Tema 21A – Criterios para la elaboración de adaptaciones curriculares para alumnos y alumnas con deficiencia mental. Organización de la respuesta educativa.

Tema 21A – Criterios para la elaboración de adaptaciones curriculares para alumnos y alumnas con deficiencia mental. Organización de la respuesta educativa.

1. CRITERIOS PARA LA ELABORACIÓN DE ACI PARA ALUMNOS CON DEFICIENCIA MENTAL.

1.1. Criterios relativos a la adaptación de objetivos.

1.1.1. Percepción.

1.1.2. Motricidad.

1.1.3. Comunicación y lenguaje.

1.1.4. Memoria

1.1.5. Razonamiento.

1.1.6. Personalidad.

1.1.7. Objetivos curriculares.

1.2. Criterios relativos a la adaptación de contenidos.

1.3. Criterios relativos a la adaptación de la metodología.

1.4. Criterios relativos a la adaptación de materiales y recursos.

1.5. Criterios relativos a la evaluación.

2. ORGANIZACIÓN DE LA RESPUESTA EDUCATIVA.

2.1. Atención temprana.

2.2. Formas de organización de la respuesta educativa.

2.2.1. Escolarización en un centro ordinario.

2.2.2. Escolarización en un centro de Educación especial.

1. CRITERIOS PARA LA ELABORACIÓN DE ACI PARA ALUMNOS CON DEFICIENCIA MENTAL.

Lo primero de todo es exponer las características de los Deficientes mentales:

– Experiencias continuas de fracaso personal, social, y escolar.

– Indefensión aprendida.

– Reducida capacidad de autocontrol.

– Escasos mecanismos de autorregulación.

– Sentimientos de frustración.

– Identificación y estancamiento de los procesos de desarrollo.

– Desestructuración de su personalidad.

Por todo ello estos alumnos presentan unas N.E.E: En el Libro Blanco para la reforma del sistema educativo, en su capitulo X se dice que para el logro de los fines de la educación se precisa disponer de determinadas ayudas pedagógicas o servicios, estas son las nee (se considera que algún niño tiene una necesidad educativa especial si tiene alguna dificultad en el aprendizaje que requiera una medida educativa especial., una dificultad educativa se da cuando un niño tienen una dificultad para aprender significativamente mayor que la mayoría de los niños de su edad, o si sufre una incapacidad que le impide o dificulta el uso de las instalaciones educativas que generalmente tienen a su disposición los compañeros de su edad), que deben quedar satisfechas a través de las ACIs: definida como una secuencia de acciones sobre el curriculum escolar diseñado para un centro educativo que conducen a la modificación de uno o más de sus elementos básicos cuya finalidad es posibilitar el máximo de individualización didáctica en el contexto más normalizado posible para aquellos alumnos que presentan cualquier tipo de necesidad educativa, en este sentido las adaptaciones pueden entenderse como un continuo que va desde los pequeños cambios que habitualmente introducen los profes en su práctica hasta las modificaciones extremas que concluyen el las Acis

Las Acis para estos alumnos pueden ser desde muy significativas hasta poco significativas. Los principios que deben orientar las Acis entre otros son: contextualización, significatividad, realidad y participación.

1.1.Criterios relativos a la adaptación de objetivos.

Los objetivos de las áreas del desarrollo que hay que adoptar para niños con D.M. son, entre otros:

1.1.1. Percepción.

– Deben aprender a interpretar correctamente sus estímulos visuales, auditivos, táctiles, olfativos y gustativos.

– Aprender a interpretar adecuadamente la posición de los objetos en el espacio (percepción espacial general).

– Aprender a interpretar la realidad temporal (paso del tiempo), a través de la discriminación de conceptos temporales (percepción temporal).

– Aprender a percibir correctamente el espacio gráfico: perspectivas, figura-fondo…

1.1.2. Motricidad.

– Aprender a relajarse.

– Dominar las diferentes etapas de la adquisición de la marcha.

– Desarrollo de la potencia muscular.

– Conocimiento y uso del esquema corporal, usando su propio cuerpo.

– Desenvolverse de forma independiente en el cuidado personal.

– Madurar la coordinación óculo-manual.

– Madurar y dominar en el gesto gráfico.

– Desarrollar los procesos de equilibración corporal.

1.1.3. Comunicación y lenguaje.

– Aprender a comunicarse a través del gesto corporal.

– Aprender a expresarse oralmente (entonación, ritmo de la palabra…).

– Aprender a usar el lenguaje de forma funcional (intencionalidad comunicativa y fluidez verbal).

– Aprender a conversar y participar en diferentes situaciones de comunicación.

1.1.4. Memoria.

Aprender a retener y evocar estímulos visuales, auditivos,… tanto de forma unitaria como estructurada (ritmo).

– Aprender a retener y evocar estímulos verbales (voz y palabra escrita).

– Aprender a retener y evocar estímulos numéricos.

– Aprender a retener y evocar a corto, medio y largo plazo.

1.1.5. Razonamiento.

Aprender a ordenar, seriar, clasificar…

– Aprender a completar puzzles…

– Aprender a captar relaciones causa-efecto.

– Aprender a jugar de forma simbólica.

– Aprender a resolver sus propias situaciones problemáticas.

1.1.6. Personalidad.

– Habituarse a controlar sus estímulos emocionales.

– Integrarse y participar activamente en su grupo social en función de su madurez.

1.1.7. Objetivos curriculares.

En los niños D.M. las capacidades expuestas se integrarán en los objetivos de las diferentes áreas del curriculum. Las áreas curriculares cuyos objetivos deben priorizarse en las Acis de estos alumnos son: lenguaje, matemáticas, psicomotricidad (educación física), expresión plástica y conocimiento del medio.

1.2.Criterios relativos a la adaptación de contenidos.

La adaptación de los contenidos se harán en base a los: conceptos, procedimientos y actitudes de cada una de las áreas del currículo.

Una vez formulado los objetivos (ya sean en términos de capacidad o curriculares) se concretarán los contenidos (medios para el logro de esos objetivos). En las Acis para estos niños los contenidos procedimentales tienen un papel fundamental para lograr los objetivos (por ejemplo toda la educación de hábitos de estos niños se hace mediante procesos que van de los simple a lo complejo).

Pero los contenidos curriculares no sólo pretenden que el niño adquiera hábitos, sino que estos se integran en su personalidad para darle autonomía, por lo que los contenidos actitudinales deben explicitarse y detallarse en las Acis.

Los niños debe ejecutar los hábitos aprendidos a través de su propio convencimiento y no porque el adulto se los impone.

1.3. Criterios relativos a la adaptación de la metodología.

Los principios metodológicos que deben orientar las técnicas didácticas usadas con D.M. son, entre otras:

1.- Constructivismo: partir de la madurez del niño, de lo que sabe hacer.

2.- Actividad: el niño debe saber qué, porqué y cómo lo va a hacer.

3.- Transferencia: lo que aprenda debe ser funcional, aplicarlo a diferentes situaciones.

4.- Motivación-vivenciación: todo aprendizaje debe partir y estar relacionado con los intereses y experiencias del niño.

5.- Lenguaje asociado a la acción: lenguaje oral y experiencia vital intimamente relacionadas.

6.- Aprendizaje sin errores: aprender procesos cortos, pequeños pasos y no iniciar un nuevo proceso hasta que el niño no haya afianzado el anterior.

Algunas técnicas metodológicas a usar son:

– Método globalizado. Garrido Landivar propone la adopción del método globalizado (Decroly): debe realizarse a partir de centros de interés que deben tener siempre presente la acción. La acción será a la vez centro de interés, contenido de aprendizaje y unidad globalizadora de los demás contenidos: verbales, comprensivos…

Para este autor esta metodología será complementada con procedimientos didácticos como:

– Procedimientos activos y concretos (en contra de la memorización).

– Procedimientos individualizados a la vez que socializados.

– Procedimientos de programación especialmente finos.

Para ofrecer al D.M. una enseñanza para el éxito es necesario programar objetivos en sus mínimos grados y actividades variadas.

– Técnicas de imitación, aprendizaje vicario: Las dificultades lingüísticas y de comunicación constituyen uno de los trastornos asociados a la deficiencia mental. Para tratar de superar estas dificultades se comienza con el incremento en las tasas de verbalización a través de técnicas como el modelado y el reforzamiento de respuestas imitativas.

– Técnicas de modificación conductual: se han mostrado especialmente eficaces en relación con los problemas emocionales y de conducta asociados frecuentemente a la deficiencia mental. La reducción de conductas desadaptadas y la implantación de conductas básicas son dos grandes objetivos que se persiguen con la utilización de las técnicas de modificación de conducta.

Existen diferentes técnicas, entre ellas podemos destacar la extinción, como la más sencilla de aplicar siempres que se tenga la posibilidad de controlar el reforzador y su aplicación. Otra técnica es el entrenamiento de respuestas incompatibles con la respuesta cuya frecuencia se quiere reducir.. Relacionado con este procedimiento estaría el entrenamiento en omisión, en el que el refuerzo aparece como consecuencia de la ausencia de la respuesta a eliminar. Un caso de amplia utilización en ambientes escolares es el denominado “tiempo fuera” en el que la aparición de una respuesta inadaptada supone la exclusión del sujeto de la situación en la que pueden obtenerse refuerzos positivos.

Por último el castigo es probablemente el método más frecuentemente utilizado para reducir la frecuencia de una respuesta. A este respecto hay que tener en cuenta los efectos negativos, sobre todo a nivel emocional que puede producir el castigo, dependiendo en gran medida de su intensidad.

Para el incremento de la frecuencia de conductas básicas las técnicas más habitualmente empleadas se basan en el reforzamiento positivo. Los pasos para lograr este incremento pueden ser los siguientes: especificación de la conducta cuya probabilidad se quiere incrementar, determinación de un reforzador apropiado, medir la tasa de linea base de la conducta, organizar la situación de forma que se optimice la probabilidad de ocurrencia de la respuesta desaeada y tomar medidas para la posterior evaluación del procedimiento.

Otras técnicas como la instigación, el aprendizaje por observación, las técnicas de autocontrol, constituyen tambíén métodos para implantar nuevas conductas en el repertorio del sujeto.

– Técnicas de desarrollo cognitivo: P.E.I., Harvard y Progresint.

El Programa de Enriquecimiento Instrumental de Feuerstein y colaboradores (1980) aboga por una inteligencia como proceso dinámico de autorregulación capaz de responder a la acción de estimulaciones externas. Se defiende por tanto la modificabilidad cognitiva y se crea un programa cuyo objetivo básico es producir cambios de naturalea estructural que alteren el curso del desarrollo cognitivo. La ausencia de aprendizaje a través de un mediador adecuado determina el síndrome de deprivación cultural que produce en los sujetos una modificabilidad limitada al exponerse a los estímulos, acompañada por dimensiones actitudinales y motivacionales que afectan a la relación del sujeto con el mundo circundante.

El programa consta de una serie de ejercicios de papel y lápiz que se agrupan en quince instrumentos. Cada instrumento se centra en unas pocas funciones cognitivas. Los instrumentos sirven al profe como herramientas en su papel de mediador de aprendizaje del sujeto. En consecuencia es necesaria la instrucción de aquellos profesores que van a implementar el programa.

Los programas cognitivos no han sido suficientemente valorados todavía. El programa de enriquecimiento instrumental parece obtener importantes mejoras pero no hay suficientes datos sobre la estabilidad de estas mejoras. No obstante los programas de entrenamiento cognitivo mantienen abierta una importante via de esperanza para los sujetos deficientes.

– Comprensión empática.

– Sistemas aumentativos de la comunicación: PCS y Bliss.

– Técnicas de educación sensorial y perceptiva.

– Ludoterapia.

– Musicoterapia.

– Técnicas de psicomotricidad y ritmo.

– Técnicas plásticas.

1.4. Criterios relativos a la adaptación de materiales y recursos.

Entre los recursos materiales destacamos:

– Materiales de educación sensorial: láminas, areneo, plastilina, lotos fonéticos…

– Materiales de ritmo.

– Materiales para el desarrollo del olfato.

– Materiales de música.

– Puzzles, telas con diferentes texturas…

– Recursos materiales de : educación psicomotriz, plástica, musical, rehabilitación logopédica, medios audiovisuales, recursos informáticos…

Entre los recursos personales están:

– Equipos de apoyo externo (pedagogos, asistentes sociales, psicólogos…).

– Maestros de Educación Especial de audición y lenguaje, monitores…

1.5. Criterios relativos a la evaluación.

La evaluación inicial es anterior a la ACI y se debe realizar por parte del EPOE, logopeda y tutor (cuando el D.M. esté integrado). Esta evaluación se realiza a través de la anamnesis, de tests y por medio de la observación sistemática de las conductas del alumno.

Tanto la educación general en la que intervienen los profesionales que elaboran la Aci, como en la de los profesores, el objetivo es conocer el potencial de aprendizaje del niño. A partir de esta evaluación inicial comienza la planificación de la Aci, esta evaluación será después continua y formativa a lo largo del desarrollo de la Aci.

2. ORGANIZACIÓN DE LA RESPUESTA EDUCATIVA.

La respuesta educativa debe comenzar en le momento en que se detecte el trastorno. La organización de la respuesta educativa puede ser:

2.1. Atención temprana.

La atención temprana puede ser primaria o secundaria.

Podemos orientar a las madres sobre observación de conductas del bebé que puedan ser sintomáticas de la D.M: niño excesivamente tranquilo y muy dormilón, persistencia del babeo sin causa, tirar las casas al suelo (a partir de un año), retraso en las conductas de: sonreír, alcanzar objetos, balbuceo, lenguaje…

Los padres deben.

– Ofrecer al niño ambientes ricos en estímulos sensoriales y perceptivos.

– Ofrecer un ambiente psicoafectivo agradable.

La atención temprana debe estar encaminada al desarrollo y estimulación precoz de las capacidades: motrices, sensitivas, perceptivas, de socialización y afectivas.

En el caso de la escuela infantil la atención temprana debe encaminarse a:

– Estimulación y fomento de las capacidades afectivas.

– Sensomotricidad y psicomotricidad.

– Educación rítmica y musical.

– Desarrollo del lenguaje oral: comprensión y expresión.

– Educación de los procesos de expresión y comunicación.

2.2. Formas de organización de la respuesta educativa.

La respuesta educativa que puede darse a D.M. una vez cumplidos los 6 años puede ser primero una educación inicial por parte del Epoe que tiene como objetivo la toma de decisiones sobre el proceso de escolarización así como fundamentar la Aci y posteriormente:

2.2.1. Escolarización en un centro ordinario.

El niño se escolarizará en un centro ordinario si su grado de D.M y su potencial de aprendizaje le permiten acceder al curriculum (realizando la adaptación correspondiente) junto a sus compañeros de edad.

La respuesta que el centro puede dar a la escolarización puede ser a tiempo parcial o total y con actividades de apoyo a la integración. El centro ordinario que integre a niños D.M. debe realizar las siguientes adaptaciones:

– Incluir en su Proyecto Educativo los principios de normalización e integración, así como el compromiso de toda la comunidad educativa en el integración de estos niños. Dar importancia a la participación de la familia.

– Adecuar sus P.C. de ciclo y etapa a las Nee de estos niños. Esto supone una adecuación de objetivos, metodología, técnicas de enseñanza… Por ejemplo: usos de sistemas alternativos, actividades en el medio social…

– Modificación de los espacios para que los profesionales puedan trabajar de forma específica con los D.M. (aula de audición y lenguaje, aula de integración…).

– Un compromiso por parte de todos los profesionales de colaboración permanente en la integración de estos niños, así como su actualización y formación permanente.

– Planificar dentro del P,C. los procesos de integración social para que sus relaciones con los demás sean lo más normalizado posible.

– Los profes deben adoptar sus programaciones de aula a las Acis de niños D.M. en cuanto a objetivos, contenidos, y actividades, así como a los criterios de evaluación.

– Deben crearse un departamento de orientación formado por tutores, Epoe…

2.2.2. Escolarización en un centro de Educación Especial.

Cuando el desarrollo personal y el potencial de aprendizaje no permitan la escolarización del niño en un centro ordinario lo haremos en un centro de E.E. Esta escolarización se fundamentará en una evaluación inicial del Epoe en la que participan los padres y se decide conjuntamente.

El centro de E.E. debe elaborar la Aci correspondiente para el niño en la que se detallará todo el proceso educativo a seguir a largo y corto plazo en función de la madurez del niño (puede estar en un aula específica para D.M. o seguir un proceso de adaptación curricular para integrarlo en un centro ordinario, parcial o total…).

La propuesta de escolarización se debe revisar periodicamente en función de los resultados de la Aci para proponer otros tipos de escolarización.

Las programaciones curriculares tanto de aula como las individualizadas han de tener en cuenta que las capacidades se desarrollan a través de los contenidos de las diferentes áreas curriculares, por lo que la programación de cada área para estos niños debe estar enfocada a:

– Área de Matemáticas: – Desarrollo de la capacidad de razonar, contar.

– Desarrollo de la capacidad de percepción espacial y temporal.

– Desarrollo de la memoria numérica.

– Área de Lengua: – Desarrollar la percepción visual y auditiva.

– Desarrollar la percepción temporal, espacial-gráfica.

– Desarrollar la comprensión verbal, lectora, fluidez verbal.

– Área de Educación Física: – Desarrollar la percepción espacio-temporal, auditiva, visual…

– Desarrollar el esquema corporal, hábitos de independencia.

– Área Artística: – Desarrollar el ritmo corporal y musical.

– Desarrollar la percepción gráfica, visual y auditiva.

– Desarrollar la expresión corporal.

– Área de Conocimiento del Medio: – Desarrollo conceptual y relación del niño con su medio.