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Tema 25 – La Orientación en Educación Secundaria. Modelo de intervención y funciones.

Indice del tema 25:

0.- INTRODUCCIÓN

1.- LA ORIENTACIÓN EN EDUCACIÓN SECUNDARIA

1.1.- Etapa de Educación Secundaria.

1.2.- Concepto de Orientación y objetivos.

1.3.- Orientación en Educación Secundaria.

2.- MODELOS DE INTERVENCIÓN.

2.1.- Concepto de modelo.

2.2.- Diferentes modelos.

2.3.- El modelo de Orientación desde la LOGSE:

intervención por programas.

3.- FUNCIONES DE LA ORIENTACIÓN.

3.1.- De la Orientación educativa.

3.2.- del psicopedagogo.

3.3.- de la acción tutorial.

3.4.- del departamento de orientación.

3.5.- de los Equipos de Orientación educativa.

4.- CONCLUSIONES.

5.- BIBLIOGRAFÍA.

0.- INTRODUCCIÓN.

Antes de comenzar el tema elegido creemos que es preciso explicar que cuando hablamos de Educación Secundaria tratamos una etapa educativa compleja y novedosa en nuestro Sistema Educativo donde se distinguen estas subetapas:

1) E.S.O. que supone una de las novedades más interesantes del Sistema Educativo planteado anteriormente por la LOGSE.

2) La Educación Secundaria obligatoria está formada por dos subperiodos:

– Bachillerato.

– Ciclos formativos de grado medio de Formación Profesional específica.

La concepción de la Educación que se expone en el preámbulo de la LOCE lleva implícita la necesidad de la Orientación educativa. La educación debe desarrollar la capacidad para ejercer los valores de libertad, tolerancia y solidaridad; debe permitir la construcción de una concepción de la realidad que integre a la vez “ el conocimiento y la valoración ética y moral de la misma”.

Igualmente la LOCE establece la Orientación educativa como uno de los factores de la calidad de la educación y los niveles de la intervención psicopedagógica. La Orientación y la acción tutorial van a jugar un papel relevante en la nueva concepción de la educación; su desarrollo no se debe sólo a la demanda social que existe, sino también a la exigencia de los nuevos planteamientos de la reforma, que le convierten en un elemento básico para el desarrollo y mejora de la calidad de la enseñanza.

La especificidad de la Orientación es adaptar el curriculum a las necesidades del aprendizaje tanto cognitivo como afectivo. Esto adquiere importancia en todas las etapas educativas del sistema español pero aun más en Educación Secundaria, por sus características en sí mismas y por la de los alumnos que la cursan.

Comenzaremos el tema viendo el concepto de Educación Secundaria y la definición de Orientación y los objetivos que se pretenden, así como el desarrollo de la Orientación en Educación Secundaria que se realiza a través de unos modelos de intervención de los que hacemos una clasificación centrando nuestra atención en el modelo por programas porque consideramos que es el más adecuado a los planteamientos de nuestro sistema educativo.

Un tercer apartado tratará sobre las funciones de la Orientación y sus agentes para terminar con las conclusiones y la bibliografía.

1.- LA ORIENTACIÓN EN EDUCACIÓN SECUNDARIA.

1.1 Etapa de Educación Secundaria.

A las razones generales que aconsejan la incardinación de la Orientación en todos los centros educativos se añaden, en el caso de Educación Secundaria, otras Razones derivadas de las especiales características de esta etapa educativa tal como ha sido configurada en la LOCE:

a) mayor grado de opcionalidad que presenta en nuevo curriculum desde los últimos años de la Secundaria Obligatoria.

b) Diferentes modalidades de Bachillerato

c) Oferta de ciclos formativos de FP grado medio y grado superior.

d) Necesidad de dar respuesta a la diversidad de capacidades, intereses y motivaciones que presenta el alumno en esta etapa educativa, mediante la realización de adaptaciones o diversificaciones curriculares según las características de cada caso.

e) Preparación para la vida activa o para acceder a la FP de grado medio o al bachillerato, tras la superación de los objetivos de la ESO.

f) La necesidad de contribuir desde la Orientación educativa al logro de los objetivos generales de etapa sobre todo de aquellos que se refieren a la dimensión afectiva- social de la educación tales como:

– el desarrollo de las capacidades de comportarse con espíritu de cooperación, responsabilidad moral, solidaridad y tolerancia, respetando el principio de la no

– discriminación entre personas.

– El conocimiento y valoración de las creencias, actitudes y valores básicos de nuestra tradición y patrimonio cultural para elegir las opciones que favorezcan más el desarrollo integral de las personas.

– La valoración crítica de los hábitos sociales relacionados con la salud, consumo y medio ambiente.

g) Necesidad de ofrecer a los alumnos, al termino de la etapa, junto con una acreditación de los años cursados y las calificaciones obtenidas en las diferentes áreas, una orientación sobre futuro académico y profesional.

Todos los factores mencionados hacen que la función orientadora adquiera una especial relevancia en la ESO.

1.2 Concepto de Orientación y sus objetivos

La orientación consiste en la propia educación bajo el aspecto de maduración de la personalidad de cada alumno en concreto y de la concreción de su camino en la vida.

Como señala el MEC en su documento “ La Orientación Educativa y la intervención psicopedagogia” el concepto de Orientación educativa coincide en parte con el de tutoría, aunque suele presentarse en términos más amplios, de modo que la tutoría representaría un aspecto concreto del proceso orientador.

La función orientadora y tutorial no se pueden entender como distintas y al margen de la función docente. Todo profesor es educador, orientador y tutor. La función orientadora es elemento inherente e inseparable de la función docente y curriculum.

Todo profesor ha de intentar que la educación sea integral y personalizada y sus funciones de profesor han de ser algo más que las de mero enseñante. Su labor educativa ha de ir más allá que la mera transmisión de conocimientos.

De manera implícita o explícita todo profesor transmite en su quehacer diario una serie de experiencias y valores a partir de los cuales el alumno construye su autoconcepto y elaborando sus expectativas y trazando su proyecto de vida.

Por tanto la responsabilidad de ayudar al alumno en su desarrollo integral, aprendizaje y orientación no es labor exclusiva del tutor o del orientador del centro, sino que ha de ser asumida por todo el equipo educativo.

El tutor oficial es el responsable de canalizar todas las aportaciones de otros profesionales que intervengan en distintas tareas de orientación escolar, personal y vocacional de los alumnos de su grupo- clase. Además el tutor oficial lo es de un grupo y es responsable de las relaciones familia- centro de los alumnos de su grupo, informándoles de la evolución educativa del

hijo, conociendo el ambiente socio cultural y familiar donde el alumno se desenvuelve y canalizando la colaboración entre la familia y el centro en la educación integral del alumno en general y la orientación en particular.

1.3 Orientación en Educación Secundaria.

La Educación Secundaria tiene como etapa educativa una serie de notas que le caracterizan frente a otras y que es preciso tener en cuenta a la hora de plantear la Orientación en la misma. Entre ellas tenemos:

1) Es considerada como una etapa propedéutica y terminal con las implicaciones que esto conlleva en relación con la Orientación Vocacional y profesional, por lo tanto es importante asegurar los aprendizajes básicos en la ESO ya que los alumnos a partir de esta sub- etapa va a iniciar caminos diferentes desde el punto de vista formativo.

2) Es en la primera etapa donde los alumnos son atendidos por un equipo de profesores de los que se deriva la importancia de la acción tutorial y la coordinación docente.

3) Las necesidades educativas especiales no sólo son consideradas sino que su atención se redobla planteándose 2 nuevas atenciones a la diversidad además de la adaptación al curriculum: opcionalidad y diversificación del curriculo.

4) Los alumnos que no superan los objetivos de la ESO deberán cursar los Programas de Garantía Social que implica decisiones basadas en la orientación individualizada a los alumnos.

5) Finalmente es preciso señalar el carácter obligatorio de una parte de la Educación Secundaria que provoca que sea preciso atender y dar respuestas educativas a individuos con características diferentes por lo que hace todavía más necesaria la Orientación educativa.

2.- MODELOS DE INTERVENCIÓN.

2.1 Concepto de modelo.

La Orientación como disciplina dirigida a la acción genera una gran variedad de modelos de intervención para afrontar las distintas actuaciones orientadoras para los diferentes usuarios de un contexto determinado.

Los modelos nos van a permitir el establecer marcos de referencia para diseñar y analizar la acción, en el caso que nos ocupa, para afrontar la intervención orientadora. Estos están entre la teoría y la práctica, entre lo abstracto y lo concreto. Son medios para interpretar lo que la teoría intenta explicar.

Los modelos adoptan las peculiaridades de cada ciencia; como en la orientación la realidad es muy compleja, ésta genera una gran variedad de modelos que enfocan la intervención desde diferentes perspectivas.

El modelo se identifica como la representación de la realidad sobre la que hay que intervenir y que va a influir en los propósitos, los métodos y los agentes de dicha intervención.

2.2 Diferentes modelos.

A la hora de concretar la clasificación de los distintos modelos, se pueden adoptar diferentes criterios. Se analizan cuatro clasificaciones distintas de los modelos de intervención en orientación que obedecen a criterios de clasificación diferentes. Desde la consideración de los supuestos teóricos subyacentes se describen las notas distintivas del modelo clínico, psicopedagógico y sociopsicopedagógico.

Con un criterio práctico desde el tipo de intervención que da lugar el modelo de intervención directa e individualizada, el modelo de intervención directa grupal, modelo de intervención indirecto individual/ grupal y el modelo de intervención a través de medios tecnológicos.

Como tercer criterio se toma el tipo de relación que se establece entre orientadores y profesores; se distingue el modelo centrado en los contenidos y el modelo centrado en la facilitación de procesos de cambio e innovación.

Por último desde un enfoque psicológico se señalan el modelo descriptivo, psicodinámico, evolutivo y conductual.

El modelo clínico pone el énfasis en el alumno- problema; clasifica a los alumnos en función de unas escalas de medición psicológicas o pedagógicas. Los test psicológicos constituyen la herramienta básica de trabajo.

Desde el modelo psicopedagógico se interviene con los alumnos, profesores, la institución y los padres. Los instrumentos que se utilizan además de tests son pruebas psicopedagógicas, la observación y los materiales elaborados en función de las necesidades.

Este modelo requiere algún tipo de negociación y definición consensuada de las funciones del psicopedagogo en el centro.

El modelo socio- psicopedagógico recoge los presupuestos e instrumentos de trabajo del modelo psicopedagógico e intenta no perder de vista el entorno social en el que la escuela está enclavada. Trata de coordinar esfuerzos de todos los profesionales de educación, servicios sociales, sanidad implicados en el trabajo de una acción comunitaria.

Otros autores clasifican los diferentes modelos de Orientación según las distintas formas de abordar la práctica de la Orientación. Rodriguez Espinar distingue estos modelos:

1.- Modelo de intervención directa e individualizada ( M. Counseling).

2.- Modelos de intervención directa grupal

-Modelos de servicios

-Modelos de servicio actuando por programas.

-Modelos de intervención por programas.

3.- Modelo de intervención indirecta individual/ grupal ( M. de

consulta).

4.- Modelo de intervención a través de medios tecnológicos. (M. tecnológico).

El modelo de intervención “ directa e individualizada” tiene las siguientes características: es un modelo de carácter eminentemente terapéutico y centrado en la acción directa sobre el sujeto. Se basa en la relación personal orientador- orientado como única alternativa para afrontar la acción orientadora. Esta acción suele ser de tipo puntual debido a sus planteamientos de tipo reactivo y remedial.

Tiene como objetivo prioritario satisfacer las necesidades específicas del sujeto. Es el orientador el que dirige el proceso, pasando el profesor- tutor a un segundo plano que e n la mayoría de los casos, se reduce a ser mero receptor de la información o bien de agente de la intervención bajo la supervisión y asesoramiento especialista.

Diversos autores han dejado patente lo inadecuado de un modelo de intervención basado exclusivamente en la relación cara a cara con un carácter eminentemente terapéutico. No obstante son conscientes de que es algo claramente demandado por los centros, por lo tanto no puede excluirse totalmente de la acción orientadora.

Respecto al modelo de servicios alguno de sus aspectos diferenciales son: tiene un carácter público y social; se centran en las necesidades del alumno con dificultades y de riesgo, actúa sobre el problema y no sobre el contexto que lo genera y actuar por funciones no por objetivos.

La adopción de este modelo en exclusividad también es cuestionable porque es eminentemente reactivo, se centra en el especialista y se dirige a algunos miembros de la población y el contacto con el centro educativo es marginal y pasivo.

Tratando de superar las limitaciones que presenta el modelo de servicios se presenta el modelo de servicios pero actuando por programas como alternativa idónea. En este modelo se tiene en cuenta un análisis del contexto y de necesidades a partir del cual se elaboran los programas de intervención. Los programas han de reunir los requisitos técnicos y científicos adecuados y unos planteamientos teóricos que han de orientar la praxis. Los programas no son una simple acumulación de actividades.

Desde este modelo se tiene un planteamiento más de tipo preventivo y de desarrollo. La unidad de intervención es el grupo- clase y va dirigido a todos los alumnos. El especialista asume un papel de agente dinamizador y de apoyo a la acción tutorial y a la formación del profesor-tutor.

Por último dentro de los modelos de intervención directa grupal se encuentra el modelo por programas. Sólo a través de la elaboración de programas es posible dar cabida a los principios de prevención, desarrollo e intervención social.

El programa se desarrolla en función de las necesidades del centro, sedirige a todos los alumnos y se centra en las necesidades del grupo-clase. El individuo se considera como un agente activo de su propio proceso de Orientación. Se lleva a cabo un seguimiento y evaluación de lo realizado.

Este modelo exige la implicación de todos los agentes educativos y requiere la existencia en el centro de un especialista que asesore, dinamice y de soporte técnico para la planificación, ejecución y evaluación del programa.

El modelo de intervención indirecta individual o grupal también llamado de consulta se basa en la formación y capacitación del profesorado para que sea uno de los agentes principales de intervención orientadora. La consulta es un servicio indirecto que se produce entre dos profesionales de status similar. La consulta se inicia a petición del consultante que tiene plena libertad para aceptar o rechazar el servicio e implica al consultor y al consultante en una relación confidencial y colaborativa.

No se debe confundir la consulta con la supervisión y el counseling. La consulta se realiza entre profesionales con status familiar. La

supervisión se refiere a una relación llevada a cabo entre personas con distintos status.

Por último en la consulta la relación es triádica, mientras que en el counseling es diádica.

La relación de consulta permite afrontar la relación desde diferentes ópticas, no sólo desde la terapéutica sino desde la preventiva y de desarrollo. Esto hace que sea uno de los modelos más sugerentes de la intervención orientadora en el marco educativo. En el contexto de la Reforma educativa actual, el orientador ha de asumir el papel de consultor- educador de profesores si queremos que éstos se impliquen en la acción tutorial y orientadora; consultor- educador de padres como agentes importantes en el proceso orientador de sus hijos y consultor en la organización educativa y en la comunidad.

Para terminar este recorrido por los diferentes modelos de intervención, el modelo tecnológico aboga por la utilización de las nuevas tecnologías en la orientación.

Este modelo basado en sistemas y programas autoaplicables no eliminan la figura y las funciones del orientador. El orientador habrá de estar siempre presente en el proceso desempeñando la función de consultor, aclarando dudas, resolviendo problemas, comentando algunas informaciones que se proporcionan y ayudando al sujeto en su labor de síntesis y reflexión.

2.3 El modelo de orientación desde la LOCE: intervención por programas.

Expuestas las diferentes modalidades de intervención, coincidimos con los autores en nuestra inclinación por el modelo de intervención grupal y dentro de éste por una intervención por programas por considerar que es el que mejor asume los principios y funciones de la nueva concepción de la Orientación Educativa, así como la implicación de los diferentes agentes educativos y de la comunidad.

La intervención por programas supone la asunción de los principios de prevención, desarrollo y de intervención social como principios inspiradores de las tareas orientadoras.

Trabajar en la Orientación educativa desde este modelo supone que hay que dirigirse a todos los alumnos y no sólo a aquellos que presentan problemas; el orientador debe adoptar una actitud activa y de anticipación a la demanda debe actuar sobre grupos y no solo sobre individuos y tener en cuenta todos los aspectos del desarrollo personal ( capacidades intelectuales, sociales, afectivas, vocacionales….). Los principios anteriores se materializan en el diseño, realización y evaluación de programas de intervención educativa y social.

Entendemos por programa un conjunto de actuaciones y tareas que se desarrollan de forma coordinada para lograr unos objetivos previamente definidos con los que se satisfacen unas necesidades.

El planteamiento curricular que está presente en la LOCE exige una superación de los modelos de orientación centrados exclusivamente en la atención a los problemas individuales, basados en la relación tu a tu y en el tratamiento de casos. Un modelo de orientación basado en la intervención por programas se caracteriza por la integración de la orientación en el curriculo, por el sentido cooperativo de la orientación; por su finalidad preventiva y anticipadora, por su contribución al desarrollo de las capacidades de los alumnos y por la asunción por parte del orientador de un rol que potencie el cambio de la institución educativa.

3.- FUNCIONES DE LA ORIENTACIÓN.

3.1 De la Orientación educativa.

Las funciones de la orientación son muchas y variadas. Entre ellas destacamos:

Ayuda: Esta función ha de intentar que el sujeto consiga su adaptación a lo largo del desarrollo evolutivo de su vida y en el contexto en que se encuentra, para prevenir desajustes, poner medidas correctivas y evitar fracasos. En todo momento, en la labor orientadora, hemos de intentar estimular y reforzar aptitudes del sujeto para que alcancen el dominio de resolución de problemas.

La función de ayuda implica también el conocimiento de sí mismo que el sujeto ha de adquirir para modificar ciertas conductas que hacen progresar y evolucionar a los sujetos en su desarrollo personal.

Educativa y evolutiva:

mediante la orientación se facilita a los individuos todas las técnicas de resolución de problemas y adquisición de confianza en si mismos mediante el conocimiento de sus posibilidades y limitaciones para que a partir de aquellas y superación de éstas puedan incorporarse a la sociedad como un ser útil y sentirse feliz consigo mismo. La pieza clave de esta función es el profesor como protagonista del intercambio dinámico en este proceso que en ocasiones se identifica con la instrucción.

Asesora y diagnosticadora: tiene como misión específica la recopilación de todo tipo de datos acerca de la persona orientada cómo adquiere los conocimientos, cómo estructuran los datos, cuales son sus actitudes y cómo desarrolla y emplea sus posibilidades.

La obtención de los datos no debe referirse exclusivamente a aquellos que proceden de la aplicación de unas determinadas pruebas psicotécnicas o estandarizadas sino que es preciso realizar un análisis individualizado de las distintas facetas de la personalidad del sujeto y esto es posible por procedimientos tan sencillos como la simple observación ordenada y sistematizada.

Informativa: La información recoge dos caminos, es decir es bidireccional. Se toma información de todos los medios posibles circundantes al sujeto para conseguir una imagen lo más aproximada posible del mismo; se ofrece la información desde diferentes perspectivas al sujeto para que reflexionando sobre ella se conozca mejor y pueda actuar en consecuencia.

Entre la información que se ofrece al sujeto figura también aquella que hace referencia a las posibilidades de la sociedad, tanto de estudios como de trabajo, en definitiva de realización persona. En esta doble vertiente de la información juega un papel muy importante la familia del orientado que ha de trabajar en estrecha colaboración con el equipo de orientación.

3.2- Funciones del psicopedagogo.

De acuerdo con lo planteado por Marchesi ( 2003) las funciones del psicopedagogo deberían ser:

1.- Identificación de los recursos del sector: especialmente atribuida a los Equipos de Zona y en segundo lugar al departamento de Centro, que incluiría al menos estas tareas:

– Conocimiento de las instituciones presentes y sus recursos

– Cooperación con esas instituciones.

– Recursos para la Orientación educativa, en particular la profesional.

2.- Conocimiento de las instituciones escolares y asesoramiento al profesorado en la elaboración y desarrollo del proyecto educativo y curricular. Esta función entra dentro del asesoramiento psicodidáctico y curricular que todo orientador debe llevar a cabo en su centro.

Dentro estarían las siguientes tareas:

· Análisis sistémico del centro como institución.

· Conocer la estructura del centro, la participación de sectores, en la toma de decisiones, los sistemas de comunicación, las actitudes del profesorado.

· La evaluación sistémica, punto de partida para la intervención.

· Atención especial en PEC y PCC a la atención a la diversidad: adaptaciones, metodología, organización, coordinación…

3.- Colaboración con el profesorado: la orientación del profesorado debería ser una tarea básica de todo orientador, prestando una atención preferente a la relación con los profesores de apoyo y tutores. Dentro de esta función encontramos tareas como:

· Evaluación curricular de alumnos con dificultades de aprendizaje.

· Propuesta sobre adaptaciones curriculares.

· Propuesta de cambios metodológicos y organizativos frente a alumnos con n.e.e más permanentes.

· Coordinación entre profesores.

4.- Evaluación psicopedagógica de los alumnos.

La que ha sido tradicionalmente la actividad más específica de los psicopedagogos ha pasado a ser, con el nuevo modelo de

Orientación, una más. En esta función, se incluiría, al menos, lo siguiente:

– Evaluación de los alumnos que precisan adaptaciones del curriculum y/o de recursos extraordinarios.

– La evaluación debe detectar el potencial de aprendizaje y fundamenta las propuestas de intervención.

– Incluir la revisión de la evaluación curricular a lo largo del historial escolar del alumno.

– Evaluación también de los aspectos relativos al centro.

5.- Elaboración de programas específicos para la orientación escolar y profesional.

En un modelo de orientación como el nuestro, que pretende garantizar el derecho a la orientación de todos los alumnos es absolutamente preciso el funcionamiento por programas, siendo responsabilidad del orientador su elaboración, que en cualquier caso sólo realiza propuestas que el centro en su conjunto y especialmente los profesores deberán asumir.

Básicamente respecto a esta función, el psicopedagogo deberá:

· Partir de que gran parte de la responsabilidad de esa orientación recae en los tutores.

· Asumir que la tarea básica del psicopedagogo es la de facilitar esa labor, proporcionar medios, información, formación de tutores y en última instancia realizar propuestas para su asunción por parte de la comunidad educativa.

· Más específicamente preparar programas para alumnos o grupo de alumnos, tanto de orientación escolar como vocacional.

6.- Colaboración con las familias de los alumnos.

El sistema de orientación tiene como función específica servir de puente entre los centros y las familias y el orientador como parte del mismo no podía ser menos. Las tareas del orientador en este aspecto se caracterizan por:

*La existencia de una doble relación fomentando la participación de las familias en el apoyo educativo del centro y facilitarles la información pertinente en los casos en que esto proceda.

· La tarea es aquí sobre todo de asesoramiento, colaboración e intermediación, en particular con los padres de alumnos con n.e.e más específicas.

3.3 La acción tutorial.

La función tutorial queda vinculada a la concepción del curriculum oficial que delimita la actuación en los campos de zona, centro y aula; en íntima relación con la organización escolar en su sentido más amplio y en las prescripciones organizativas a nivel provincial.

Destacamos, entre los cometidos específicos de la acción tutorial los siguientes:

+ Conocimiento de los alumnos en su triple contexto de aula, centro y zona para ajustar la respuesta educativa a sus necesidades particulares.

+Acercamiento a la individualización y personalización integral del proceso enseñanza- aprendizaje.

+Realizar un seguimiento progresivo de las capacidades de los sujetos que han de ir adoptando opciones en su vida, primero escolares y luego profesionales.

+Garantizar las actuaciones educativas diferenciadas mediante el establecimiento de planes de prevención de dificultades de aprendizaje, evitando la identificación de la orientación educativa con las actuaciones propias de la Educación Especial.

+Establecer los correspondientes canales de comunicación e interrelación entre las distintas áreas y ciclos y entre los diferentes integrantes de la comunidad educativa, apuntando hacia una mejora de la calidad de la enseñanza.

La esencia misma de la función tutorial exige tres modalidades de actuación:

1) Anticipación preventiva de los diferentes problemas tanto individuales como colectivos para abordarlos antes de que afluyan a la realidad y se conviertan en situaciones conflictivas.

2) Compensadora ante las posibles carencias o deficiencias presentadas por los sujetos y que pueden ser abordadas desde dentro, mediante la relación individualizada y desde fuera con la dotación y adecuación de los recursos necesarios.

3) Favorecedora de la diversidad respecto a la individualidad de los alumnos y a la capacidad y cualificación del profesorado.

– La función tutorial es un asunto de centro y no de personas más o menos voluntarias.

– La función tutorial ejercida por el tutor en función de unos programas de orientación debe ser asumida por toda la comunidad y no función exclusiva de profesionales especializados.

– Debe concebirse de una manera globalizadora, no como resultado d varios elementos sumados o yuxtapuestos.

– Todo profesor/a por el mero hecho de serlo, deben desempeñar la función tutorial tanto a nivel

– individual como de grupo.

4.4 El Departamento de Orientación.

El Departamento de Orientación debe entenderse como un órgano que asume formalmente la tarea de impulsar y promover las actividades de orientación dentro del centro, con el fin de asegurar la dimensión orientadora de la educación y de proporcionar al apoyo psicopedagógico que los alumnos precisen.

La LOCE señala las siguientes funciones del departamento de Orientación:

1) Con respecto al centro:

· Coordinar la elaboración, realización y evaluación del plan de orientación y acción tutorial del centro.

· Asesorar técnicamente a los órganos colegiados y unipersonales del Centro en todas aquellas cuestiones que posibiliten una atención educativa personalizada e integral: adaptaciones curriculares individuales o grupales, programas de refuerzo educativo, criterios de evaluación y promoción de alumnos y programas d diversificación curricular.

*Fomentar, en colaboración con el Equipo de Apoyo Externo de la zona, la cooperación del centro con las instituciones sociales y el mundo productivo del entorno a fin de preparar a los alumnos para la vida profesional activa.

Con respecto al alumnado:

· Proporcionar información y orientación a los alumnos de forma colectiva o individual acerca de las distintas alternativas educativas y profesionales.

· Elaborar actividades, estrategias y programas de orientación escolar, personal y profesional.

· Aplicar diferentes programas de intervención orientadora con grupos de alumnos.

· Efectuar la evaluación psicopedagógica de alumnos/as que desarrollarán programas de diversificación curricular y garantía social.

· Desarrollo de programas y actividades dirigidas a la mejora de las habilidades para el estudio y el aprendizaje autónomo.

Con respecto al profesorado:

*Coordinar, apoyar y ofrecer un soporte técnico a las actividades de orientación y tutoría que los profesores realizan con su grupo de alumnos.

· Colaborar en las diversas actividades y programas que se realizan en el centro así como potenciar la relación y comunicación entre padres y profesores especialmente en lo que se refiere a la orientación profesional del alumnado.

Para el cumplimiento de esas funciones, el departamento de Orientación organiza su actuación en torno a los ámbitos siguientes:

Atención a la diversidad del alumnado

Orientación académica y profesional.

Acción tutorial.

El Departamento de Orientación debe elaborar un plan de actividades para cada uno de estos ámbitos en el que se debe especificar los objetivos que se pretenden, las actuaciones que van a llevarse a cabo y los procedimientos previstos para su seguimiento y evaluación.

4.5 Equipos de Orientación Educativa.

La actuación de los equipos sectoriales de Orientación deben basarse en los siguientes criterios:

Estudio y análisis de las necesidades de la zona que sirva de base para la planificación de las intervenciones.

Definición y selección de objetivos.

Estudio, análisis y selección de los medios y recursos existentes.

Diseño y reparto de las tareas entre los miembros del equipo.

Ordenación de recursos y establecimiento de prioridades.

Ejecución y evaluación de los planes y las actuaciones propuestas.

4.-CONCLUSION.

Será de índole personal donde se realizará una síntesis de lo visto en el tema y de la importancia que tiene este contenido tratada en el Sistema Educativo Españo. No deberá ser superior de 15 lineas, siempre de marcado carácter personal.

5.-BIBLIOGRAFIA.

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* LOCE (2003).

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