Tema 4B – El centro ordinario y la respuesta a las necesidades especiales de los alumnos y de las alumnas. El Proyecto Educativo y el Proyecto Curricular en relación con estos alumnos. Las adaptaciones curriculares.

Tema 4B – El centro ordinario y la respuesta a las necesidades especiales de los alumnos y de las alumnas. El Proyecto Educativo y el Proyecto Curricular en relación con estos alumnos. Las adaptaciones curriculares.

1. INTRODUCCIÓN.

2. El centro ordinario y la respuesta a las necesidades especiales de los alumnos y de las alumnas.

3. EL PROYECTO EDUCATIVO DE CENTRO.

4. EL PROYECTO CURRICULAR DE CENTRO.

4.1 MEDIDAS CURRICULARES PARA RESPONDER A LAS NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES DESDE EL PROYECTO CURRICULAR DE CENTRO.

5. LAS ADAPTACIONES CURRICULARES.

6. BIBLIOGRAFÍA.

1. INTRODUCCIÓN.

Todo sistema educativo tiene dos constituyentes, que son:

– estructura

– curriculum

En nuestro sistema educativo, la estructura viene dada por la Ley de Orgánica, de 3 de octubre, de Ordenación del Sistema Educativo (LOGSE), que en su artículo 3 establece que las enseñanzas se dividirán en:

– Enseñanzas de régimen general ( EI, EP, ES y FP )

– Enseñanzas de régimen especial ( E. De idiomas y artísticas ).

En este mismo artículo, en el punto 5 se especifica: “las enseñanzas recogidas en los apartados anteriores se adecuarán a las características de los alumnos con necesidades educativas especiales”

Esta es la primera vez que aparece legalmente recogido este concepto que se entiende como “que, para el logro de los fines de la educación, no son suficientes las actuaciones habituales que el profesor desarrolla con la mayoría de los alumnos del grupo, y, que por ello, tiene que revisar su actuación educativa y adecuarla a las necesidades particulares del alumno en cuestión”.

A partir de la definición dada por la LOPEGCE[1], entendemos por alumnos con nee: “aquellos que requieran, en un período de su escolarización o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y atenciones educativas específicas por padecer discapacidades físicas, psíquicas o sensoriales, por manifestar trastornos graves de la conducta, o por estar en situaciones sociales o culturales desvaforecidas”.

Esta concepción nos lleva a entender la EE como el conjunto de recursos y medidas que han de responder a las nee de los alumnos dentro del centro ordinario (y no de modo paralelo).

A partir de la LOGSE, la integración se entiende bajo un enfoque holista: la escuela para todos donde las diferencias individuales, la diversidad, son consideradas como fuente de enriquecimiento.[2]

2. EL CENTRO ORDINARIO Y LA RESPUESTA A LAS NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES.

Tal y como indica Manjón 81993) la respuesta a las nee ha de producirse desde cuarto dimensiones explícitas: currículo, recursos, organización educativa y orientación escolar. Y una que suele ser la mayor parte de las veces de carácter implícito: concepción educativa.

A través de la Orden de 14 de Febrero de 1996 se establece el dictamen de escolarización, con esto nos referimos a las modalidades de emplazamiento de los alumnos que puede ser:

§ En centro ordinario, que a su vez podría ser:

– en aula ordinaria 100% (con o sin apoyo externo)

– aula ordinaria a tiempo parcial.

§ En centro específico:

– al 100%

– a tiempo parcial

Según el MEC (1994) se propondrá la escolarización en centros ordinarios de aquellos acnee para quienes se estime que requieren adaptaciones de acceso y/o significativas del currículo oficial aunque tal vez no en todas las áreas curriculares, ni en grado extremo y cuando se considere que pueden alcanzar un grado aceptable de integración social en un grupo escolar ordinario.

Asimismo se propondrá la escolarización en centros específicos cuando los alumnos requieran adaptaciones significativas y en grado extremo en todas las áreas del currículo oficial y cuando por ello se considere que sería el mínimo el grado de integración social el que podría alcanzar en un grupo escolar ordinario (RD 696/95).

Las propuestas de escolarización y la escolarización misma, deberán estar presididas por criterios de reversibilidad, teniendo en cuenta el hecho de que los alumnos y las condiciones escolares pueden evolucionar en un sentido u otro y cambiar también la capacidad de aprendizaje o su grado de adaptación social.

El objetivo fundamental es ofrecer al alumno las situaciones de mayor normalización posible, entendiéndose esto no únicamente como integración escolar sin también de respuesta de la calidad de sus necesidades educativas.

El MEC (1994) especifica que se garantizará que los centros educativos que escolaricen acnee reúnan las siguientes condiciones:

– Un máximo de 25 alumnos en las aulas que se encuentre escolarizado algún acnee.

– No más de 2 acnee en un mismo grupo.

– Máximo 18 acnee en la totalidad del centro cuando el número de unidades sea igual o inferior a 9 unidades ( 3 de EI y 6 de EP). E independientemente del número de unidades del centro, el número de acnee no excederá de 25 a excepción de si el centro es preferente para sordos.[3] (por la integración social, al utilizar todos el mismo método de comunicación).

Estos centros preferentes vienen demostrando su efectividad desde la puesta en marcha de la integración. Como acabo de indicar los hay para deficiencias auditivas y también para las de tipo motor. En ambos casos se rentabilizan las inversiones necesarias en la eliminación de barreras y en la provisión de ayudas técnicas así como en la especialización de su profesorado.

Respeto a la planificación de los recursos y apoyos, la integración requiere una planificación rigurosa de los servicios educativos, tener en cuenta a los acnee y los recursos existentes, se debe tender a que los recursos estén allí donde se encuentren las necesidades, no pensar sólo en los materiales específicos, etc.

3. EL PROYECTO EDUCATIVO DE CENTRO (PEC).

La CECJA define el Proyecto Educativo de Centro como: “el instrumento para la planificación que enumera y define las notas de identidad del centro, establece el marco de referencia global y los planteamientos educativos que pretende conseguir, adapta el currículo establecido en propuestas globales, adecuadas a su contexto específico, y expresa la estructura organizativa del centro”

Sus funciones básicas son:

Ø Proporcionar un marco de referencia que permita la actuación coordinada y coherente de todos los miembros con los principios básicos que caracterizan al centro.

Ø Orientar la elaboración de los PCE.

Ø Facilitar la evaluación así como el funcionamiento del centro.

Al elaborar un PEC se ha de responder a: qué tipo de escuela pretendemos crear, concepto de educación que tenemos, valores que pretendemos respetar y desarrollar, etc.

Dentro del los elementos del PEC podemos diferenciar:

– Finalidades educativas (FE)

– Reglamento de organización y funcionamiento (ROF)

– Proyecto Curricular de Centro (PCC, al que más tarde haré alusión).

Para responder a las nee debe acordarse, asumirse y explicitarse en el PEC una concepción educativa (FE) basada en:

– Planteamiento educativo que posibilite la diversidad.

– Modelo de escuela integracionista.

– Concepción de la educación que pretenda el máximo e integro desarrollo de los alumnos en todas sus facetas.

– Concepción del aprendizaje como un proceso constructivo y social.

– Concepción de la enseñanza basada en los procesos y en el trabajo cooperativo.

– Concepción del docente como mediador.

El PEC también debe considerar la estructura y filosofía organizativa del centro. Para poder responder a la diversidad, hay que abogar por una organización flexible, abierta y participativa. En cuanto a esto, el criterio principal será el de asegurar el trabajo cooperativo del profesorado de manera que se garantice la unidad y coherencia curricular.

Según Sola y López (2000) para que un PEC contemple la atención a la diversidad se requiere:

Þ Un análisis contextual del centro.

Þ Poder interpretarlo con facilidad y aplicarlo unívocamente.

Þ Que los elementos (personales, funcionales y materiales) estén plenamente coordinados, definidos y sean flexibles.

Þ Que admita cualquier tipo de modificación para introducir mejoras.

Podríamos decir entonces que las características de un PEC son: posible, realista, elementos organizados y coordinados, democrático, abierto, contextualizado, reflexivo, motivante, estable, funcional, evaluable, dinámico y progresivo.

Estos mismos autores establecen cómo ha de aparecer la atención a los acnee en el PEC:

– En la propuesta de actuación.

– Desde los planteamientos ideológicos.

– Teniendo como referente el proceso de aprendizaje del alumno.

– Delimitando los objetivos y contenidos para conseguir un desarrollo global.

– Planificando metodologías flexibles, activa y globalizadoras.

– Organizando los recursos necesarios.

– Establecer los criterios de evaluación desde una dimensión global y dinámica.

4. EL PROYECTO CURRICULAR DE CENTRO (PCC).

Es el documento en el que se concreta y adecua el currículo oficial a las peculiaridades y necesidades del alumnado y a las características y exigencias del contexto sociocultural del centro. Sus funciones básicas son:

q Adecuar y concretar las prescripciones dadas en el currículo oficial a la realidad del centro.

q Traducir en intervención didáctica las opciones educativas del PEC.

q Mejorar la competencia docente a través de la reflexión sobre la práctica.

q Asegurar la coherencia, progresión y continuidad de la intervención educativa.

q Servir de instrumento de formación permanente del profesorado.

Todas las medidas pedagógicas que se adopten para la atención a la diversidad deben encontrar su articulación y cohesión en los PCC o PCE.

En el proceso de adecuación de los objetivos generales cabe dar prioridad a algunas de las capacidades que en ellos figuran. Hay que tener en cuenta las peculiaridades más significativas del alumno con el fin de reforzar unas capacidades u otras. También habrá de tenerse en cuenta que los objetivos generales deben ser formulados en términos genéricos.

Cabe la posibilidad de agrupar diferentes áreas curriculares en ámbitos para poder desarrollar con mayor facilidad las capacidades de la etapa.

En el caso de la concepción, organización y distribución de los contenidos es necesario equilibrar la presencia de los tres tipos de contenidos en las diferentes áreas.

No cabe descartarse la posibilidad de considerar prioritarios aquellos procedimientos que son comunes a todas las áreas utilizándolos como contenidos organizadores del currículo y de las actividades de E-A en el aula para determinados alumnos.

Respecto a la metodología, los principios psicopedagógicos que fundamentan la actual reforma educativa prescriben una estrategia didáctica general de enseñanza adaptativa cuya finalidad ultima no es otra que la personalización y la individualización de la enseñanza.

Se proponen como elementos de esta estrategia general los siguientes:

Ø Principio de actividad del alumnado: desde el punto de vista manipulativo y actividad mental. Favoreciendo el debate, la investigación y la participación.

Ø Principio de funcionalidad de los aprendizajes: el conocimiento que se trabaja desde la perspectiva de utilidad y adecuación de los intereses de los alumnos, tienen más posibilidades de asimilación significativa.

Ø Principio de adecuación al desarrollo evolutivo, tanto de la inteligencia como de la personalidad.

Ø Principio de recurrencia, a medida que evoluciona en el conocimiento se retoma aspectos de la realidad ya tratados, pero desarrollando una mayor profundidad y complejidad ( tratamiento helicoidal)

Ø Principio de significatividad lógica. Los conocimientos deben presentarse estructurados de forma lógica, respetando en cualquier caso la cientificidad de los mismos.

Ø Principio de significatividad psicológica. Un contenido se aprende de forma significativa, cuando se establecen relaciones sustantivas y estables con las ideas preestablecidas. Existirá verdadero aprendizaje cuando se ponga en entredicho las ideas del alumno “ideas previas” y las “nuevas”, creando un conflicto cognitivo, que haga mover las estructuras mentales.

Ø Principio de contextualización. Un aprendizaje es tanto más estable, cuanto más relación guarda con el entorno del alumno.

Ø Principio de contingencia o individualización. Las enseñanzas deben adaptarse al ritmo personal de cada sujeto o grupos de sujeto.

Ø Principio de comprensividad. Un conocimiento se recuerda mejor cuando se comprende, es decir, cuando existe una relación lógica entre lo conocido y el nuevo conocimiento.

En cuanto a los criterios de evaluación exigen remitirse a las capacidades más estrechamente relacionados con los objetivos generales de etapa y de área.

Deben reflejar de forma equilibrada los tipos de capacidades y contenidos y servir de referencia a las programaciones y actividades de E-A. Constituyen un elemento fundamental para el proceso de individualización y permite adoptar medidas pedagógicas que no acumulen dificultades y puedan progresar en su aprendizaje.

Hasta ahora he hablado de los elementos del PCC referentes al currículo, pero también los diversos planes son elementos constituyentes del PCC.

El Plan de Orientación Escolar (POE), complemento necesario para planificar la atención a la diversidad, cuya finalidad última es contribuir al desarrollo personal y social de los alumnos.

Del Carmen y Zabala (1991) destacan una serie de principios que han de considerarse en todo PCC para la toma de decisiones:

– Pertinencia (estructura psicológica): intentar establecer la distancia óptima entre lo que los alumnos son capaces de hacer y los nuevos contenidos.

– Coherencia (estructura lógica): la compresión de los contenidos educativos se facilitarán si éstos se organizan en secuencia de forma que su lógica interna se haga comprensible.

– Adecuación (aprendizajes significativos): conocer las ideas y experiencias previas de los alumnos y encontrar puntos de conexión.

– Continuidad y progresión a lo largo de los diferentes niveles educativos.

Según Wang (1995) para que un PCC tenga en cuenta la diversidad des alumnado deberá:

* Crear y conservar los materiales de enseñanza para elegirlos y acomodarlos.

* Despertar la responsabilidad personal del alumno.

* Evaluación inicial.

* Planificar estrategias de enseñanza.

* Establecer un seguimiento continuo.

* Motivar y explicitar a los alumnos para que conozcan las opciones de aprendizaje y las tareas.

* Seguimiento mediante fichas de control.

4.1 MEDIDAS CURRICULARES PARA RESPONDER A LAS NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES DESDE EL PCC.

En los centros ordinarios para responder a las nee hay distintas medidas de atención a la diversidad que pueden ser:

A) ordinarias: – La no promoción.

– Acción tutorial.

– Orientación educativa.

– Optatividad en secundaria.

– Evaluación inicial y criterial.

– Provisión de recursos.

B) extraordinarias:

– Refuerzo educativo: estrategia docente dirigida a satisfacer las ne que de modo puntual y esporádico presenta algún alumno. Se caracteriza porque es mínima su duración y esporádica su aplicación.

– Adaptaciones curriculares, a las que me referiré a continuación.

– Diversificación curricular: implica la máxima adaptación y opcionalidad curricular mediante un programa individualizado.

– Programas de Garantía Social (PGS): implican mayor nivel de diversificación para aquellos que no tienen posibilidad de superar los objetivos generales de la ESO. Se persigue cualificación profesional.

Con el objeto de contemplar específicamente la diversidad en el contexto del centro en su conjunto, tanto en el PEC como en el PCC se habla de Adaptaciones Curriculares de Centro (ACC) que pueden entenderse como “conjunto de ajustes o modificaciones que se realizan en los diferentes elementos de la acción educativa que desarrolla el equipo docente para el centro (reflejada en el PEC y los PCC) para responder a acnee en un continuo de respuesta a la diversidad”.

Contemplar las nee en el PEC y el PCC va a favorecer los siguientes aspectos:

– Facilitar un mayor grado de integración y participación de los acnee en la vida del centro.

– Prevenir la aparición o intensificación de dificultades de aprendizaje, como consecuencia de un planteamiento educativo rígido.

– Responsabilizar a todo el equipo docente para que conozcan sus necesidades y adecuarlo hacia ellos.

– Favorecer que las AC que precise un alumno con nee sean lo menos numerosa y significativas posibles.

5. LAS ADAPTACIONES CURRICULARES.

Las adaptaciones curriculares las podemos definir como un proceso de toma de decisiones sobre los elementos de acceso o sobre los elementos propiamente curriculares (objetivos, contenidos, metodología y criterios de evaluación) para dar respuesta a las nee en un continuo de respuesta a la diversidad.

Hasta hace poco, la solución o la única respuesta eran los Programas de Desarrollo Individual (PDI) que eran intervenciones centradas en el alumno y con un currículo paralelo.

Más tarde, fueron sustituidas por las Adaptaciones Curriculares Individuales (ACI) cuyo origen se sitúa en la legislación inglesa posterior al Informe Warnock (1978) pero en España no se produce el cambio hasta la llegada de la LOGSE (1990).

Las ACI se centran en el alumno y en el contexto de E-A y el marco curricular no es paralelo sino el propuesto en el PEC y en el PCC.

Las AC tienen como funciones básicas, entre otras, las siguientes:

– Concretar la respuesta educativa del alumno.

– Responder desde las programaciones de ciclo/nivel y aula a las ne de los alumnos.

– Especificar la intervención coordinada.

– La evaluación del alumno se realiza en referencia a la ACI y a los criterios de evaluación en ella contenidos.

– La ACI se entiende como un instrumento útil y práctico para el profesorado, realista y ajustado perfectamente a las características y necesidades del niño.

En función del nivel donde se realicen podemos hablar de:

– Adaptaciones Curriculares de Centro (ACC).

– Adaptaciones Curriculares de Aula. (ACA).

– Adaptaciones Curriculares Individuales (ACI), éstas requieren de una evaluación psicopedagógica previa y se recogen en el documento individual de adaptación curricular (DIAC).

Según los elementos que se encuentren implicados en el proceso de adaptación, se puede hablar de:

§ Adaptaciones de acceso al currículo.

§ Adaptaciones curriculares.

Ambos tipos de adaptaciones deben tender a que los alumnos con nee alcancen las capacidades generales propias de cada etapa; y por ello, la elaboración de un currículo adaptado no debe renunciar a la consecución de los objetivos generales de etapa.

Podemos definir las de acceso al currículo como modificaciones o provisión de recursos espaciales, materiales o de comunicación que van a facilitar que los alumnos con nee, puedan desarrollar el currículo ordinario o, en su caso, el currículo adaptado.

Estas adaptaciones se encaminan a:

q Crear las condiciones físicas (sonoridad, iluminación, accesibilidad) en los espacios y mobiliario para permitirles su uso más autónomo posible.

q Conseguir que el acnee alcance el mayor nivel posible de interacción y comunicación con las personas del centro.

q Hay ocasiones en las que modificar las condiciones de acceso evita realizar adaptaciones en los objetivos y los contenidos.

Cuando hablamos de adaptaciones curriculares nos referimos al conjunto de modificaciones que se realizan en los objetivos, contenidos, criterios y procedimientos de evaluación, actividades y metodología para atender a las diferencias individuales de los alumnos.

Este tipo de adaptaciones deberán tender a:

– Lograr la mayor participación posible de los acnee en el currículo ordinario.

– Conseguir que estos alumnos alcancen los objetivos de cada etapa educativa.

Las adaptaciones curriculares se pueden agrupar en torno a dos grandes bloques: adaptaciones en el qué enseñar-evaluar y adaptaciones en el cómo enseñar y evaluar. Tienen dos características fundamentales:

– Son relativas y cambiantes.

– Forman un continuo, es decir, van desde ajustes poco significativos a modificaciones más significativas, y desde ajustes temporales a modificaciones más estables. En este sentido podemos hablar de:

· Adaptaciones curriculares no significativas: no afectan prácticamente a las enseñanzas básicas.

· Adaptaciones curriculares significativas: implican la eliminación de algunas de las enseñanzas básicas (objetivos, contenidos y criterios de evaluación).

6. BIBLIOGRAFÍA.

– AA.VV (1993): “Adaptaciones curriculares individuales” Cuadernos de Pedagogía. Nº 212.

– Casanova ( ): “la organización escolar al servicio de la integración” Cuadernos de Pedagogía. Nº 269.

– Del Carmen y Zabala (1991): “Alumnos con necesidades educativas especiales y adaptaciones curriculares”. MEC. Madrid.

– González Manjón (1993): “Adaptaciones curriculares. Guía para su elaboración” Aljibe. Málaga.

– López y Sola (1998) en AA.VV: “Bases psicopedagógicas de la EE” Grupo Universitario Granada.

– Wang (1995): “Atención a la diversidad del alumnado” Narcea. Madrid.