Sin perjuicio de su tratamiento específico en algunas de las materias de la etapa, y en cumplimiento de lo dispuesto en la Orden EDU/362/2015, de 4 de mayo, en el área de Cultura Clásica se trabajarán distintos elementos transversales de carácter instrumental, uno de los cuales hace hincapié en la adopción de medidas para estimular el hábito de la lectura y mejorar la comprensión y la expresión oral y escrita.
1. EDUCACIÓN EN VALORES
La enseñanza de Cultura Clásica debe potenciar ciertas actitudes y hábitos de trabajo que ayuden al alumno a apreciar el propósito de la materia, a tener confianza en su habilidad para abordarla satisfactoriamente y a desarrollarse en otras dimensiones humanas: autonomía personal, relación interpersonal, etc. Los valores se deben fomentar desde las dimensiones individual y colectiva. Desde la dimensión individual se desarrollarán, principalmente, la autoestima, el afán de superación, el espíritu crítico y la responsabilidad. Desde la dimensión colectiva deben desarrollarse la comunicación, la cooperación y convivencia, la solidaridad, la tolerancia y el respeto.
En el proyecto Savia de Secundaria, hemos decidido focalizar el trabajo en cinco valores, que consideramos fundamentales en esta etapa educativa. Son los siguientes:
1. Respeto
– A uno mismo: autoestima, dignidad, esfuerzo personal, honestidad y proyecto de vida.
– A los demás: empatía, escucha activa, diálogo y resolución de conflictos. Se puede trabajar con el enfoque de “deber” (“tenemos el deber de respetar a los demás”).
– A las culturas: ideas, lenguas, costumbres, y patrimonio.
– A los animales: evitar el daño innecesario y evitar la extinción de especies.
– A la naturaleza: evitar el deterioro medioambiental y evitar la extinción de especies.
2. Responsabilidad
– Frente a las tareas personales y de grupo: esfuerzo y compromiso.
– Frente a las normas sociales: civismo y ciudadanía. Se puede trabajar con el enfoque de “deber” (“tenemos el deber de…”).
– Frente a los conflictos y dilemas morales: información fiable, sentido crítico y posicionamiento.
– Frente al consumismo: consumo responsable y racional de productos.
– Frente a las generaciones venideras: desarrollo sostenible, y ética global a largo plazo.
3. Justicia
– Derecho a la igualdad, con especial referencia a la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y la prevención de la violencia de género, y a los valores inherentes al principio de igualdad de trato y no discriminación por cualquier condición o circunstancia personal o social.
– Derecho a la alimentación.
– Derecho a la salud.
– Derecho a la educación.
– Derecho a la paz, mediante el fomento del aprendizaje de la prevención y resolución pacífica de conflictos en todos los ámbitos de la vida personal, familiar y social.
– Derecho a la justicia internacional, basado en los valores que sustentan la libertad, la igualdad, el pluralismo político, la paz, la democracia, el respeto a los derechos humanos y el rechazo a la violencia terrorista, la pluralidad, el respeto al Estado de derecho, el respeto y consideración a las víctimas del terrorismo y la prevención del terrorismo y de cualquier tipo de violencia.
4. Solidaridad
– Con las personas cercanas que se sienten frágiles e indefensas ante su día a día.
– Con las personas que padecen una enfermedad grave o limitación de algún tipo.
– Con los inmigrantes, refugiados y desplazados.
– Con las víctimas del desequilibrio económico mundial.
– Con las víctimas de conflictos armados.
– Con las víctimas de desastres naturales.
5. Creatividad y esperanza
– El impulso de buscar alternativas.
– La confianza en que es posible mejorar las situaciones difíciles, los conflictos, a las personas y el mundo en general.
2. MEDIDAS PREVISTAS PARA ESTIMULAR EL INTERÉS Y EL HÁBITO DE LA LECTURA Y DE LA MEJORA DE LA EXPRESIÓN ORAL Y ESCRITA
Sin perjuicio de su tratamiento específico en algunas de las materias de la etapa, y en cumplimiento de lo dispuesto en la Orden ECD/1361/2015, de 3 de julio, en el área de Cultura Clásica se trabajarán distintos elementos transversales de carácter instrumental, uno de los cuales hace hincapié en la adopción de medidas para estimular el hábito de la lectura y mejorar la comprensión y la expresión oral y escrita.
La materia de Cultura Clásica requiere de la configuración y la transmisión de ideas e informaciones. Así pues, el cuidado en la precisión de los términos, en el encadenamiento adecuado de las ideas o en la expresión verbal de las relaciones hará efectiva la contribución de esta materia al desarrollo de la competencia en comunicación lingüística. El dominio de la terminología específica permitirá, además, comprender suficientemente lo que otros expresan sobre ella.
El uso sistemático del debate sobre distintos aspectos (por ejemplo, relacionados con la pervivencia de lo clásico en el mundo actual, de su influencia sobre las culturas posteriores, etc.), contribuye también al desarrollo de esta competencia, porque exige ejercitarse en la escucha, la exposición y la argumentación. De la misma manera, el hecho de comunicar ideas y opiniones, imprescindibles para lograr los objetivos relacionados (en este caso) con un mejor conocimiento de la sociedad en la que se vive y en la cultura que la sustenta, fomenta el uso, tanto del lenguaje verbal como del escrito.
También la valoración crítica de los mensajes explícitos e implícitos en los medios de comunicación (como, por ejemplo, en la prensa), puede ser el punto de partida para leer artículos, tanto en periódicos como en revistas especializadas, que estimulen de camino el hábito por la lectura.
El dominio y el progreso de la competencia lingüística en sus cuatro dimensiones (comunicación oral: escuchar y hablar; y comunicación escrita: leer y escribir), habrá de comprobarse a través del uso que el alumnado hace en situaciones comunicativas diversas. Pueden servir de modelo los siguientes ejemplos de situaciones, actividades y tareas (que, en su mayoría, se realizan a diario) que deben ser tenidas en cuenta para evaluar el grado de consecución de esta competencia:
a) Interés y el hábito de la lectura
– Realización de tareas de investigación en las que sea imprescindible leer documentos de distinto tipo y soporte. En este sentido, es interesante aprovechar la oportunidad que proporciona el acercamiento a la mitología.
– Lectura de instrucciones escritas para la realización de actividades lúdicas.
– Lecturas recomendadas: divulgativas, etc.
– Plan lector y participación en tertulias literarias sobre libros de su interés relacionados con eventos o personajes históricos.
– Elaboración en común de distintos proyectos de clase: un periódico, un blog, una gaceta de noticias, etc.
b) Expresión escrita: leer y escribir
– Análisis de textos y enunciados, para potenciar la corrección.
– Uso de distintos soportes y tipologías textuales (textos técnicos, tablas de datos, diccionarios, atlas, manuales, prensa, internet, etc.).
– Lectura en voz alta y en silencio.
– Lectura en voz alta, en todas las sesiones de clase, de la parte correspondiente a los contenidos que se van a tratar en esa sesión, del libro de texto o de cualquier otro documento usado como recurso, para evaluar aspectos como la velocidad, la corrección, la entonación, el ritmo, etcétera.
– A partir de la lectura del enunciado de las actividades a desarrollar, obtener la idea principal y parafrasear la cuestión que se propone, para poder dar la respuesta adecuada; esto es particularmente importante en la lectura de los enunciados de los ejercicios escritos.
– A partir de la lectura de un texto determinado (periódico, revista, etc.), indicar qué cuadro, qué representación, qué gráfico o qué título, entre diversos posibles, es el más adecuado para el conjunto del texto o para alguna parte del mismo, y extraer conclusiones; comprender y establecer relaciones cronológicas o de causa-efecto entre una serie de acciones; considerar alternativas; elaborar hipótesis, diferenciar hechos de opiniones y suposiciones, etc.
– Búsqueda y realización de biografías de grandes personajes, y lectura parcial de las mismas.
– Elaborar todo tipo de producciones escritas:
• Componer un texto libre sobre un tema determinado, a partir de alguna razón que lo haga necesario.
• A partir de la lectura de un texto determinado, elaborar resúmenes, esquemas o informes.
• Creaciones literarias propias (poemas, ensayos, cómics, etc.).
• Escritura social.
• Encuestas.
• Panfletos, murales, guiones, pósteres, etc.
• Escribir al dictado o realizar otro ejercicio o actividad que el profesor pueda proponer en cualquier momento como complemento a los contenidos tratados en las sesiones de trabajo.
• Uso de las TIC.
c) Expresión oral: escuchar y hablar
– Exposición de temas ante el grupo, con apoyo (en su caso) de imágenes u otras herramientas (PPT, esquemas, guiones, etc.), de las producciones realizadas personalmente o en grupo, sobre alguno de los temas que pueden tratarse en clase.
– Debate constructivo, respetando y aceptando las opiniones de los demás, como respuesta a preguntas concretas o a cuestiones más generales, como pueden ser: “¿Qué sabes de…?”, “¿Qué piensas de…?”, “¿Qué valor das a…?”, “¿Qué consejo darías en este caso?”, etc.
– Discusiones razonadas sobre cuestiones contenidas en los textos.
– Comunicar oralmente lo que han leído, parafraseando, reelaborando o interpretando correctamente los contenidos.
– Interacciones orales en pequeño grupo o en trabajo por parejas.
– Resumir oralmente lo leído.
– Producción de esquemas y dibujos.
– Elaboración de un guion para presentar el texto frente a un grupo de compañeros, y transformación de la estructura del texto.
– Escribir o dibujar el contenido leído en un texto.
– Actividades de trabajo cooperativo para aprender de los otros y con los otros; y, sobre todo, para propiciar situaciones de intercambios e interacciones orales.
– Parafrasear oralmente los enunciados de las actividades, utilizando sus propias palabras.
– Juegos lingüísticos (adivinanzas, acertijos, rimas, etc.).
– Dramatizaciones.
– Explicaciones e informes orales.
– Entrevistas.
– Presentación de diapositivas, dibujos, fotografías, mapas, etc., para que el alumno, individualmente o en grupo, describa, narre, explique, razone, justifique y valore el propósito de la información que ofrecen esos materiales.
– Cuentacuentos.
3. OTROS ELEMENTOS TRANSVERSALES DEL CURRÍCULO
Además de los elementos transversales de carácter instrumental que se acaban de mencionar, desde el área de Cultura Clásica se tratarán otros contenidos transversales y comunes, que deben afrontarse en todas las materias.
En el apartado de educación en valores, ya se ha puesto de manifiesto el compromiso de esta asignatura en la educación cívica y constitucional, basada en el conocimiento y respeto por los valores constitucionales de libertad, justicia, igualdad y pluralismo político, con especial atención a los derechos y deberes fundamentales: igualdad ante la ley; derecho a la vida; libertad religiosa e ideológica; libertad personal, libertad de expresión; derecho de reunión, asociación y participación; derecho a la educación, al trabajo, etc.
De la misma manera, se propiciará el conocimiento, valoración y respeto por la organización territorial del Estado en comunidades autónomas, así como la reflexión sobre los derechos (igualdad de género; protección de la familia; derechos de los menores y mayores; derecho a la educación, a las prestaciones sociales; derecho de las personas con discapacidad o minusvalía, etc.) y deberes ciudadanos (responsabilidad en el uso de los recursos públicos, cumplimiento de las obligaciones fiscales, participación en la vida civil, etc.).
Por su especial relevancia, también se prestará particular interés a las actividades que potencien la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y la prevención de la violencia de género, así como el aprendizaje de la prevención y resolución pacífica de conflictos en todos los ámbitos de la vida personal, familiar y social, así como de los valores que sustentan la libertad, la justicia y la igualdad, y la prevención del terrorismo y de cualquier tipo de violencia. Se adoptará una postura decidida a favor de la prevención de la violencia de género, de la violencia terrorista y de
cualquier forma de violencia, racismo o xenofobia, incluido el estudio del Holocausto judío como hecho histórico.
La reflexión sobre la justicia puede surgir a partir del análisis comparativo de la situación de los marginados (esclavos, mujeres, siervos, etc.).
Otro objetivo es valorar positivamente la diversidad humana, para intentar impedir el surgimiento de conductas xenófobas o intolerantes. El conocimiento y estudio de otros espacios y culturas es un elemento clave para fomentar en los alumnos la valoración positiva de la diversidad cultural del mundo como factor de enriquecimiento personal.
Ya en el apartado de educación en valores se comentó la incorporación de elementos curriculares relacionados con el desarrollo sostenible y el medioambiente. El estudio del uso de los recursos naturales en la Antigüedad clásica y el análisis de las relaciones ser humano-medio natural en las culturas griega y latina puede ser un buen punto de partida para el análisis de problemas ambientales concretos: espacios, problemas, transformación del medio y sus límites éticos, desarrollo sostenible, etc.
Las unidades dedicadas a la historia antigua son un buen lugar para reflexionar sobre la tolerancia de las civilizaciones clásicas hacia culturas y religiones diferentes de la suya. Asimismo, la historia antigua, plagada de guerras, enfrentamientos y conflictos, sirve como punto de arranque para la reflexión sobre las formas pacíficas de resolución de conflictos, ya presentes en ella (juegos olímpicos, pactos de federación romanos, treguas, arbitrajes, etc.).
La educación para la igualdad de sexos intenta evitar la discriminación por motivo sexual que todavía persiste en nuestra sociedad. El estudio del papel de la mujer en la época clásica debe incluir también un análisis crítico. Se ha de tratar de evitar la concepción historiográfica tradicional que olvida el papel jugado por la mujer en el devenir histórico. La situación especial de la mujer en cada una de las civilizaciones estudiadas se trata siempre en la información básica; hay además algunos desarrollos específicos que profundizan en el estudio y dan la pauta de análisis de la realidad femenina en la época clásica.
En cuanto a la educación para la salud, las civilizaciones griega y latina aportan un atrayente bagaje: además del interés específico en el conocimiento del cuerpo humano, ambas destacaron por su particular atención al cuidado del cuerpo, paralelo al desarrollo intelectual (mens sana in corpore sano). El estudio de los rituales de las termas romanas, por ejemplo, proporcionan un interesante motivo de debate sobre la necesidad de cuidar nuestra salud.
Además, se prestará atención al desarrollo de habilidades que estimulen la adquisición y desarrollo del espíritu emprendedor, a partir de aptitudes como la creatividad, la autonomía, la iniciativa, el trabajo en equipo, la confianza en uno mismo, la capacidad de comunicación, la adaptabilidad, la observación y el análisis, la capacidad de síntesis, la visión emprendedora y el sentido crítico. Con este fin, se propondrán actividades que ayuden a:
– Adquirir estrategias que ayuden a resolver problemas: identificar los datos e interpretarlos, reconocer qué datos faltan para poder resolver el problema, identificar la pregunta y analizar qué es lo que se pregunta.
– Desarrollar ejercicios de creatividad colectiva entre los alumnos que ayuden a resolver una necesidad cotidiana.
– Tener iniciativa personal y tomar decisiones desde su espíritu crítico.
– Aprender a equivocarse y ofrecer sus propias respuestas.
– Trabajar en equipo, negociar, cooperar y construir acuerdos.
– Desarrollar habilidades cognitivas (expresión y comunicación oral, escrita y plástica; aplicación de recursos TIC en el aula, etc.) y sociales (comunicación, cooperación, capacidad de relación con el entorno, empatía, habilidades directivas, capacidad de planificación, toma de decisiones y asunción de responsabilidades; capacidad organizativa, etc.).
Los epígrafes dedicados a la construcción de las calzadas romanas pueden ser el lugar adecuado para plantear el ámbito de la educación y la seguridad vial, para promover acciones para la mejora de la convivencia y la prevención de los accidentes de tráfico, con el fin de que los alumnos conozcan sus derechos y deberes como usuarios de las vías, en calidad de peatones, viajeros y conductores de bicicletas o vehículos a motor; respeten las normas y señales; y se favorezca la convivencia, la tolerancia, la prudencia, el autocontrol, el diálogo y la empatía con actuaciones adecuadas con el fin de prevenir los accidentes de tráfico y sus secuelas.
La metodología didáctica se entiende como el conjunto de estrategias, procedimientos y acciones organizadas y planificadas por el profesorado, con la finalidad de posibilitar el aprendizaje del alumnado y el logro de los objetivos planteados.
METODOLOGÍA GENERAL
Los principios psicopedagógicos generales surgen de las teorías del proceso de enseñanza y aprendizaje, que, a su vez, se desprenden del marco teórico o paradigma que las ampara. Nuestro enfoque se basa en los principios generales o ideas-eje siguientes:
1. Partir del nivel de desarrollo del alumno. Este principio exige atender simultáneamente al nivel de competencia cognitiva correspondiente al de desarrollo en el que se encuentran los alumnos, por una parte, y a los conocimientos previos que estos poseen en relación con lo que se quiere que aprendan, por otra. Esto se debe a que el inicio de un nuevo aprendizaje escolar debe comenzar a partir de los conceptos, representaciones y conocimientos que ha construido el alumno en sus experiencias previas.
2. Asegurar la construcción de aprendizajes significativos y la aplicación de los conocimientos a la vida. Para asegurar un aprendizaje significativo deben cumplirse varias condiciones. En primer lugar, el contenido debe ser potencialmente significativo (significatividad), tanto desde el punto de vista de la estructura lógica de la materia que se está trabajando como desde la estructura psicológica del alumno. En segundo lugar, es necesario que el alumno tenga una actitud favorable para aprender significativamente, es decir, que esté motivado para conectar lo nuevo que está aprendiendo con lo que él ya sabe, con el fin de modificar las estructuras cognitivas anteriores.
Si se producen aprendizajes verdaderamente significativos, se consigue uno de los objetivos principales de la educación: asegurar la funcionalidad de lo aprendido; es decir, que los conocimientos adquiridos puedan ser utilizados en las circunstancias reales en las que los alumnos los necesiten (transferencias).
3. Facilitar la realización de aprendizajes significativos por sí solos. Es necesario que los alumnos sean capaces de aprender a aprender. Para ello hay que prestar especial atención a la adquisición de estrategias de planificación del propio aprendizaje y al funcionamiento de la memoria comprensiva. Esta no es solo el recuerdo de lo aprendido, sino también el punto de partida para realizar nuevos aprendizajes. Cuanto más rica sea la estructura cognitiva donde se almacena la información y los aprendizajes realizados, más fácil será poder realizar aprendizajes significativos por uno mismo.
4. Modificar esquemas de conocimiento. La estructura cognitiva de los alumnos se concibe como un conjunto de esquemas de conocimiento que recogen una serie de informaciones, que pueden estar organizadas en mayor o menor grado y, por tanto, ser más o menos
adecuadas a la realidad. Durante el proceso de aprendizaje, el alumno debería recibir informaciones que entren en contradicción con los conocimientos que hasta ese momento posee y que, de ese modo, rompan el equilibrio inicial de sus esquemas de conocimiento. Superada esta fase, volverá el reequilibrio, lo que supone una nueva seguridad cognitiva, gracias a la acomodación de nuevos conocimientos, pues solo de esa manera se puede aprender significativamente.
5. Entrenar diferentes estrategias de metacognición. Una manera de asegurar que los alumnos aprenden a aprender, a pensar, es facilitarles herramientas que les permitan reflexionar sobre aquello que les funciona bien y aquello que no logran hacer como querían o se les pedía; de esta manera consolidan formas de actuar exitosas y descartan las demás. Además, mediante la metacognición, los alumnos son conscientes de qué saben y, por tanto, pueden profundizar en ese conocimiento y aplicarlo con seguridad en situaciones nuevas (transferencia), tanto de aprendizaje como de la vida real.
6. Potenciar la actividad e interactividad en los procesos de aprendizaje. La actividad consiste en establecer relaciones ricas y dinámicas entre el nuevo contenido y los conocimientos previos que el alumno ya posee. No obstante, es preciso considerar que, aunque él es el verdadero artífice del proceso de aprendizaje, la actividad educativa es siempre interpersonal, y en ella existen dos polos: el alumno y el profesor.
Podemos decir que la intervención educativa es un proceso de interactividad profesor- alumno o alumno-alumno, en el que conviene distinguir entre aquello que el alumno es capaz de hacer y de aprender por sí solo y lo que es capaz de aprender con la ayuda de otras personas. La zona que se configura entre estos dos niveles (zona de desarrollo próximo) delimita el margen de incidencia de la acción educativa. El profesorado debe intervenir en aquellas actividades que un alumno no es capaz de realizar por sí mismo, pero que puede llegar a solucionar si recibe la ayuda pedagógica conveniente. En la interacción alumno-alumno, hemos de decir que las actividades que favorecen los trabajos cooperativos, aquellas en las que se confrontan distintos puntos de vista o en las que se establecen relaciones de tipo tutorial de unos alumnos con otros, favorecen muy significativamente los procesos de aprendizaje.
Principios didácticos
Estos fundamentos psicopedagógicos implican o se concretan en una serie de principios didácticos, a través de los cuales se especifican nuevos condicionantes en las formas de enseñanza-aprendizaje, que constituyen un desarrollo más pormenorizado de los principios metodológicos establecidos en el currículo:
1. Asegurar la relación de las actividades de enseñanza y aprendizaje con la vida real del alumnado, partiendo, siempre que sea posible, de su propia experiencia.
2. Diseñar actividades de enseñanza-aprendizaje que permitan a los alumnos establecer relaciones sustantivas entre los conocimientos y experiencias previas y los nuevos aprendizajes, facilitando de este modo la construcción de aprendizajes significativos.
3. Organizar los contenidos en torno a ejes que permitan abordar los problemas, las situaciones y los acontecimientos dentro de un contexto y en su globalidad.
4. Favorecer la interacción alumno-profesor y alumno-alumno, para que se produzca la construcción de aprendizajes significativos y la adquisición de contenidos de claro componente cultural y social.
5. Potenciar el interés espontáneo de los alumnos en el conocimiento de los códigos convencionales e instrumentos de cultura, aun sabiendo que las dificultades que estos aprendizajes conllevan pueden desmotivarles; es necesario preverlas y graduar las actividades en consecuencia.
6. Tener en cuenta las peculiaridades de cada grupo y los ritmos de aprendizaje de cada alumno en concreto, para adaptar los métodos y recursos a las diferentes situaciones.
7. Proporcionar continuamente información al alumno sobre el momento del proceso de aprendizaje en el que se encuentra, clarificando los objetivos que debe conseguir, haciéndole tomar conciencia de sus posibilidades y de las dificultades que debe superar, y propiciando la construcción de estrategias de aprendizaje innovadoras.
8. Impulsar las relaciones entre iguales proporcionando pautas que permitan la confrontación y modificación de puntos de vista, la coordinación de intereses, la toma de decisiones colectivas, la ayuda mutua y la superación de conflictos mediante el diálogo y la cooperación.
METODOLOGÍA ESPECÍFICA
En el planteamiento de la materia de Cultura Clásica destacan los siguientes aspectos desde el punto de vista didáctico:
– El enfoque básico: comprender la Antigüedad para entender nuestro mundo
Con la materia de Cultura Clásica se pretende que los alumnos y alumnas de la ESO que hayan optado por esta asignatura se introduzcan en el conocimiento del mundo clásico, constituido por todo lo que formó las civilizaciones griega y romana, desde el ámbito familiar y de la vida cotidiana hasta la creación artística y la regulación del gobierno de Grecia y Roma.
A través del estudio de todo este mundo se quiere conseguir que los alumnos comprendan mejor su propio mundo, su propia cultura (heredera del mundo grecolatino), y mejoren su capacidad de crítica al discernir entre lo que hemos heredado de ellos y lo que hemos avanzado, no solo a nivel técnico, sino también humano.
Uno de los objetivos clave en esta asignatura es que los alumnos comprendan cómo es el mundo en el que viven, qué causas han provocado que sea así y qué consecuencias se derivan de que sea así. También se intenta favorecer la empatía del alumnado con culturas y mentalidades distintas de la propia, y su implicación personal en los problemas que afectan al mundo actual.
– Preocupación por las estrategias de aprendizaje
No basta con enseñar conocimientos, sino que hay que conseguir que el alumno adquiera un nivel adecuado de desarrollo de las competencias clave, es decir, que sea capaz de utilizar lo que sabe para plantear estrategias y resolver problemas.
En las actividades específicas de la unidad se ayuda a los alumnos a reflexionar sobre el propósito del aprendizaje y a plantear la forma de planificar, supervisar y evaluar su proceso de adquisición del conocimiento en contextos diversos: lectura de imágenes y mapas, interpretación de datos, comprensión de textos, etc. En las actividades finales de cada unidad se plantea la integración de los conocimientos adquiridos, así como el trabajo de las capacidades intelectuales de carácter general: definir, clasificar, comparar, sintetizar, explicar, analizar, valorar y argumentar.
Se tendrán en cuenta de manera especial la consolidación del hábito de estudio, y la valoración positiva de la responsabilidad y el esfuerzo continuado a la hora de solucionar los retos que le planteen al alumnado en las actividades, que serán tanto orales como escritas. Se dará asimismo especial relevancia a la corrección idiomática en las producciones orales y escritas (ya sea resultado de una investigación acerca de un tema en concreto, ya sea creación propia del alumno), la pulcritud, la coherencia y la utilización de vocabulario adecuado.
El trabajo en equipo y el Aprendizaje basado en problemas (ABP), profundiza en las estrategias de aprendizaje desde una perspectiva competencial.
Se utilizarán varios métodos didácticos, entremezclándolos:
– Interrogativo: preguntar frecuentemente a los alumnos conforme avanzamos en el desarrollo de cada unidad. Es una buena forma de conocer el punto de partida y animarles a participar.
– Inductivo: partiendo del análisis de fenómenos o manifestaciones particulares, llegamos a la generalización.
– Deductivo: aplicar a fenómenos concretos proposiciones de carácter general.
– Investigativo: propiciar procesos de búsqueda y elaboración de informaciones para favorecer la construcción de nuevos conocimientos.
– Dialéctico: llegar a conclusiones tras sucesivas fases de análisis y síntesis entre todos.
ACTIVIDADES Y ESTRATEGIAS DE ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE
Si bien este apartado merece un desarrollo específico en la programación de aula, conviene citar aquí algunas estrategias concretas aplicables a la enseñanza de esta materia.
La mayoría de ellas se desarrollan en actividades que se ajustan al siguiente proceso:
– Identificación y planteamiento de problemas.
– Formulación de hipótesis.
– Búsqueda de información.
– Validación de hipótesis.
– Fundamentación de conclusiones.
En el desarrollo de las sucesivas actividades se deberá tener en cuenta:
– Diagnóstico inicial.
– Trabajo individual.
– Trabajo en grupo. Puesta en común para fomentar actitudes de colaboración y participación de los miembros del mismo.
– Debates entre los distintos grupos con la doble intención de sacar conclusiones y respetar las opiniones ajenas.
Los pasos que hemos previsto al poner en práctica las estrategias señaladas son los siguientes:
– Observación.
– Descripción.
– Explicación.
– Deducción.
– Aplicación.
– Obtención de conclusiones.
En conclusión, se plantea una metodología activa y participativa, en la que se utilizará una diversa tipología de actividades (de introducción-motivación, de conocimientos previos, de desarrollo –de consolidación, funcionales o de extrapolación, de investigación–, de refuerzo, de recuperación, de ampliación/profundización, globales o finales). Nuestro enfoque metodológico se ajustará a los siguientes parámetros:
1. Se diseñarán actividades de aprendizaje integradas que permitan a los alumnos avanzar hacia los resultados de aprendizaje de más de una competencia al mismo
tiempo.
2. La acción docente promoverá que los alumnos sean capaces de aplicar los aprendizajes en una diversidad de contextos.
3. Se fomentará la reflexión e investigación, así como la realización de tareas que supongan un reto y desafío intelectual para los alumnos.
4. Se podrán diseñar tareas y proyectos que supongan el uso significativo de la lectura, la escritura, las TIC y expresión oral mediante debates o presentaciones orales.
5. La actividad de clase favorecerá el trabajo individual, en equipo y cooperativo.
6. Se procurará organizar los contenidos en torno a núcleos temáticos cercanos y significativos.
7. Se procurará seleccionar materiales y recursos didácticos diversos, variados, interactivos y accesibles, tanto en lo que se refiere al contenido como al soporte.
Estas estrategias se materializarán en técnicas como:
– Los diálogos.
– Los conflictos cognitivos.
– Las representaciones dramáticas.
– Los cuestionarios escritos.
– Los cuestionarios orales.
– Los comentarios de distintos tipos de textos (orales, escritos, audiovisuales).
– La exposición oral.
– El debate.
– El coloquio.
– La entrevista colectiva.
– Los mapas de contenido.
– La investigación bibliográfica.
– Los trabajos de investigación.
AGRUPAMIENTOS DE ALUMNOS
Se podrán realizar diferentes variantes de agrupamientos, en función de las necesidades que plantee la respuesta a la diversidad y necesidades de los alumnos, y a la heterogeneidad de las actividades de enseñanza/aprendizaje.
Así, partiendo del agrupamiento más común (grupo-clase), y combinado con el trabajo individual, se acudirá al pequeño grupo cuando se quiera buscar el refuerzo para los alumnos con un ritmo de aprendizaje más lento o la ampliación para aquellos que muestren un ritmo de aprendizaje más rápido; a los grupos flexibles cuando así lo requieran las actividades concretas o cuando se busque la constitución de equipos de trabajo en los que el nivel de conocimiento de sus miembros sea diferente, pero exista coincidencia en cuanto a intereses; o a la constitución de talleres, que darán respuestas a diferentes motivaciones. En cualquier caso, cada profesor decidirá, a la vista de las peculiaridades y necesidades concretas de sus alumnos, el tipo de agrupamiento que considere más operativo.
MODALIDAD DE AGRUPAMIENTO | NECESIDADES QUE CUBRE |
Trabajo individual | – Actividades de reflexión personal. – Actividades de control y evaluación. |
Pequeño grupo (apoyo) | – Refuerzo para alumnos con ritmo más lento. – Ampliación para alumnos con ritmo más rápido. – Trabajos específicos. |
Agrupamiento flexible | Respuestas puntuales a diferencias en: – Nivel de conocimientos. – Ritmo de aprendizaje. – Intereses y motivaciones. |
Talleres | – Respuesta puntual a diferencias en intereses y motivaciones, en función de la naturaleza de las actividades. |
Por su valor intrínseco en el fomento de la adquisición y el desarrollo de habilidades como la autonomía, la toma de decisiones responsable y el trabajo en equipo, es importante que se conformen grupos de trabajo heterogéneos para realizar trabajos cooperativos. Antes de iniciar los trabajos, es imprescindible que se proporcionen al alumnado herramientas que le ayuden a organizar el trabajo de manera autónoma y consensuada: distribuir roles en función de las habilidades e intereses, establecer plazos, realizar propuestas, debatirlas después de una escucha activa utilizando argumentos, tomar decisiones, consensuar propuestas, elegir los materiales necesarios y transformar las propuestas en productos concretos. Todo ello obligará al alumno a reflexionar sobre su propio aprendizaje, fomentará la convivencia y potenciará una de las herramientas más potentes y productivas para el aprendizaje: la enseñanza entre iguales.
Para asegurarse de la eficacia de la metodología cooperativa, el docente debe tener muy claro que la mayor parte del trabajo ha de realizarse dentro del aula y bajo su supervisión. El desarrollo de los trabajos fuera del centro ha de ser mínimo y relegado a tareas concretas como búsqueda o consulta de información no accesible desde el centro, así como el uso de medios o herramientas tecnológicas puntuales que los alumnos hayan decidido voluntariamente utilizar en su proyecto.
ORGANIZACIÓN DEL ESPACIO
El espacio deberá organizarse en condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación necesarias para garantizar la participación de todos los alumnos en las actividades del aula y del centro. Dicha organización irá en función de los distintos tipos de actividades que se pueden llevar a cabo:
ESPACIO | ESPECIFICACIONES |
Dentro del aula | – Se podrán adoptar disposiciones espaciales diversas. |
Fuera del aula | – Biblioteca. – Sala de audiovisuales. – Sala de informática. – Salón de actos. – Otros. |
Fuera del centro | – Visitas y actos culturales en la localidad. – Visitas y actos culturales fuera de la localidad. |
El espacio en el aula condiciona el uso de la metodología. Superando el modelo de ordenación del mobiliario tradicional, se proponen dos distribuciones alternativas, siempre que sea posible, cada una de ellas destinada a una dinámica diferente:
a) Asamblea, disposición en hemiciclo para exposición de conocimientos, participación, diálogo, debate y respeto del turno de palabra. Desde la posición central del aula, el profesor o los alumnos que deban argumentar o exponer, podrán establecer contacto visual con el resto de personas.
b) Agrupaciones de equipos cooperativos. Dependiendo del tipo de proyecto o tarea que se haya programado, los alumnos pueden organizarse en distintos tipos de agrupación, en función del objetivo que se desea conseguir:
I.- Grupos base: para desarrollo de proyectos entre cuatro y cinco miembros, normalmente con una duración trimestral o superior.
II.- Grupos aleatorios: para actividades puntuales con dos o tres integrantes. Es la agrupación ideal para tareas cortas de las unidades didácticas, entre una y cinco sesiones.
Entre otros instrumentos de evaluación conviene citar los siguientes:
– Exploración inicial
Para conocer el punto de partida, resulta de gran interés realizar un sondeo previo entre los alumnos. Este procedimiento servirá al profesor para comprobar los conocimientos previos sobre el tema y establecer estrategias de profundización; y para el alumno, para informarle sobre su grado de conocimiento de partida. Puede hacerse mediante una breve encuesta oral o escrita, a través de una ficha de evaluación inicial.
– Cuaderno del profesor
Es una herramienta crucial en el proceso de evaluación. Debe constar de fichas de seguimiento personalizado, donde se anoten todos los elementos que se deben tener en cuenta: asistencia, rendimiento en tareas propuestas, participación, conducta, resultados de las pruebas y trabajos, etc.
Para completar el cuaderno del profesor será necesaria una observación sistemática y análisis de tareas:
• Participación de cada alumno o alumna en las actividades del aula, que son un momento privilegiado para la evaluación de actitudes. El uso de la correcta expresión oral será objeto permanente de evaluación en toda clase de actividades realizadas por el alumno.
• Trabajo, interés, orden y solidaridad dentro del grupo.
• Cuaderno de clase, en el que el alumno anota los datos de las explicaciones, las actividades y los ejercicios propuestos.
– Análisis de las producciones de los alumnos
• Monografías.
• Resúmenes.
• Trabajos de aplicación y síntesis, individuales o colectivos.
• Textos escritos.
El uso de la correcta expresión escrita y oral será objeto permanente de evaluación en toda clase de actividades realizadas por el alumno.
– Intercambios orales con los alumnos
• Exposición de temas.
• Diálogos.
• Debates.
• Puestas en común.
– Pruebas objetivas
Deben ser lo más variadas posibles, para que tengan una mayor fiabilidad. Pueden ser orales o escritas y, a su vez, de varios tipos:
• De información: con ellas se puede medir el aprendizaje de conceptos, la memorización de datos importantes, etc.
• De elaboración: evalúan la capacidad del alumno para estructurar con coherencia la información, establecer interrelaciones entre factores diversos, argumentar lógicamente, etc. Estas tareas competenciales persiguen la realización de un producto final significativo y cercano al entorno cotidiano.
• De investigación: ABP.
• Trabajos individuales o colectivos sobre un tema cualquiera.
– Fichas de observación de actitudes del grupo-clase.
– Rúbricas de evaluación:
• Rúbricas para la evaluación: de cada unidad didáctica, de la tarea competencial, del trabajo realizado en los ABP y de comprensión lectora.
Rúbricas para la autoevaluación del alumno: de la tarea competencial, de trabajo en equipo, de exposición oral y de comprensión lectora
Han de ser conocidos por los alumnos, porque de este modo se mejora el proceso de enseñanza-aprendizaje. El alumno debe saber qué se espera de él y cómo se le va a evaluar; solo así podrá hacer el esfuerzo necesario en la dirección adecuada para alcanzar los objetivos propuestos. Si es necesario, se le debe proporcionar un modelo que imitar en su trabajo. Se arbitrará, también, el modo de informar sobre los criterios de evaluación y calificación a las familias de los alumnos, así como los criterios de promoción.
Los criterios de calificación deben tener como referencia los criterios de evaluación y los estándares de aprendizaje evaluables, y ha de ser especialmente cuidadoso en la utilización de herramientas de evaluación variadas y coherentes en todas las materias que se imparten en el centro.
Los resultados de evaluación se expresarán con números sin decimales de 1 a 10, que se añadirán a las siguientes calificaciones: Sobresaliente (9, 10), Notable (7, 8), Bien (6), Suficiente
(5) o Insuficiente (4, 3, 2, 1). La calificación “No presentado” solo podrá usarse cuando el alumno no se presente a las pruebas extraordinarias, salvo que hubiera obtenido otra calificación en la evaluación final ordinaria, caso en el que se pondrá la misma calificación.
Igual que en los restantes niveles de la ESO, la calificación de los alumnos de Cuarto se realizará sobre los contenidos mínimos y fijando más la atención en el razonamiento, expresión y procedimientos seguidos que en los resultados finales.
Las notas se obtendrán a partir de:
– Observación en clase
La observación de los alumnos en clase aporta muchos datos para la evaluación. Las intervenciones de los estudiantes, tanto en la pizarra como oralmente en el transcurso de una puesta en común se valorarán positivamente. Por el contrario, se hará una valoración negativa en el caso de que el alumno se niega a dar sus respuestas, bien por no haber realizado los ejercicios correspondientes o por manifestar apatía y falta de interés.
– Ejercicios escritos:
Estos ejercicios escritos podrán ser de una Unidad Didáctica, de un bloque de contenidos globales (de toda la materia abordada hasta ese momento). Aunque desde nuestro departamento se recomienda que sean por unidad didáctica, por lo que habría cuatro ejercicios escritos por evaluación, o bien uno por trimestre. Se deja a la libre elección del docente la posibilidad de utilizar materiales que ayuden a los alumnos a la realización de las pruebas (diccionarios, apéndices gramaticales, esquemas, …)
Para fijar la calificación definitiva de cada evaluación hemos de tener, al menos, dos notas de ejercicios escritas de cada alumno.
–Trabajos de diferentes tipos
Podrán ser individuales o en equipo, se dejará a iniciativa del profesorado el tipo de trabajo así como el contenido del mismo. Se recomienda que se realice al menos uno por trimestre. Se valorará sobre todo la dedicación invertida y en menor medida la corrección de los resultados y el alcance de las conclusiones obtenidas.
– Actividades .
Corresponde a este apartado las actividades que realizan los alumnos en casa o en clase y que se corrigen en la pizarra o de forma oral.
– Cuaderno de clase.
Se valorará fundamentalmente el que hagan los ejercicios y que se corrijan los errores, así como la calidad en cuanto a expresión, presentación, orden etc. se tendrá en cuenta positivamente si los errores aparecen destacados y corregidos, así como la claridad de los apuntes tomados y los cuadros resúmenes.
– Actitud
En este concepto se valorará no sólo el comportamiento en clase, sino también la participación, el interés por la asignatura y la realización de actividades.
– Asistencia a clase
Obtención de medias
Para obtener la nota media de cada evaluación se ponderarán la nota de las pruebas escritas, la nota de trabajos, de las actividades de clase diarias, cuadernos y de la actitud del alumno o alumna, de acuerdo con los siguientes coeficientes:
– Nota de ejercicios escritos: 30%
– Nota de trabajos individuales o de grupo: 10%
– Nota de las actividades que se corrigen en clase (en pizarra u oral): 10%
– Nota del cuaderno: 30%
– Nota de actitud: 10%
-Asistencia a clase: 10%
El departamento de latín ha optado por una evaluación continua, por lo que no es necesario hacer recuperaciones de evaluaciones no superadas, sino que con aprobar la siguiente evaluación se considera superada la anterior. No obstante, deja abierta la posibilidad de que el profesor de la materia realice todas aquellas recuperaciones que considere convenientes para la consecución de los contenidos.
Los alumnos que tengan pendiente de recuperación alguna evaluación anterior recibirán actividades extra de recuperación, que han de ser motivadoras, significativas y adaptadas al modo de aprendizaje de cada uno, y que deben ayudarle a alcanzar los objetivos. A modo de ejemplo, se propone que la realización de dichas actividades, en los plazos y forma que se le establezcan, podría contar un 30-40 % de la nota de recuperación, que se completaría en el 60-70 % restante con la nota obtenida mediante pruebas objetivas
En junio y en septiembre se realizarán pruebas extraordinarias a aquellos alumnos que no hayan superado la materia. Con la entrega de boletines se les proporcionarán a los alumnos que no han superado los contenidos una serie de actividades de refuerzo, que deberán entregar al comienzo del siguiente trimestre y se les calificará como una actividad de casa/trabajo.
En nuestro centro la Cultura Clásica sólo se imparte en 4º de la ESO, por lo que no hay posibilidad de que un alumno tenga la asignatura de cursos anteriores suspensa
La evaluación de la práctica docente debe enfocarse al menos con relación a momentos del ejercicio:
1. Programación.
2. Desarrollo.
3. Evaluación.
A modo de modelo, se propone el siguiente ejemplo de ficha de autoevaluación de la práctica docente:
MATERIA: | CLASE: | |
PROGRAMACIÓN | ||
INDICADORES DE LOGRO | Puntuación De 1 a 10 | Observaciones |
Los objetivos didácticos se han formulado en función de los estándares de aprendizaje evaluables que concretan los criterios de evaluación. | ||
La selección y temporalización de contenidos y actividades ha sido ajustada. | ||
La programación ha facilitado la flexibilidad de las clases, para ajustarse a las necesidades e intereses de los alumnos lo más posible. | ||
Los criterios de evaluación y calificación han sido claros y conocidos por los alumnos, y han permitido hacer un seguimiento del progreso de estos. | ||
La programación se ha realizado en coordinación con el resto del profesorado. | ||
DESARROLLO | ||
INDICADORES DE LOGRO | Puntuación De 1 a 10 | Observaciones |
Antes de iniciar una actividad, se ha hecho una introducción sobre el tema para motivar a los alumnos y saber sus conocimientos previos. | ||
Antes de iniciar una actividad, se ha expuesto y justificado el plan de trabajo (importancia, utilidad, etc.), y han sido informados sobre los criterios de evaluación. | ||
Los contenidos y actividades se han relacionado con los intereses de los alumnos, y se han construido sobre sus conocimientos previos. | ||
Se ha ofrecido a los alumnos un mapa conceptual del tema, para que siempre estén orientados en el proceso de aprendizaje. | ||
Las actividades propuestas han sido variadas en su tipología y tipo de agrupamiento, y han favorecido la adquisición de las competencias clave. | ||
La distribución del tiempo en el aula es adecuada. |
Se han utilizado recursos variados (audiovisuales, informáticos, etc.). | ||
Se han facilitado estrategias para comprobar que los alumnos entienden y que, en su caso, sepan pedir aclaraciones. | ||
Se han facilitado a los alumnos estrategias de aprendizaje: lectura comprensiva, cómo buscar información, cómo redactar y organizar un trabajo, etc. | ||
Se ha favorecido la elaboración conjunta de normas de funcionamiento en el aula. | ||
Las actividades grupales han sido suficientes y significativas. | ||
El ambiente de la clase ha sido adecuado y productivo. | ||
Se ha proporcionado al alumno información sobre su progreso. | ||
Se han proporcionado actividades alternativas cuando el objetivo no se ha alcanzado en primera instancia. | ||
Ha habido coordinación con otros profesores. | ||
EVALUACIÓN | ||
INDICADORES DE LOGRO | Puntuación De 1 a 10 | Observaciones |
Se ha realizado una evaluación inicial para ajustar la programación a la situación real de aprendizaje. | ||
Se han utilizado de manera sistemática distintos procedimientos e instrumentos de evaluación, que han permitido evaluar contenidos, procedimientos y actitudes. | ||
Los alumnos han dispuesto de herramientas de autocorrección, autoevaluación y coevaluación. | ||
Se han proporcionado actividades y procedimientos para recuperar la materia, tanto a alumnos con alguna evaluación suspensa, o con la materia pendiente del curso anterior, o en la evaluación final ordinaria. | ||
Los criterios de calificación propuestos han sido ajustados y rigurosos. | ||
Los padres han sido adecuadamente informados sobre el proceso de evaluación: criterios de calificación y promoción, etc. |
Además, es aconsejable escuchar también la opinión de los usuarios. En este sentido, es interesante proporcionar a los alumnos una vía para que puedan manifestar su opinión sobre algunos aspectos fundamentales de la asignatura. Para ello, puede utilizarse una sesión informal en la que se intercambien opiniones, o bien pasar una sencilla encuesta anónima, para que los alumnos puedan opinar con total libertad. En general, sería deseable que los alumnos se habituaran a plantear de manera espontánea propuestas de mejora al funcionamiento de la clase; para ello, es imprescindible que se les proporcione un entorno fiable y seguro en el que sus demandas sean debatidas y, eventualmente, aceptadas.
Los criterios de selección de los materiales docentes curriculares que adopten los equipos docentes se ajustan a un conjunto de criterios homogéneos que proporcionan respuesta efectiva a los planteamientos generales de intervención educativa y al modelo antes propuesto. De tal modo, se establecen ocho criterios o directrices generales que ayudan a evaluar la pertinencia de la selección:
1. Adecuación al contexto educativo del centro.
2. Correspondencia de los objetivos promovidos con los enunciados de la programación.
3. Coherencia de los contenidos propuestos con los objetivos, presencia de los diferentes tipos de contenido e inclusión de temas transversales.
4. Acertada progresión de los contenidos y objetivos, su correspondencia con el nivel y la fidelidad a la lógica interna de cada materia.
5. Adecuación a los criterios de evaluación del centro.
6. Variedad de las actividades, diferente tipología y su potencialidad para la atención a las diferencias individuales.
7. Claridad y amenidad gráfica y expositiva.
8. Existencia de otros recursos que facilitan la tarea educativa.
Entre los recursos didácticos, el profesor podrá utilizar los siguientes:
– La explicación del profesor cuando sea estrictamente necesaria; si no es imprescindible, mejor que los propios alumnos vayan progresando en el autoaprendizaje.
– Anuarios, atlas y revistas especializadas.
– Documentales referentes al mundo griego y romano.
– Prensa escrita (en la que el alumnado pueda apreciar la utilización de expresiones latinas o del mundo clásico para esclarecer aspectos de la realidad actual).
– CD de música con textos en lengua latina (Carmina Burana, Gaudeamus igitur, Adestefideles).
– Fotocopias de textos, gráficos, cuadros, tablas, etc.
– Proyección y comentario de películas que se desarrollen en la Antigüedad clásica:
Ágora, Gladiator, Golfus de Roma, Quo vadis?, Alejandro Magno, etcétera.
– Proyección y comentario de películas de tema mitológico: El vellocino de oro, Olimpo, etc.
– Uso de diapositivas de arte.
– Uso de las fichas de trabajo, actividades interactivas, animaciones, vídeos, autoevaluaciones, etc., del entorno Saviadigital: smsaviadigital.com, como herramientas que permiten atender diferentes necesidades y con distintos fines:
• Reforzar y consolidar los conceptos y aprendizajes básicos.
• Ampliar contenidos y profundizar en ellos.
• Desarrollar los estándares más procedimentales del currículo, como la escucha activa, la empatía, el debate, a través de tareas competenciales cercanas a los intereses de los alumnos.
• Investigar sobre problemas reales asociados a la materia de Cultura Clásica a través del PBL.
• Activar estrategias y mecanismos de comprensión lectora a partir de textos literarios y no literarios afines a la materia: buscar información, interpretar y relacionar datos, y reflexionar sobre el contenido y la forma.
– Uso del entorno Saviadigital para la interacción profesor-alumno de manera individualizada.
– Debate, como herramienta que estimula su interés y capacidad de reflexionar, relaciones, consolidar conocimientos, recapitular, ordenar, respetar opiniones, y sacar conclusiones.
– Bibliografía de consulta en el aula y en la biblioteca escolar. Como bibliografía básica, se proponen:
• ANGELA, A.: Un día en la Antigua Roma. La Esfera, Madrid, 2009. Un recorrido por la vida cotidiana en la ciudad de Roma a lo largo de un día del año 115 d. C.
• BARCELÓ, P. Y FERRER J. J.: Historia de la Hispania romana. Alianza, Madrid, 2008.
• BLANCO FREIJEIRO, ANTONIO: Arte griego. Madrid: CSIC, 2004.
• BIELER, L.: Historia de la literatura romana. Gredos, Madrid, 1992.
• MARTIN, R.: Diccionario Espasa de mitología griega y romana. Espasa, Madrid, 2003.
• BOWRA, C. M.: Introducción a la literatura griega. Madrid: Gredos, 2007. Un recorrido por la producción literaria de los griegos.
• Cabrera, P. y Sánchez, C. (eds.): Los griegos en España. Tras las huellas de Heracles. MEC, Madrid, 2004.
• GÓMEZ ESPELOSÍN, F. J.: Historia de Grecia antigua. Akal, Madrid, 2001. Un completo manual de historia griega.
• GRIMAL, P.: El Imperio romano. Planeta, Barcelona, 2000. Un compendio de la historia del imperio.
• VV. AA: Guzmán Guerra, Antonio (ed.): Constituciones políticas griegas (Aristóteles, el Viejo Oligarca, Jenofonte). Madrid: Alianza, 2007.
• JOHNSTON, H. W.: La vida en la antigua Roma. Alianza, Madrid, 2010. Un compendio acerca de la vida cotidiana, la sociedad y su organización de la antigua Roma.
• KERENYI, K.: La religión antigua. Herder, Barcelona, 1999. Un profundo análisis de muy diversos aspectos de la religión antigua: mitos, fiestas, templos, sacrificios, etc.
• LANE FOX, R.: El mundo clásico: la epopeya de Grecia y Roma. Crítica, Barcelona, 2007. Recorrido por el mundo de la Antigüedad clásica.
• LÓPEZ BARJA DE QUIROGA, P. Y LOMAS SALMONTE, F. J.: Historia de Roma.
Akal,Madrid, 2004. Amplia síntesis de la historia de Roma.
• LÓPEZ MELERO, R.: Así vivieron en la antigua Grecia: un viaje a nuestro pasado. Anaya, Madrid, 2009. Mediante estudios realizados en los últimos años sobre las mujeres, la familia o la policromía de los mármoles, se ofrece en este libro un panorama renovado de la vida cotidiana en la antigua Grecia.
• RODRÍGUEZ ADRADOS, F.: Historia de las lenguas de Europa: una visión general de la evolución de las lenguas de Europa, Gredos, Madrid, 2008.
• VV. AA.: Arte griego y arte romano. Enciclopedia visual. Scala Group, Milán, 2010. Una visión general e ilustrada del arte del mundo clásico.
– Uso habitual de las TIC. Entre otras, recomendamos las siguientes direcciones web:
• http://www.secundaria.profes.net/.
• http://www.smconectados.com/
• http://www.imperioromano.com/.
• http://www.culturaclasica.com/literatura/grecia/indice.htm.
• http://www.arteespana.com/artegriego.htm.
• http://www.profesorenlinea.cl/universalhistoria/3MUnidad_201.htm.
• http://rbme.patrimonionacional.es/
• .http://www.hispaniaromana.es/.
Por su especial importancia, destacamos la utilización habitual de las TIC, como un elemento transversal de carácter instrumental que constituye un recurso didáctico de excepcionales posibilidades.
Las TIC están cada vez más presentes en nuestra sociedad y forman parte de nuestra vida cotidiana, y suponen un valioso auxiliar para la enseñanza que puede enriquecer la metodología didáctica. Desde esta realidad, consideramos imprescindible su incorporación en las aulas de la ESO como herramientas que ayudará a desarrollar en el alumnado diferentes habilidades, que van desde el acceso a la información hasta su transmisión en distintos soportes, una vez tratada, incluyendo la utilización de las TIC como elemento esencial para informarse, aprender y comunicarse.
Otro factor de capital importancia es la utilización segura y crítica de las TIC, tanto para el trabajo como en el ocio. En este sentido, es fundamental informar y formar al alumnado sobre las situaciones de riesgo derivadas de su utilización, y cómo prevenirlas y denunciarlas.
El uso de las TIC implica aprender a utilizar equipamientos y herramientas específicos, lo que conlleva familiarizarse con estrategias que permitan identificar y resolver pequeños problemas rutinarios de software y de hardware. Se sustenta en el uso de diferentes equipos (ordenadores, tabletas, booklets, etc.) para obtener, evaluar, almacenar, producir, presentar e intercambiar información, y comunicarse y participar en redes sociales y de colaboración a través de internet.
Las TIC ofrecen al alumnado la posibilidad de actuar con destreza y seguridad en la sociedad de la información y la comunicación, aprender a lo largo de la vida y comunicarse sin las limitaciones de las distancias geográficas ni de los horarios rígidos de los centros educativos.
Además, puede utilizarlas como herramientas para organizar la información, procesarla y orientarla hacia el aprendizaje, el trabajo y el ocio.
La incorporación de las TIC al aula contempla varias vías de tratamiento que deben ser complementarias:
1. Como fin en sí mismas: tienen como objetivo ofrecer al alumnado conocimientos y destrezas básicas sobre informática, manejo de programas y mantenimiento básico (instalar y desinstalar programas; guardar, organizar y recuperar información; formatear; imprimir, etc.).
2. Como medio: su objetivo es sacar todo el provecho posible de las potencialidades de una herramienta que se configura como el principal medio de información y comunicación en el mundo actual. Al finalizar la ESO, los alumnos deben ser capaces de buscar, almacenar y editar información, e interactuar mediante distintas herramientas (blogs, chats, correos electrónicos, plataformas sociales y educativas, etc.).
Con carácter general, se potenciarán actividades en las que haya que realizar una lectura y comprensión crítica de los medios de comunicación (televisión, cine, vídeo, radio, fotografía, materiales impresos o en formato digital, etc.), en las que prevalezca el desarrollo del pensamiento crítico y la capacidad creativa a través del análisis y la producción de materiales audiovisuales.
En cuanto a la utilización de las TIC en la materia de Cultura Clásica, en este ámbito tienen cabida desde la utilización de imágenes o vídeos, hasta la visualización o realización de presentaciones PPT para ser expuestas en clase, el trabajo con recursos multimedia, pasando por la búsqueda y selección de información en internet, la utilización de hojas de cálculo y procesadores de texto, hasta el desarrollo de blogs de aula, el tratamiento de imágenes, etc.
Las principales herramientas TIC disponibles y algunos ejemplos de sus utilidades concretas
son:
1. Uso de procesadores de texto para redactar; revisar ortografía; hacer resúmenes; añadir títulos, imágenes, hipervínculos, gráficos y esquemas sencillos, etc.
2. Uso de hojas de cálculo sencillas para organizar información (datos) y presentarla en forma gráfica.
3. Utilización de programas de correo electrónico.
4. Usos y opciones básicas de los programas de navegación.
5. Uso de enciclopedias virtuales (CD y www).
6. Uso de periféricos: escáner, impresora, etc.
7. Uso sencillo de programas de presentación (PowerPoint, Prezzi, etc.): trabajos multimedia, presentaciones creativas de textos, esquemas o realización de diapositivas.
8. Internet: búsqueda y selección crítica de información.
9. Elaboración de documentos conjuntos mediante herramientas de programas de edición simultánea (Drive, etc.).
10. Utilización de los innumerables recursos y páginas web disponibles.
Por tanto, se debe aprovechar al máximo la oportunidad que ofrecen las TIC para obtener,
procesar y transmitir información. Resaltamos aquí algunas de sus ventajas:
– Realización de tareas de manera rápida, cómoda y eficiente.
– Acceso inmediato a gran cantidad de información.
– Realización de actividades interactivas.
– Desarrollo de la iniciativa y las capacidades del alumno.
– Aprendizaje a partir de los propios errores.
– Cooperación y trabajo en grupo.
– Alto grado de interdisciplinaridad.
Flexibilidad horaria.
La ESO se organiza de acuerdo con los principios de educación común y de atención a la diversidad de los alumnos. Por ello, la atención a la diversidad debe convertirse en un aspecto esencial de la práctica docente diaria.
En nuestro caso, la atención a la diversidad se contempla en tres niveles o planos: en la programación, en la metodología y en los materiales.
1. Atención a la diversidad en la programación
La programación debe tener en cuenta los contenidos en los que los alumnos consiguen rendimientos muy diferentes. Aunque la práctica y resolución de problemas puede desempeñar un papel importante en el trabajo que se realice, el tipo de actividad concreta y los métodos que se utilicen deben adaptarse según el grupo de alumnos. De la misma manera, el grado de complejidad o de profundidad que se alcance no puede ser siempre el mismo. Por ello se aconseja organizar las actividades en dos bloques de refuerzo y de ampliación, de manera que puedan trabajar sobre el mismo contenido alumnos de distintas necesidades.
La programación debe también tener en cuenta que no todos los alumnos progresan a la misma velocidad, ni con la misma profundidad. Por eso, la programación debe asegurar un nivel mínimo para todos ellos al final de la etapa, dando oportunidades para que se recuperen los contenidos que quedaron sin consolidar en su momento, y de profundizar en aquellos que más les interesen.
2. Atención a la diversidad en la metodología
Desde el punto de vista metodológico, la atención a la diversidad implica que el profesor:
§ Detecte los conocimientos previos, para proporcionar ayuda cuando se observe una laguna anterior.
§ Procure que los contenidos nuevos enlacen con los anteriores, y sean los adecuados al nivel cognitivo.
§ Intente que la comprensión de cada contenido sea suficiente para que el alumno pueda hacer una mínima aplicación del mismo y enlazar con otros contenidos similares.
3. Atención a la diversidad en los materiales utilizados
Como material esencial se utilizará el libro de texto. El uso de materiales de refuerzo o de ampliación, tales como las fichas de consolidación y de profundización que el profesor puede
encontrar en Saviadigital permite atender a la diversidad en función de los objetivos que se quieran trazar.
De manera más concreta, se especifican a continuación los instrumentos para atender a la diversidad de alumnos que se han contemplado:
– Variedad metodológica.
– Variedad de actividades de refuerzo y profundización.
– Multiplicidad de procedimientos en la evaluación del aprendizaje.
– Diversidad de mecanismos de recuperación.
– Trabajo en pequeños grupos.
– Trabajos voluntarios.
Estos instrumentos pueden completarse con otras medidas que permitan una adecuada atención de la diversidad, como:
– Llevar a cabo una detallada evaluación inicial.
– Favorecer la existencia de un buen clima de aprendizaje en el aula.
– Insistir en los refuerzos positivos para mejorar la autoestima.
– Aprovechar las actividades fuera del aula para lograr una buena cohesión e integración del grupo.
Si todas estas previsiones no fuesen suficientes, habrá que recurrir a procedimientos institucionales, imprescindibles cuando la diversidad tiene un carácter extraordinario, como pueda ser significativas deficiencias en capacidades de expresión, lectura, comprensión, o dificultades originadas por incapacidad física o psíquica.
En el presente curso escolar, en la materia de Cultura Clásica, no hay ningún alumno que necesite una adaptación curricular
Se consideran actividades complementarias las planificadas por los docentes que utilicen espacios o recursos diferentes al resto de las ordinarias del área, aunque precisen tiempo adicional del horario no lectivo para su realización. Serán evaluables a efectos académicos y obligatorios tanto para los profesores como para los alumnos. No obstante, tendrán carácter voluntario para los alumnos las que se realicen fuera del centro o precisen aportaciones económicas de las familias, en cuyo caso se garantizará la atención educativa de los alumnos que no participen en las mismas.
Entre los propósitos que persiguen este tipo de actividades destacan:
– Completar la formación que reciben los alumnos en las actividades curriculares.
– Mejorar las relaciones entre alumnos y ayudarles a adquirir habilidades sociales y de comunicación.
– Permitir la apertura del alumnado hacia el entorno físico y cultural que le rodea.
– Contribuir al desarrollo de valores y actitudes adecuadas relacionadas con la interacción y el respeto hacia los demás, y el cuidado del patrimonio natural y cultural.
– Desarrollar la capacidad de participación en las actividades relacionadas con el entorno natural, social y cultural.
– Estimular el deseo de investigar y saber.
– Favorecer la sensibilidad, la curiosidad y la creatividad del alumno.
– Despertar el sentido de la responsabilidad en las actividades en las que se integren y realicen.
Propuesta de actividades complementarias:
– Visitas a museos e instituciones culturales.
– Celebración de efemérides: Día del Libro, Semana Cultural, etc.
– Fiestas y celebraciones.
– Visitas a espacios naturales.
– Cine escolar.
– Celebración de concursos (trivial, debate, etc.).
– Viaje cultural a Roma y Pompeya, previsto para la última semana de la 2ª evaluación
En este apartado pretendemos promover la reflexión docente y la autoevaluación de la realización y el desarrollo de programaciones didácticas. Para ello, al finalizar cada unidad didáctica se propone una secuencia de preguntas que permitan al docente evaluar el funcionamiento de lo programado en el aula y establecer estrategias de mejora para la propia unidad.
De igual modo, proponemos el uso de una herramienta para la evaluación de la programación didáctica en su conjunto; esta se puede realizar al final de cada trimestre, para así poder recoger las mejoras en el siguiente. Dicha herramienta se describe a continuación:
ASPECTOS A EVALUAR | A DESTACAR… | A MEJORAR… | PROPUESTAS DE MEJORA PERSONAL |
Temporalización de las unidades didácticas | |||
Desarrollo de los objetivos didácticos | |||
Manejo de los contenidos de la unidad | |||
Descriptores y desempeños competenciales | |||
Realización de tareas | |||
Estrategias metodológicas seleccionadas | |||
Recursos | |||
Claridad en los criterios de evaluación | |||
Uso de diversas herramientas de evaluación | |||
Evidencias de los estándares de aprendizaje | |||
Atención a la diversidad | |||
Interdisciplinariedad |