboración musical.

a) En cuanto al ámbito de la expresión, la enseñanza y aprendizaje de la música se lleva a cabo a través de tres medios diferentes: la expresión vocal y el canto, la expresión instrumental y el movimiento y la danza.

La voz en su doble vertiente de lenguaje y canto es el instrumento comunicativo y expresivo por excelencia. Canciones, rimas y todo tipo de juegos con la voz son elementos básicos del comportamiento cotidiano musical del niño. La lengua, en este sentido, no es sólo un componente del canto, sino que posee sus propias posibilidades de expresión a través del timbre, el ritmo, la altura y el significado.

El canto constituye uno de los procedimientos esenciales de la expresión. Por ello, la canción como fusión entre música y lenguaje es el vehículo ideal para desarrollar de forma natural el acto de la comunicación. Los niños de primaria deben conocer muchas canciones que les aporten variedad expresiva, canciones con interés temático para enriquecer su representación del mundo y sus sentimientos. Con ellas es posible, de forma gradual, estimular su aproximación a la experiencia musical.

El canto puede desarrollarse al unísono o en polifonía (sencilla en esta edad) con otros. Todo ello educa al alumno en nuevos procedimientos y en el progreso en interacciones sociales.

La práctica instrumental favorece el desarrollo de capacidades muy diversas: cultiva e intensifica las destrezas motrices que todos poseen inicialmente, para sentir y expresar simultáneamente sus posibilidades de movimiento. La riqueza sonora del conjunto de los instrumentos provoca curiosidad auditiva y estimula la necesidad de la escucha, desarrollando hábitos esenciales para experiencias auditivas diversas.

El conjunto instrumental contribuye, además, al desarrollo de habilidades y actitudes cooperativas. La interacción que se establece promueve una de las vivencias esenciales de la música: la comunicación.

Una tercera realidad de la expresión musical la constituye el movimiento y la danza. Se entiende aquí por movimiento la actividad corporal desplegada en el espacio, con una parte o con la totalidad del cuerpo, y que está relacionada con acontecimientos musicales.

El movimiento musical es una espontánea expresión de sensaciones y sirve para entrar en contacto con otros, con uno mismo y con el entorno. El juego y la danza son, por naturaleza, actividades comunicativas que relacionan entre sí a las personas y dan sentido de comunidad. En la Educación Primaria, sobre todo en los ciclos primeros, las actividades de movimiento ocuparán un lugar destacado, tratando de fomentar la acción, pero también la calma y el reposo.

Por medio del movimiento se enseña a comprender e interpretar la música, sus contenidos esenciales y posibilidades expresivas. Es un reflejo de la capacidad de escucha de sonidos significados.

A través de la danza se interrelacionan los movimientos con otros medios de expresión. Hay que utilizar todos los medios posibles para integrar la expresión vocal e instrumental con la audición en actividades de danza y movimiento.

Los alumnos, en esta etapa, han de aprender un repertorio de danzas, al igual que de canciones y piezas instrumentales sencillas.

b) La percepción musical, o actividad de escucha activa, implica la sensibilización al mundo sonoro en general y, en particular, a patrones organizados de sonidos llamados música.

La comunicación perceptiva se establece aquí a través del oído. La capacidad auditiva libera al hombre del aislamiento de su mundo interior, le enriquece con nuevos pensamiento y vivencias y le relaciona con los demás. Es importante ofrecer al alumno la posibilidad de familiarizarse y analizar los sonidos del entorno, de seleccionar y describir los que son producidos por una gran variedad de fuentes sonoras y de apreciar las cualidades que sirven para clasificarlos, describirlos o nombrarlos. El avance del alumno en la apreciación de los sonidos musicales y de sus parámetros le permitirá oír música con atención, comprendiéndola y siendo capaz de describir y diferenciar lo que oye con un vocabulario musical apropiado.

En la Educación Primaria es importante desarrollar una escucha activa, habituando a los niños a valorar lo que de sonoro nos rodea, a percibir y jugar con los sonidos, con sus parámetros y variaciones y crear una actitud activa de selección de sonidos de calidad y de eliminación de los sonidos dañosos o molestos.

La educación auditiva ha de proponerse el conocimiento y la comprensión del lenguaje musical. Incluye actividades de diferenciación de altura, ritmo, duración, reconocimiento de frases musicales y formas, observación de contrastes dinámicos, percepción de fragmentos: iguales, parecidos, diferentes. Todo ello en conexión con la experiencia y práctica activa viva del alumno en el mundo musical y sonoro.

La audición de obras seleccionadas permite la apreciación de formas musicales, creaciones y organizaciones sonoras que sirve de modelo comparativo para las propias experiencias. En cuanto introducción a la cultura, la participación en actividades musicales culturalmente preparadas regirá el ejercicio consciente de la audición y la interpretación.

Aunque el trabajo en los primeros años es fundamentalmente acústico y de escucha atenta, de diferenciación de cualidades musicales del sonido, la lectura y escritura de la notación musical pueden iniciarse desde los primeros niveles.

2.-IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN MUSICAL EN LA ETAPA PRIMARIA

La Educación Primaria, debería potenciar el desarrollo de las capacidades que están en la base de la realización de dos procesos básicos: el de la expresión de sentimientos e ideas, y el de la percepción de representaciones plásticas, musicales y dramáticas. Ambos aspectos se encuentran íntimamente interrelacionados y se llama uno al otro en la dimensión comunicacional del proceso artístico.

El alumno ha de ser un elemento activo, tanto en la percepción o interpretación como en la expresión, elaboración o uso de formas de representación artística. En la Etapa de Educación Primaria resulta fundamental que ambos procesos se basen en la realización de experiencias personales, vivenciadas y lúdicas y gratificantes para el alumno. Gracias a la realización de experiencias de este tipo podrá crear marcos de referencia para la interpretación de nuevas experiencias, elaborar estrategias de captación de la realidad, grados de intensidad del sonido, gestos expresivos diferenciados y nuevos…

Es necesario que el alumno elabore las propias posibilidades en este campo y que consiga mejorar su capacidad interpretativa y expresiva gracias también al avance progresivo en el dominio de los códigos de representación de cada uno de los lenguajes artísticos. Uno y otro aspecto se potencian de modo independiente. La experiencia le ayudará a establecer relaciones entre los diferentes aspectos de la realidad y de los elementos artísticos, timbre, intensidad, etc., y las técnicas; el canto, la danza, la interpretación instrumental¼; le permitirán codificarlas y comunicarlas a otros mediante un lenguaje cultural compartido por el grupo social al que pertenece.

En la medida en que el alumno explore las propias posibilidades y consiga potenciarlas y enriquecerlas a través de la experiencia y mediante el conocimiento y uso progresivo de los códigos artísticos establecidos, podrá recrear los elementos normativos establecidos y aumentar la calidad de su expresión y el significado artístico de su producción.

Ejercitar al alumno en el proceso de elaboración musical no significa estimular únicamente el uso espontáneo de los propios recursos, confundiéndose en este caso espontaneidad expresiva con capacidad para la expresión o elaboración creativa. Supone, por el contrario, partiendo de ella, darles recursos apropiados para conferir a las propias realizaciones una mayor capacidad expresiva, propiciando el ejercicio de los recursos que hacen posible este proceso en situaciones variadas y con diferentes finalidades.

El dominio progresivo de los recursos formales y técnicos, indispensable para la elaboración expresiva o creativa, se ve facilitado por el análisis y reflexión específica e este campo, que se desarrollan experimentando con los diferentes elementos presentes en una unidad musical, y manipulándolos para explorar y encontrar relaciones nuevas entre ellos y, finalmente, sistematizar las cualidades expresivas de los mismos y sus relaciones.

Es difícil que este trabajo de experimentación, análisis y reflexión lo lleve a cabo el alumno satisfactoriamente de manera individual. Así que es necesario que el maestro lo planifique convenientemente y que preste el grado de ayuda necesario para llevarlo a cabo con un cierto grado de autonomía por parte del alumno. Se trata de que , en contraste con las propias producciones y las de otros compañeros en general, el alumno se inicie en la búsqueda de soluciones nuevas, o no estereotipadas, en los problemas que se le presentan en el curso de la elaboración artística o expresión.

3.-EL CURRÍCULO DE EDUCACIÓN MUSICAL EN LA CONCRECIÓN DE UNIDADES DIDÁCTICAS GLOBALIZADAS.

¿Qué es el currículo?

El currículo abarca todo aquello que el medio escolar ofrece al alumno como posibilidad de aprender: no sólo conceptos, sino también principios, procedimientos y actitudes, y que abarca, tanto los medios a través de los cuales le escuela proporciona esas oportunidades, como aquellos por los que evalúa los procesos mismos de enseñanza y aprendizaje.

Las distintas corrientes pedagógicas suelen coincidir en determinados aspectos el currículo. Así se refieren a él como el conjunto de intenciones educativas susceptibles de ser alcanzadas y el marco cultural que determina la práctica educativa.

La propia LOGSE, en su artículo cuarto, define el currículo como el conjunto de objetivos, contenidos, métodos pedagógicos y criterios de evaluación de cada uno de los niveles, etapas, ciclos, grados y modalidades del sistema educativo que regulan la práctica docente.

En general, se acepta que el currículo es un punto de conexión entre la sociedad y su escuela, de manera que contribuye a fijar las notas que éste debe conseguir a través de la socialización escolar.

El Planteamiento curricular adoptado por el MEC, es el de u Diseño Curricular Base (D.C.B.), abierto y flexible, que ha de quedar posteriormente determinado en sucesivos niveles de concreción por las comunidades Autónomas con competencias educativas, los centros educativos y por loa propios profesores.

DECRETO 105/1992, de 9 de Junio por el que se establecen las enseñanzas correspondientes a la Educación Primaria en Andalucía.

En el área de Educación Artística están comprendidas diversas formas de expresión y representación – plástica, musical y dramática – mediante las cuales el niño y la niña aprenden, expresan y comunican distintos aspectos de la realidad exterior y de su mundo interior.

La música emplea como elementos materiales y mediadores, ciertas cualidades articuladas del sonido: timbre, tono, intensidad, duración, ritmo…

Los diferentes soportes de las artes involucran códigos o sistemas subyacentes, con carácter representativo y normativo, adquiriendo así una dimensión lingüística. Realidades y conceptos como los de significado, significante, emisor y receptor, soporte material de la representación, expresión de la comunicación, son comunes a la expresión y a las expresiones artísticas, que, por tanto, pueden entenderse también como lenguajes. Estos lenguajes se interrelacionan y enriquecen mutuamente entre sí y con el lenguaje verbal.

Es necesario reconocer la importancia de los lenguajes artísticos en el desarrollo personal al hacer posible la expresión y comunicación de ideas, experiencias y sentimientos. En especial es de destacar su contribución al desarrollo de procesos de socialización. Contribuyen, junto con las demás áreas educativas, a promover el desarrollo de procesos autónomos, de exploración activa, de expresión personal, de creación, de búsqueda de estrategias propias de resolución de problemas, de sensibilidad estética y de relación con los demás.

La actividad de expresión y elaboración artística tiene un componente social y cultural importante. Es la sociedad y su cultura quien elabora los códigos de la creación, así como sus significados, constituyéndose estos en parte del patrimonio cultural de una comunidad. La educación, en consecuencia, ha de favorecer y hacer posible el acceso a ese patrimonio cultural, a su aprecio y valoración. Toda representación artística tiene un significado que se extrae de su contexto histórico-cultural, de su evolución en la historia. El acceso a dichas representaciones, a su valoración y significación es una forma de aproximarse al conjunto cultural de nuestras sociedades y, en concreto, de nuestra Comunidad.

La intervención educativa en música debe contribuir a que los niños y niñas construyan de forma significativa su experiencia, su pensamiento y fantasía.

Por ello, el trabajo con todo tipo de sonidos – su identificación, diferenciación y análisis – será una labor cotidiana en la clase de música. Con ello, el alumno y la alumna se irán familiarizando con dichos sonidos y se irán sentando las bases que les permitirán desarrollar distintos procesos para la selección, descripción y valoración de los mismos y para la escucha atenta de la música comprendiéndola y disfrutando de ella.

Es necesario desarrollar una escucha activa que sea el resultado de los progresos realizados en la selección, descripción, manipulación y apreciación de los sonidos donde el niño y la niña, con sus respectivas variaciones, logren jugar con ellos. Así podrán diferenciar los sonidos de calidad de aquellos que pueden ser dañinos y molestos.

El avance en el reconocimiento de las cualidades sonoras le ofrecerá la posibilidad de adentrarse en la producción sonora de valor cultural que es la música, identificando y comprendiendo el lenguaje musical: altura, duración, ritmo, reconocimiento de frases musicales, y de formas, percepción y memoria de fragmentos musicales, sensaciones expresadas en las obras, y el goce que estas pueden producirnos.

En cuanto a la expresión y producción musical, la educación musical utiliza tres medios: la voz y el canto, los instrumentos y el movimiento y la danza.

La voz es el medio más inmediato que tenemos para comunicarnos y expresarnos, tanto desde la vertiente del lenguaje como desde el canto. El descubrimiento de las posibilidades de la propia voz y la aceptación de ésta abrirá nuevas perspectivas en este campo.

La canción se constituye en el fenómeno principal en el mundo musical de niños y niñas, aspecto de especial emoción en el contexto de la cultura y la sensibilidad artística de Andalucía. Al mismo tiempo supone el punto de partida y la mejor plataforma desde la que potenciar el canto. Es muy importante que los niños y las niñas en Primaria conozcan muchas y variadas canciones.

Las canciones deben tener interés y significación para ellos y estar adaptadas en cada momento a su edad. Con ellas podrán dar salida a sus sentimientos, ampliando de esta forma sus posibilidades expresivas.

Los instrumentos son otro de los medios de expresión musical. Con la practica instrumental se favorece simultáneamente el desarrollo de una serie de capacidades entre las que destacaremos el control motor y todas aquellas derivadas de la audición. Los alumnos y alumnas utilizarán una gama de instrumentos sencillos de presencia habitual en el aula.

Es conveniente que los alumnos descubran cómo los objetos de su entorno también se pueden convertir en instrumentos que les irán acercando a las distintas familias instrumentales. Por su parte, el conjunto instrumental, como ocurre en el conjunto vocal, potenciará las relaciones de cooperación y la socialización en general.

En el movimiento rítmico y la danza se encuentran integrados la expresión corporal con los elementos musicales. El cuerpo es capaz de expresar y comunicar sensaciones y sentimientos a través de sus movimientos, relacionándose con los demás y con el espacio. Para ello, se potenciará en los alumnos y alumnas el control y dominio de sus movimientos, evolucionando desde el movimiento libre en el espacio, hasta llegar al aprendizaje de algunas danzas sencillas características del folclore andaluz.

A través de estos medios de expresión se ofrece a los alumnos la posibilidad de desarrollar la escucha atenta, el sentido y la coordinación del ritmo. La educación de ritmo debe aprovechar las posibilidades que ofrece el rico y variado repertorio de danzas y canciones populares que integra el folclore andaluz. Así mismo, debe basarse en las manifestaciones espontaneas de los niños y niñas cuando cantan, utilizan cualquier instrumento o se mueven al hilo de una audición musical.

Todos estos procesos de interiorización y vivenciación rítmica servirán de marco para la iniciación a la lectura y escritura de la entonación musical, partiendo de las diferentes representaciones convencionales con los sonidos con que se ha trabajado.

El acercamiento a un sistema de signos debe surgir como consecuencia del progreso llevado a cabo en la práctica de la interpretación, creación y vivencia musical, y desde la búsqueda de un código de comunicación musical válido para todos nosotros, que nos permite construir y producir mensajes musicales. Para favorecer estas circunstancias se hace necesario adecuar el repertorio de canciones, piezas instrumentales y danzas.

En definitiva, en la Educación Primaria, la Educación Musical pretende que el niño y la niño puedan vivenciar, jugar y disfrutar con la música, creando sus propios mensajes y escuchando, comprendiendo y valorando los de los demás. Al mismo tiempo, se propone desarrollar la sensibilidad del niño y la niña ante algunas manifestaciones musicales que, como el flamenco, gozan de hondo arraigo popular en la cultura andaluza.

También la dramatización ha de ser objeto de estudio preferente en la Educación Primaria. Se rata de una forma de representación que utiliza el cuerpo, la voz, y el espacio y tiempo escénico para expresar y comunicar ideas, sentimientos y vivencias. Los diferentes elementos que la componen reciben también tratamiento educativo desde otras áreas, en particular desde el área de Educación Física, que contribuye al dominio progresivo de los aspectos motores y de la expresión corporal. Se vincula, en cambio, al área de Educación Artística, la vinculación de roles o papeles de representación e interpretación de sucesos y personajes. Se le atribuye también la dimensión estética y la integración en ella de los diferentes recursos y resortes expresivos.

Desde pequeños, los niños y las niñas participan en situaciones en las que escenifican y recrean personajes y formas de la vida habitual. El juego infantil tradicional es un juego que simbólicamente adopta pautas de comportamiento diferentes de las propias, estilos de conducta y valores diversos de los que habitualmente rigen la vida de niños y niñas en su comportamiento cotidiano. En el área de Educación Artística, y en lo tocante al ámbito de la dramatización, se trata de enriquecer los recursos expresivos y representativos que el niño posee (voz, disfraz, gesto dramático, movimiento corporal) preocupándole los medios para sistematizarlo y usarlos en la adopción de otros roles ampliando así el campo de que disponen para comunicar a los demás un mensaje o un “efecto” determinado. De este modo, el alumno y la alumna toman progresiva conciencia de sus posibilidades y las canaliza al servicio de expresar y representar para otras personas y, en cierto modo también, para sí mismo.

Las realizaciones dramáticas tienen mucho en común con otras posibilidades expresivas con las que se complementan y enriquece mutuamente la plástica, la música, el tratamiento expresivo de la imagen… La percepción y realización del comportamiento dramático en la creación escénica supone utilizar muchas capacidades y destrezas que el alumno posee y que han podido ser adquiridas en otras áreas (Lengua y Literatura, Educación Física, Conocimiento del Medio…), así como en otros campos del área de Educación Artística.

En la dramatización ha de ponerse el acento en el conjunto de la integración de los diferentes elementos. Por su carácter eminentemente globalizador, la dramatización utiliza, de forma interrelacionada, contenidos complementados en otras áreas y en otros campos artísticos. En ella se conjuga el lenguaje y la comunicación verbal con la expresión y comunicación no verbal, a través de movimientos, gestos faciales y expresiones corporales. La dramatización también puede realizarse a través de sustitutos simbólicos de la persona humana como son el guiñol o las marionetas. A través de estos sustitutos, los niños y niñas pueden identificarse o distanciarse de los roles y acontecimientos escenificados.

La escenificación, tanto a través del propio cuerpo como a través de los sustitutos simbólicos, puede llevarse con sujeción o no a un texto o guión previo. Muchas de las propuestas y posibilidades de expresión dramática parten de elementos ya conocidos (una palabra, una canción, una vivencia o conflicto) o de propuestas específicas para ese fin (textos dramáticos, argumentos o guiones para representarse individualmente o en grupo). Entre los contenidos de la dramatización en esta etapa ha de estar el desarrollo de la capacidad para representar otros papeles, representando, expresando y explorando a través de ellos otras posibilidades del propio ser. Todo esto puede hacerse de forma específica a través del juego dramático, la pieza teatral, el mimo; pero, ante todo, en el llamado juego de roles, donde, sobre una pauta sumamente genérica y sobre un texto sin definir, los individuos desarrollan espontáneamente una escena en la que cada cual desempeña un papel que trata de crear sujetándose al argumento general de la situación simulada. También puede hacerse en la representación sujeta a un texto, como ocurre en la interpretación de breves escenas teatrales, tomadas de la literatura infantil o elaboradas en parte o totalmente por los niños y niñas.

OBJETIVOS.

Los objetivos, según el Anexo I del Decreto 105 / 1992 de 9 de junio por el que se establecen las enseñanzas correspondientes a la Educación Primaria en Andalucía, se entienden como las intenciones que sustentan el diseño y la realización de las actividades necesarias para la consecución de las grandes finalidades educativas. Se conciben así como elementos que guían los procesos de enseñanza-aprendizaje, ayudando a los profesores en la organización de la labor educativa.

Los objetivos del área de Educación Artística en Educación Primaria, deben entenderse como aportaciones que, desde el área, se han de hacer a la consecución de los objetivos de etapa.

La enseñanza de la Educación Artística (en su apartado de la Educación Musical, que es el que a nosotros nos interesa de manera principal ahora) tendrán como objetivo contribuir a desarrollar en los alumnos y las alumnas las siguientes capacidades :

1.-Comprender las posibilidades del sonido, la imagen, el gesto y el movimiento como elementos de representación personal y autónoma, y aprender a utilizarlas.

Este objetivo se refiere a la necesidad de enriquecer y diversificar las posibilidades de comunicación de los niños y niñas, a partir del conocimiento y utilización de instrumentos expresivos especialmente idóneos para comprender y transmitir ideas, sentimientos y vivencias personales a estas edades.

2.-Aplicar sus conocimientos artísticos a las características más significativas de las situaciones y objetos de la realidad cotidiana.

Se trata de que los alumnos y alumnas sean capaces de seleccionar aquellas características del medio que consideren más útiles y adecuadas para el desarrollo de las actividades artísticas y expresivas. El entorno se convierte así en una singular fuente de información a partir de la cual se pueden observar los distintos elementos que incluyen las diferentes actividades artísticas.

3.-Utilizar el conocimiento de los elementos plásticos, musicales y dramáticos básicos en el análisis de realizaciones artísticas propias y ajenas.

Este objetivo propone la aproximación al conocimiento de los elementos básicos que configuran la estructura formal de los diferentes lenguajes artísticos con el fin de facilitar la expresión artística de ideas, sentimientos y vivencias personales, y el análisis y comprensión de las obras ajenas. Este conocimiento ha de ser construido en el contexto de dicha finalidad y mediante el consenso social que supone la asignación de significados, especialmente en el entorno de la creación artística.

4.-Expresarse y comunicarse produciendo mensajes diversos, utilizando para ello los códigos y formas básica de os distintos lenguajes artísticos, así como sus técnicas específicas.

Ello supone la creación de mensajes para la comunicación en el ámbito de los distintos lenguajes artísticos, favoreciendo el conocimiento y la utilización de los códigos, las formas y las técnicas básicas de los mismos. Dichos códigos abarcan desde los creados por el niño y la niña y otros no convencionales, hasta los considerados convencionales.

El desarrollo de esta capacidad se incrementará mediante el uso simultaneo de diferentes códigos y lenguajes en contextos de interacción y comunicación con sentido vital para niños y niñas.

5.-Realizar actividades artísticas de forma cooperativa que supongan papeles diferenciados y complementarios en el desarrollo del proceso.

Este objetivo implica igualmente que en la realización de esas actividades en forma cooperativa se deberá potenciar el comportamiento solidario, rechazando discriminaciones basadas en diferencias de sexo, clase social, creencias, raza y otras características individuales y sociales.

6.-Explorar materiales e instrumentos musicales, plásticos y dramáticos, para conocer sus propiedades y posibilidades de utilización, fines expresivos, comunicativos y lúdicos.

Este objetivo debe ir en estas edades a la adquisición de determinadas habilidades y destrezas instrumentales. Dicho aprendizaje, unido al conocimiento de los elementos formales, servirá a los alumnos para desenvolverse con eficacia dentro de nuestra cultura y saber elegir adecuadamente el lenguaje y los instrumentos que exprese mejor lo que quiere comunicar.

7.-Utilizar la voz y el propio cuerpo como medio de representación y comunicación plástica, musical y dramática.

Este objetivo deberá contribuir al equilibrio afectivo del alumno y la alumna y a la relación con los demás. Del mismo modo enriquecerá sus potencialidades expresivas sirviendo de causa para comunicar sus sensaciones, ideas y sentimientos.

La valoración y conocimiento de las posibilidades expresivas del propio cuerpo debe llevarle también al conocimiento y práctica de hábitos de salud y bienestar.

8.-Conocer los medios de comunicación en los que operan la imagen y el sonido, y los contextos en los que se desarrollan, siendo capaz de apreciar críticamente los elementos de interés expresivo y estético.

9.-Tener confianza en las elaboraciones artísticas propias, disfrutar con su realización, y apreciar su contribución al goce y al bienestar personal.

Este objetivo supone entender el proceso de creación como un proceso de creación personal y libre. Esto permitirá desarrollar la creatividad desde el disfrute y el goce de sus producciones, potenciando su autoestima y valorando su repercusión en el bienestar personal, contribuyendo, paralelamente a la apreciación y el respeto de las producciones de los demás.

10.-Conocer y respetar las principales manifestaciones artísticas y musicales de Andalucía, así como los elementos más destacados del patrimonio artístico español.

Es fundamental en esta etapa contribuir a una mejor comprensión del entorno andaluz, así como a la defensa y conservación del mismo para conseguir una integración activa y responsable del futuro ciudadano en el medio sociocultural en el que vive. Para ello es importante que reconozca y valores las distintas manifestaciones artísticas y musicales andaluzas que constituyen su más cercano Patrimonio Artístico.

CONTENIDOS

Al fijar los objetivos se ha comenzado a concretar el marco general de referencia, delimitando qué debe enseñarse a través del área de Educación Artística en esta etapa educativa. Con el desarrollo del capítulo de contenidos se pretende concretar mas ésta intencionalidad, completando así lo referente a qué enseñar.

Como se recoge en el Anexo de Aspectos Generales, se entiende por contenidos tanto los conceptuales como los procedimentales y actitudinales.

Los contenidos del Area Artística pretenden favorecer el descubrimiento de nuevas vías de expresión, estimular la sensibilidad, y desarrollar la creatividad y la capacidad de percepción y observación en los niños y niñas de estas edades.

Los contenidos que integran el área se articulan en torno a tres estrategias básicas en los diferentes lenguajes artísticos, que implican una determinada secuencia en el proceso de aprendizaje de los recursos conceptuales, los procedimientos y actitudes propios de este campo de conocimiento. La primera de ellas se refiere al desarrollo de los procesos perceptivos en relación con el propio cuerpo y las realidades del entorno; la segunda se relaciona con la expresión artística de lo observado a través de la utilización del lenguaje dramático, musical o plástico; la tercera alude al análisis de elaboraciones artísticas propias o ajenas realizadas de forma sensible.

Con este tipo de presentación de los contenidos sólo se pretende indicar cuáles son los aspectos más relevantes que deberán ser objeto de aprendizaje. Es competencia de los distintos equipos de profesores establecer distintas formas de organización, secuenciación y concreción que favorezcan un tratamiento integrado y adaptado a las distintas situaciones y contextos escolares, y a los distintos intereses y características de los alumnos.

EDUCACIÓN MUSICAL

APRENDER A ESCUCHAR.

La audición constituye un componente básico en las distintas actividades musicales que se realizan, de ahí su importancia en el marco de la educación Musical. La aproximación al sonido como principio protagonista de la música es posible a partir del entorno sonoro cotidiano, pues en él se puede descubrir la intensidad, el timbre, la duración y la altura, que son sus cualidades básicas. El conocimiento de éstas es fundamental para poder diferenciar, comparar, seleccionar y clasificar los diferentes sonidos, discriminando entre los agradables y aquellos que resultan molestos. De esta forma se contribuye a desarrollar la sensibilidad, la capacidad de selección y la memoria auditiva.

Por otra parte, la creciente oferta musical en la sociedad actual y la posibilidad de utilización de nuevos medios tecnológicos permitirán al niño y a la niña acercarse a las distintas manifestaciones musicales que constituyen una parte muy importante del Patrimonio Artístico y cultural de Andalucía, a su valoración e incluso a la elaboración de producciones propias.

La familiaridad de los alumnos y alumnas con las actuales corrientes musicales, con la música popular andaluza, constituye un valioso apoyo en este proceso. Por otra parte, la organización, planificación y asistencia a distintos acontecimientos musicales, así como la realización de fiestas y conciertos, constituyen un núcleo de actividades básicas en el que se puede conocer y ejercitar las normas de comportamiento más usuales en los espectáculos artísticos. Así como, conformará un marco de apoyo ideal para el tratamiento y estudio de la obra musical en la escuela, en el entorno, en los medios de comunicación y, n definitiva, en el ámbito sociocultural.

Finalmente, conviene potenciar el respeto y la valoración de la música popular andaluza, y dentro de ella, l flamenco, y de manifestaciones musicales de otras culturas y países distintos del nuestro. Ello debe contribuir a propiciar el descentramiento cognitivo y efectivo del alumno y el desarrollo de la empatía artística, social y cultural.

-CANTO, EXPRESIÓN VOCAL E INSTRUMENTAL.

La voz y el cuerpo deben ser los principales focos de atención en el, marco de la expresión vocal e instrumental. El descubrimiento y la manipulación de sus posibilidades sonoras y expresivas permitirán al niño y a la niña acercarse a otras nuevas formas de comunicación en las que la interpretación de canciones y piezas instrumentales sencillas, tanto individualmente como en grupo, constituirán elementos de uso cotidiano.

Los objetos del entorno se pueden convertir en instrumentos que, junto con los que habitualmente se encuentran en el aula, ofrecen considerables variedades tímbricas. El niño y la niña se familiarizarán con estos instrumentos, diferenciando las características que los diferencian y que permiten agruparlos en familias, así como utilizarlos en el acompañamiento de canciones y danzas, entre las cuales hay que señalar las pertenecientes al Patrimonio Andaluz.

Se deben potenciar las actividades de improvisación de motivos, frases y pequeñas formas rítmicas y melódicas. Dicha improvisación permite disponer de un ámbito en el que el niño y la niña pueden utilizar sus vivencias e informaciones musicales para la elaboración de las actividades antes expuestas. Por otra parte, es importante que aprecien y valoren las actividades vocales e instrumentales y disfruten con ellas. Al mismo tiempo se debe fomentar actitudes de valoración de las formas de expresión vocal e instrumental propias de Andalucía, de las que el flamenco constituye un exponente específico.

Cabe destacar, del mismo modo, la valoración e importancia del silencio como uno de los componentes imprescindibles de la elaboración e interpretación musical, y el desarrollo de actitudes de confianza y progresiva autonomía en sus propias aportaciones y de cooperación en las actividades grupales.

– LENGUAJE MUSICAL.

El conocimiento del código que utiliza la música es imprescindible para la comprensión, el análisis y la elaboración de mensajes musicales. Existen distintas normas de representar gráficamente los sonidos que se perciben, y cada una de ellas proporciona informaciones sobre las características del sonido concreto y su interpretación. Los niños y niñas pueden llegar a descubrir distintas formas de representación mediante grafías no convencionales y sus posibilidades expresiva para comunicarlas a sus compañeros; también puede imitar y combinar diferentes sonidos para generar nuevos efectos sonoros y formas de expresión musical.

La constatación de las cualidades de los sonidos,(altura, intensidad, duración y timbre) y la necesidad de utilizar un código más general que ofrezca una mayor y más completa comprensión de los sonidos representados y los mensajes elaborados, servirán para la iniciación y el tratamiento de la notación musical cuando las necesidades de los niños y niñas lo requieran y su nivel cognitivo lo permita.

La experiencia y vivencia rítmica de los niños, unida a la realización de diversas actividades y juegos instrumentales, vocales y corporales, debe ser la base para hacer de la notación un elemento básico de comprensión y elaboración musical.

El tratamiento rítmico de las palabras, las frases y los textos, unido a la reproducción de unidades musicales sencillas como los ostinatos, las fórmulas rítmicas y la lectura de canciones y piezas instrumentales simples, pueden jugar un papel muy importante en el desarrollo y uso de la notación musical que puede continuarse y ampliarse a partir de la composición e improvisación en grupo de pequeñas piezas musicales. Con la utilización de todos estos elementos se trata de suscitar la atención y el interés del niño para comprender el significado de las grafías y las posibilidades de empleo creativo que tienen los recursos plásticos en la representación de la música y la danza.

ORIENTACIONES METODOLÓGICAS.

En el Anexo de Aspectos Generales se define el marco en el que debe encuadrarse ha enseñanza de cualquiera de las áreas de esta etapa educativa. Dentro de este marco conviene ofrecer una serie de pautas orientativas que guíen la actuación del profesorado en los procesos de enseñanza y favorezcan, paralelamente, los procesos de aprendizaje de los alumnos y alumnas.

Los distintos aspectos de la Educación Artística han de tener un tratamiento interrelacionado, contribuyendo al desarrollo de las capacidades del área y de la etapa, y tener la referencia, ineludible, de la existencia en Andalucía de una tradición y una cultura con unos rasgos específicos.

En el desarrollo metodológico del Area de Educación Artística deben jugar un papel relevante los conocimientos, experiencias, vivencias y opiniones previas de los alumnos. A partir de éstas se manifestarán los significados estéticos que han sido experimentados por los niños y niñas.

Los procesos personales de sensación, percepción, expresión e interpretación que organizan las experiencias estéticas de los alumnos deben orientar la planificación general de las actividades docentes y el proceso que se ha de seguir en las sesiones específicas de contenido artístico plástico, musical o dramático.

El papel relevante para la educación artística de la expresión comunicativa de las experiencias estéticas vivenciadas por los niños y niñas aconseja partir del respeto a la expresión espontánea y lúdica de sus experiencias y de sus interacciones, enraizadas en su mayor parte, en el entorno cultural y social de Andalucía.

A partir de ello suele ser habitual tomar como ejes de organización y puntos de arranque los aspectos procedimentales del área (observación, exploración, manipulación, creación…) para una posterior conceptualización, procurando en todo momento un proceso gratificante para alumnos y alumnas.

En términos generales y ya que la propuesta se articula en torno a la experiencia estética, bien sea plástica, musical y dramática, la primera función de este campo es “enseñar a ver”

El educador tiene un papel pedagógico decisivo si hace entender al alumno que el aprendizaje y el dominio de las técnicas le permitirán crear con mayor libertad y personalidad, pero que lo que necesita fundamentalmente es observar con el fin de interiorizar el entorno.

Con posterioridad podrá imaginar e inventar para comunicar y expresar lo que siente, tal como lo vive y lo ve, con entera fantasía y con la originalidad que sea capaz de manifestar, transmitiéndolo, así, vivencialmente y no como una reproducción mecánica.

Se debe procurar que la información no se convierta en mera descripción objetiva sino en un acto en el que se pongan de manifiesto la sensibilidad del alumno y sus experiencias y vivencias estéticas anteriores.

Como principios orientadores de la planificación y la intervención didáctica en el área se pueden señalar la investigación, la motivación y la creatividad.

La investigación ha de traducirse en la manipulación y experimentación sobre recursos, materiales y técnicas diversas en las elaboraciones artísticas, de manera fundamentalmente empírica e intuitiva, inscribiéndose en el marco del entorno andaluz y en las manifestaciones artísticas presentes en él, así como en la cultura propia de la sociedad, en la que vive el niño y la niña.

Partiendo de estas premisas, las actividades deben proporcionar una asimilación progresiva de los recursos conceptuales, los procedimientos y las actitudes propias de los lenguajes artísticos. La investigación , entendida así, no constituye un principio didáctico sino también una estrategia potencialmente motivadora.

La motivación es necesaria si se pretenden conseguir los objetivos propuestos. Entre el amplio repertorio de estrategias motivadoras existen algunas especialmente significativas, entre ellas las siguientes: la conexión de las actividades con el entorno sociocultural de la escuela, especialmente con las manifestaciones propias del entorno andaluz; la adecuación de las mismas a las capacidades del alumno; el planteamiento de problemas que respondan a sus intereses y necesidades; la realización de actividades que favorezcan el pensamiento divergente y faciliten la comunicación; la creación de situaciones que propicien la aplicación de la teoría a la práctica; la realización de juegos que implique realizaciones de grupos y trabajos cooperativos, etc.

La creatividad hace referencia a la capacidad para resolver problemas proponiendo soluciones alternativas y divergentes a una misma situación. Implica así mismo la creación de un trabajo original que pueda ser identificado por la persona y no sea mera reproducción de otro, sino que, como mínimo, sea interpretación de éste. Ello supone, desde el punto de vista metodológico, plantear las tareas con los suficientes grados de flexibilidad para poder enfocar los problemas con suficientes puntos de vista y poder pasar de unas soluciones a otras. Supone, igualmente, favorecer actitudes de habilidad y persistencia para llevar a cabo una creación venciendo las resistencias de índole material, personal y social. Supone, finalmente, favorecer distintos estilos de percepción y actitudes estilísticas concretas de utilización de la mente, algunas de ellas peculiarmente andaluzas.

Los recursos didácticos y materiales deberán destinarse a poner de relieve la fuerza expresiva nacida del propio cuerpo y la creatividad de los niños y niñas; nunca sustituirán a los propios sujetos, que son los ejes centrales de toda manifestación y vivencia artística. Al tenerse en cuenta los procesos expresivos antes que los resultados, los medios y los recursos estarán orientados a la profundización y matización experimental de cada aspecto sensorial, perceptivo y expresivo, frente a las necesidades coreográficas que exige la interpretación considerada como espectáculo.

Gran parte de los contenidos del área se desarrollan a partir de procedimientos de observación y manipulación del entorno. Ello incluye la utilización de multitud de materiales cotidianos y fáciles de obtener. A ellos hay que añadirles una serie de instrumentos y recursos materiales propios del área que el niño debe explorar, conocer y saber seleccionar de manera adecuada.

El diálogo, el debate y la confrontación ideas, experiencias y vivencias en actividades de grupo serán, entre otros, recursos que posibiliten el enriquecimiento de los alumnos, así como la evaluación común de los procesos artísticos asimilados. En este tipo de actividades se propiciará el intercambio fluido de los roles entre alumnos y alumnas y se potenciará la participación de éstas en las actividades de comunicación. Se contribuirá así, desde la propia actividad del aula, a establecer unas relaciones más justas y equilibradas entre los sexos.

Los recursos tecnológicos y los medios audiovisuales servirán para ilustrar experiencias o como materiales que faciliten la recogida de sesiones para ser revisadas y evaluadas conjuntamente.

El tiempo específico dedicado al desarrollo de os lenguajes artísticos y su organización atenderá a criterios cognitivos, expresivos y socioafectivos, nacidos tanto de la planificación del profesor en el aula como del proyecto educativo institucional, pero nunca quedará reducido a menos de dos sesiones semanales. Como actividad globalizable o globalizante, la plástica, música y dramatización podrán acabar el tiempo necesario para la realización de la actividad concreta programada por el docente.

Los espacios destinados para las sesiones donde se educa y potencia la experiencia estética del alumnado gozarán de la amplitud y estética necesarias para facilitar la movilidad, el juego y la creación de situaciones naturales ricas en matices artísticos.

En este contexto es importante tener en cuenta espacios y tiempos relativos a la organización y asistencia a espectáculos, conciertos, fiestas, acciones de calle, donde confluyan aspectos artísticos pertenecientes a la tradición andaluza y a movimientos artísticos contemporáneos, y donde se pongan en juego diversidad de recursos, escenarios y materiales.

Junto a ello hay que contemplar los recursos especiales y temporales para la organización de actividades destinadas a distintos tipos de agrupamiento de alumnos, y de aquellas en las que intervienen materiales que necesitan especial atención, cuidado y limpieza (pinturas, colas, escayolas…).

CRITERIOS DE EVALUACIÓN.

En el Anexo de Aspectos Generales se han definido los objetivos y las características de la evaluación del proceso educativo, así como el conjunto de elementos que deben evaluarse. La contribución específica que desde este área puede hacerse a este proceso se traduce en una mayor concreción de determinados aspectos de la evaluación del desarrollo de las capacidades de los alumnos. De ella pueden obtenerse informaciones para la evaluación del resto de los elementos que participan en el proceso educativo.

En este apartado, sin perjuicio de lo dispuesto a tales efectos en el Real Decreto 1006 / 1991, de 14 de junio, se establecen criterios que ayudan a valorar el desarrollo de las capacidades propuestas. La flexibilidad con que deben ser usados se comenta igualmente en el Anexo de Aspectos Generales.

Estos criterios de evaluación emanan de la justificación que ha hecho del área y, por tanto, de la propuesta de objetivos realizada.

La evaluación en el área de Educación Artística, debe proporcionar informaciones a cerca de la evolución, a lo largo de la etapa, de las capacidades de expresión de los alumnos y alumnas, de su capacidad de apreciación estética, de su creatividad, de la utilización que hacen de los medios materiales y recursos propios de los lenguajes artísticos.

SOBRE LAS CAPACIDADES DE EXPRESIÓN Y COMUNICACIÓN DE IDEAS, SENTIMIENTOS Y VIVENCIAS.

– Se deberá evaluar cómo el alumno utiliza las posibilidades expresivas de la imagen, el sonido, el gesto y el movimiento para la expresión de ideas, sentimientos y vivencias.

A través de este criterio se podrá comprobar la comprensión de los elementos fundamentales que integran los diferentes lenguajes artísticos y la utilización de éstos en situaciones de expresión, creación de mensajes e improvisación de propuestas artísticas.

– Se comprobará cómo se utilizan los códigos y formas básicas de los distintos lenguajes artísticos, con sus técnicas específicas, para la producción de diferentes mensajes que le permitan expresarse y comunicarse.

Se trata de comprobar el nivel de utilización de los códigos, formas y técnicas artísticas para la comprensión y creación de mensajes. Las canciones , las pequeñas piezas instrumentales, los juegos dramáticos, las danzas, las elaboraciones plásticas y visuales y las coreografías expresivas corporales ofrecerán a los alumnos ejemplificaciones diversas para la comprensión de dichos códigos, formas y procedimientos.

Por otra parte, es importante constatar el proceso de selección de los elementos de dichos códigos, así como la elección de las formas y técnicas adecuadas a las características del mensaje que quiera crear.

– Se comprobará, en diversos contextos y situaciones, el progreso del alumno para utilizar los materiales e instrumentos musicales, plásticos y dramáticos, con fines expresivos, comunicativos y lúdicos.

Esto implica el conocimiento de las propiedades y posibilidades de dichos materiales e instrumentos, y la aplicación práctica de las mismas, seleccionando, en cada momento, aquellas que se consideren más adecuadas para los fines expuestos. Las situaciones de improvisación artística constituyen un marco especialmente adecuado para la evaluación de estos procesos.

– Se evaluará el nivel alcanzado en la utilización técnica y expresiva de la voz y el cuerpo, para participar en actividades artísticas de dificultad progresiva. Así mismo, se observará la apreciación y valoración de la propia voz y el cuerpo, destacando su contribución al equilibrio personal y el desbloqueo para la expresión-comunicación.

Las actividades de canto, danza, y representación de historias sencillas servirán como medios para la aplicación de los recursos vocales y corporales, y ellas constituyen un contexto idóneo para la evaluación de dichas capacidades.

– Estas capacidades se podrían observar, entre otras, en situaciones como las de realización de representaciones plásticas en las que se tenga en cuenta los diferentes elementos con propiedad progresiva, en la representación por medio de imágenes secuenciadas de personajes, objetos y situaciones con determinado orden espacial o temporal, o en la utilización de los recursos expresivos del cuerpo, los objetos, la luz y el sonido para representar personajes y situaciones dramáticas como medio de expresión y comunicación.

SOBRE LAS CAPACIDADES DE ANÁLISIS DE HECHOS Y MANIFESTACIONES ARTÍSTICAS.

La clase, la calle, la casa, el barrio…ofrecen un amplio abanico de posibilidades para la realización de este proceso. En estos escenarios se pueden observar colores, formas sonidos, ritmos, movimientos, gestos…, que les permitirán establecer semejanzas y diferencias respecto de sus propias elaboraciones. En todos ellos, los alumnos podrán seleccionar aquellas características que posteriormente puedan ser utilizadas en la realización de actividades artísticas.

– Se comprobará si el alumno es capaz de utilizar progresivamente las características más significativas de situaciones y objetos de la realidad cotidiana, adquiriendo y aplicando en dicho progreso determinados conocimientos artísticos.

– Se constatará el progreso del alumno para analizar realizaciones artísticas propias y ajenas, utilizando para ello los conocimientos que se tienen sobre los elementos plásticos, musicales y dramáticos.

Para la realización de análisis de elaboraciones artísticas, el alumno y la alumna pondrán en juego sus conocimientos sobre los elementos propios de estos lenguajes artísticos.

Esto supone dotar de una justificación y fundamentación a dicho análisis y proporcionarle un marco adecuado sobre el que contrastar sus conocimientos sobre las distintas materias incluidas en el Area Artística.

Para comprobar cómo y en qué grado los alumnos y alumnas reconocen elementos de interés estéticos y expresivos en los medios de comunicación en los que operan la imagen y el sonido, se establecerán situaciones de interacción en las que éstos expresen sus ideas de diferentes formas. Los alumnos deberán utilizar sus conocimientos sobre los diferentes lenguajes artísticos para identificar en la televisión, en la radio, el cine y el video aquellos elementos que consideren que puedan tener interés expresivo y artístico.

– Se podrá identificar en ellos algunos elementos constitutivos del mensaje visual, como los signos, amplitud del plano, contenido…de los elementos constitutivos del lenguaje musical, como el ritmo, timbre, velocidad,…; y de los elementos constitutivos del juego dramático, como los personajes, conflictos, trama…

– Es también necesario observar si los alumnos son capaces de comentar, analizando sus argumentaciones, algunas manifestaciones artísticas de las que se desarrollan en el entorno del niño y la niña, respetando y apreciando su valor y estableciendo relaciones con los elementos que constituyen su experiencia personal.

Esto permitirá comprobar el nivel de conocimientos que tienen los alumnos a cerca de las distintas manifestaciones artísticas que se les ofrecen desde su entorno.

De igual modo, su identificación con ellas y con la aplicación de dichos conocimientos para comentar los elementos expresivos y estéticos que aparecen en éstas.

La asistencia a conciertos, exposiciones y representaciones teatrales servirán para, a partir de ellos o de su visión a través de los diferentes medios de reproducción, ser utilizados como protagonistas de debates entre los alumnos.

– Estas capacidades se pueden concretar, entre otras, en la observación de situaciones como las de identificación de algunas características plásticas y visuales observables en la descripción de algunos de los elementos constitutivos de los mensajes presentes en el entorno, en la identificación de los distintos aspectos de las cualidades el sonido y la descripción comentada de las características básicas de otras músicas sencillas y de juegos dramáticos, basándose en el diálogo y en el debate a partir de las manifestaciones artísticas a las que los niños y niñas tengan acceso y en relación con sus experiencias y gustos personales.

SOBRE LAS CAPACIDADES DE REALIZACIÓN DE ACTIVIDADES Y ELABORACIONES EN GRUPO, Y DE VALORACIÓN DE LAS MISMAS.

En este criterio hay que prestar una especial atención al tipo de relación entre los miembros del grupo, el comportamiento solidario y el posible rechazo de diferencias de clase social, creencias, géneros, razas…que puedan inferir en el desarrollo cooperativo de actividades artísticas.

Por otra parte, cabe destacar la evaluación de la selección y planificación de la actividad, su sistematización para la realización, y el nivel de participación de los niños y niñas que van a intervenir en ella.

– Se comprobará si el alumno ,no es capaz progresivamente de realizar actividades artísticas en grupo, de tal manera que los, integrantes del mismo asuman funciones específicas que se complementen unas a otras y que determinen el desarrollo de todo el proceso de elaboración.

– Habrá de observarse el nivel de disfrute del alumno y la alumna en sus elaboraciones artísticas constatando el nivel de confianza que va alcanzando en su realización y la valoración que haga de las mismas para su satisfacción personal.

Se trata de comprobar si va aumentando la confianza en sus elaboraciones propias, cómo se identifica con ellas y las valora, gozando durante el proceso de realización de las mismas, y el resultado obtenido.

– Estas capacidades podrán concretarse en actividades como la interpretación individual y grupal con movimiento, danza, canto, instrumentos; la realización de actividades plásticas con color, formas e imágenes; y la representación de historias sencillas y juegos dramáticos.

Estas actividades serán en algunos casos propias de cada una de las materias que constituyen el área, tales como murales, montajes de formas, montajes visuales, coro de clase, grupo instrumental, danza, juegos dramáticos…En otros serán actividades que integren los diferentes lenguajes artísticos y expresivos.

4.-BIBLIOGRAFÍA.

– “Orientaciones para la secuenciación de contenidos. Colección de materiales curriculares para la Educación Primaria” Junta de Andalucía. Consejería de Educación y Ciencia.

– “Educación Primaria. Área de Educación Artística.(Cajas Rojas)” MEC

– “Propuestas de secuencias. Educación Artística” Escuela Española y MEC.

– Real Decreto 105/1992, 9 de Junio por el que se establecen las enseñanzas en educación Primaria en Andalucía.