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Tema 17 – Desarrollo de las capacidades físicas básicas en la edad escolar. Factores entrenables y no entrenables. La adaptación al esfuerzo físico en los niños y en las niñas.

1. INTRODUCCIÓN

Todo docente de EF debe tener en cuenta que el niño no es un adulto. Su sistema orgánico está en pleno desarrollo y esto hace que la práctica de actividades físicas le afecte de forma diferente al adulto.

Por lo tanto, los sistemas de trabajo tendrán diferencias sustanciales, aplicándose estímulos adecuados a cada edad y etapa de desarrollo. No basta, como se hizo tradicionalmente, con realizar los mismos sistemas que los adultos, pero con cargas más suaves. El niño no es adulto bajito, es niño.

En la LOE, así como en el currículo aragonés, se hace referencia al hecho de que las capacidades físicas, serán trabajadas desde un punto de vista cualitativo. tratándolo de un modo global como contenido secundario, integrado en el desarrollo de otros principales como el desarrollo de habilidades y destrezas motrices.

De hecho, en uno de los objetivos del área de EF para EP, se cita la importancia de aprender a dosificar el esfuerzo. En ningún momento se habla de mejora de la condición física.

No obstante, debemos ser conscientes (y facilitar que también lo sea el alumnado) de que todo movimiento, depende de tres mecanismos: percepción, decisión y ejecución. Y dentro de éste último, se encuentran las capacidades físicas básicas (o condicionantes) que sirven como soporte, sobre el cual elaborar el gesto. Su importancia, por tanto es muy alta y su trabajo y desarrollo, algo básico a la hora de mejorar en la práctica de cualquier deporte o actividad física. Pero ese objetivo escapa de la EP, debiéndose tratar en etapas educativas y vitales posteriores.

Por todo ello, a lo largo del tema se utilizará preferentemente el término de capacidad, en lugar del de cualidad, entendiéndolo como algo que está en desarrollo, no alcanzado el tope.

2. DESARROLLO DE LAS CAPACIDADES FÍSICAS BÁSICAS EN EDAD ESCOLAR

(a) Concepto de Capacidad física básica.

Navarro (1991) en su libro “Natación” lo define como: “elementos que capacitan físicamente al individuo, es decir, desarrollan los aspectos cuantitativos del movimiento”. Permiten desarrollar esfuerzos físicos habituales o deportivos, retardando la fatiga y manteniendo la calidad del trabajo.

Aunque en principio existieron discrepancias sobre cuáles eran las CFB, hoy día la mayor parte de autores consideran como CFB a la velocidad, fuerza, resistencia y flexibilidad. Ahora bien, hay que tener en cuenta que en una misma actividad suelen intervenir de forma simultánea varias cualidades físicas, lo que ocurre es que una prevalece sobre las demás, ocupando la denominación de la actividad el valor dominante.

(b) Resistencia

i. Concepto y tipos.

Es la capacidad psicofísica del individuo para soportar esfuerzos prolongados, retardando la aparición de fatiga. Según se esté trabajando con déficit de oxígeno o no, encontramos:

• Aeróbica: (orgánica). Capacidad para soportar esfuerzos de intensidad media, durante un tiempo prolongado, con utilización de oxígeno. Las pulsaciones no han de superar 140-160 en un adulto.

• Anaeróbica: (muscular). Se trabaja con intensidades altas, con déficit de oxígeno, durante el mayor tiempo posible. A su vez se divide en:

◦ Aláctica: intensidad muy alta, corta duración (<25”). No da tiempo a que aparezca ácido láctico.

◦ Láctica: intensidad alta, con una duración mayor de 25”, apareciendo una acumulación de ácido láctico (desecho de la glucosa), que reduce el PH de la sangre, provocando fatiga.

ii. Desarrollo en edad escolar.

En las primeras edades, la evolución de esta cualidad es muy suave, producto fundamentalmente del crecimiento. A los 7-8 años tiene una progresión moderada que se mantendrá hasta el fin de EP. Con la pubertad, se produce un periodo de estancamiento momentáneo. Desde aquí, se entra en una fase de rápido desarrollo durante la adolescencia.

El entrenamiento de la resistencia de una manera adecuada, provoca en el organismo una serie de respuestas, que conducen a las siguientes mejoras:

• Disminución de la frecuencia cardíaca en reposo.

• Retorno de las pulsaciones a la situación normal mas rápidamente.

• Aumento del volumen de las cavidades cardíacas.

• Transporte de mayor porcentaje de oxígeno en la sangre.

• Retardo de la concentración de ácido láctico cuando se realizan ejercicios de mayor intensidad.

De los 6 a los 12 años, en la EP, la mejora será constante, dada la hipertrofia que experimenta el corazón. De los 8-9 años, podremos empezar a aumentar el volumen de trabajo, debido a la mayor captación de oxígeno y el aumento del volumen cardíaco.

Las cargas anaeróbicas no tienen sentido y son perjudiciales en la infancia, ya que los sujetos no tienen la capacidad de aprovechar este trabajo y le va a costar mucho más eliminar el ácido láctico del músculo. Además puede provocar un engrosamiento de las paredes del corazón, lo que no permite el aumento en volumen de las cavidades.

Según Álvarez del Villar, se ha de utilizar un método continuo:

• Carrera continua: trabajo con un ritmo uniforme y moderado, en un tiempo de trabajo relativamente largo (manteniendo el niño 140-160 pulsaciones). Muchos juegos responden a ésta forma de trabajo. Este tipo de actividad, se puede aplicar en el 3º ciclo, para aprender a mantener un ritmo de carrera y dosificar el esfuerzo.

• Farlek: es una carrera con cambios de ritmo. Un ejemplo de farlek adaptado, se puede hacer a través de los juegos de filas. Todos deben avanzar con una carrera suave y a la señal, el último tiene que adelantar a sus compañeros hasta colocarse el primero con un ritmo más rápido al de los demás o realizando un tipo de movimiento diferente (saltos por ejemplo).

Existe también la posibilidad de utilizar un método fraccionado:

• Circuito: es un método realmente útil en la escuela. Consiste en un conjunto de ejercicios (estaciones) por el que todos los sujetos van pasando, en el que se alternan diferentes grupos musculares en cada uno. Los ejercicios deben ser sencillos, trabajando un grupo muscular distinto al anterior, respetando así el principio de alternancia. Las repeticiones pueden oscilar entre 15 y 20 por cada estación. Repitiéndose 2-3 veces, con una recuperación de entre 2 y 5 minutos entre las series. Es importante que no entren en valores anaeróbicos.

Para desarrollar la resistencia aprovecharemos los contenidos del área de EF: los juegos, las habilidades y destrezas básicas, los bailes, las danzas, los contenidos predeportivos. Todo el trabajo va encaminado a la mejora de la resistencia aeróbica, aunque recordemos que las sesiones no deben ir encaminadas a metas concretas en cuanto al desarrollo específico de capacidades físicas.

(c) Fuerza

i. Concepto y tipos.

Capacidad para ejercer tensión contra una resistencia (Morehouse). Otra definición: es una capacidad neuromuscular que permite superar resistencias gracias a la contracción muscular; aunque ésta no es tan válida, bajo mi punto de vista, en tanto que no siempre se consigue superar la resistencia. Dentro de las numerosas clasificaciones respecto a los tipos de fuerza, destaco:

• Fuerza Máxima: es la mayor contracción voluntaria. Existen dos tipos:

◦ Isométrica: la resistencia no se desplaza. El músculo no varía su longitud.

◦ Isotónica: la resistencia si se desplaza, por lo que si varía la longitud del músculo. A su vez se divide en:

▪ Concéntrica: contra la fuerza de la gravedad.

▪ Excéntrica: a favor de la fuerza de la gravedad.

◦ Auxotónica: la resistencia del objeto aumenta a medida que disminuye la longitud del músculo. Como ocurre al manipular un muelle.

• Fuerza Velocidad. Es la capacidad de hacer frente a una resistencia media a una velocidad elevada. Se puede distinguir:

◦ Potencia: alta velocidad, carga elevada. Remo.

◦ Fuerza explosiva: aceleración máxima, cargas medias. Boxeo.

• Fuerza Resistencia: se enfrenta a una resistencia baja, durante un tiempo prolongado y con una velocidad media. Es lo que se conoce como contracción isocinética, en la cual se produce una contracción submáxima constante, como en la natación.

ii. Desarrollo en edad escolar.

En primer lugar, aclarar que es necesario que las cargas no sean muy pesadas, ya que su organismo no está aún preparado para ello.

Los tipos de entrenamiento de fuerza son:

• Preparación general: ejercicios generales que implican grandes grupos musculares. Sirve como base para la preparación posterior.

• Preparación dirigida: se realizan ejercicios que desarrollan los músculos que intervienen en la especialidad concreta.

• Preparación específica: se conserva el patrón de movimientos de la especialidad, pero aumentando la carga.

Los sistemas para entrenarla son: Cargas máximas, cargas submáximas, entrenamiento aeróbico de la fuerza (fuerza-resistencia), pliometría, etc.

En el entrenamiento de la fuerza es preciso tener en cuenta una serie de normas referidas a la correcta utilización de las cargas, sobre todo en la columna vertebral y al progresivo aumento de éstas.

El trabajo sistemático de la fuerza no es recomendable antes de los 16-17 años. Los incrementos de fuerza y velocidad anteriores a esta edad, son debidos al crecimiento (aumento de las palancas) y a una mejora de las coordinaciones, aspecto éste en el que deberemos fundamentar nuestro trabajo. Es aconsejable un trabajo dinámico, partiendo de cargas leves que irán aumentando progresivamente.

Partiendo por tanto, de esta idea, en la EP no tiene sentido el trabajo sistemático de la fuerza, puesto que los niños carecen de la base hormonal suficiente y de un sistema músculo-esquelético maduro, el trabajo de la fuerza está unido a la coordinación.

Así entre los 6-12 años, serán apropiadas las carreras, saltos… A su vez, podemos proponerles juegos de tracción, arrastre, empuje, con pequeñas cargas (bancos suecos, colchonetas). Ejercicios de cuadrupedias, reptaciones, lanzamientos, etc. A partir de los 12-13 años, podrán incluirse ejercicios con autocargas y por parejas.

Todos ellos permitirán un aumento por lado, de la eficacia motora, es decir, el que el niño conozca y controle la fuerza que es capaz de aplicar a un ejercicio y por otro, el desarrollo de una musculatura armónica, lo que traerá consigo el control de posturas, durante una actividad, de forma correcta.

(d) Velocidad.

i. Concepto y tipos.

Capacidad de realizar acciones motrices en el menor tiempo posible. Existen varios tipos:

• Velocidad de desplazamiento: recorrer un espacio en el menor tiempo posible.

◦ Velocidad máxima. La mayor velocidad posible.

◦ Velocidad de aceleración: alcanzar la velocidad máxima en el menor tiempo posible.

◦ Velocidad resistencia: mantener una velocidad submáxima durante el mayor tiempo posible.

• Velocidad de reacción: actuar lo más rápido posible tras un estímulo, normalmente externo.

• Velocidad Gestual: gesto técnico en el menor tiempo posible.

ii. Desarrollo en edad escolar.

En la infancia, se debe incidir primordialmente en los aspectos de coordinación neruomuscular. La velocidad va a desarrollarse fundamentalmente a expensas de la fuerza y la coordinación. Será a partir de los 5-6 años, cuando la velocidad experimente una ligera mejora. El tiempo de reacción todavía no es del todo bueno.

En las edades de 8-11, 2º y 3º ciclo, se produce un periodo de crecimiento estable antes de la pubertad y los niveles de coordinación son satisfactorios, pudiendo considerarse como un momento excelente para el desarrollo de esta cualidad. De todas formas, debido a la falta de fuerza, el nivel es solo la mitad del que llegará en la edad adulta. Superando el bache de la pubertad, la velocidad inicia su máximo desarrollo.

Para incidir en la velocidad de reacción, se pueden realizar lo que comúnmente se ha denominado “salidas”. La distancia a recorrer será mínima (5m). Es recomendable utilizar diferentes tipos de estímulos (visual, auditivo, táctil…) y posiciones para dar la salida.

Para desarrollar la velocidad gestual, se realizarán habilidades y destrezas, tanto básicas, como específicas. Pudiéndose realizar saltos, giros, combinaciones de varias habilidades básicas, lanzamientos a canasta, botes, etc.

A la hora de trabajar la velocidad de desplazamiento, es muy importante tener en cuenta las pausas, de modo que se favorezca una recuperación completa, pues de lo contrario, entraríamos en lo que sería resistencia anaérobica.

En general, el trabajo de la velocidad podremos realizarlo con el conjunto de habilidades y destrezas, en todas sus manifestaciones. Los juegos, dada su motivación intrínseca, serán un buen método, siempre que provoquemos que jueguen al 100%: juegos reactivos (blanco-negro), de persecución, relevos…

(e) Flexibilidad.

i. Concepto y tipos.

Capacidad que permite alcanzar la mayor amplitud de movimientos, gracias a la elasticidad muscular y a la movilidad articular. Podemos hablar de:

• General: refiriéndonos a los grandes grupos musculares y a las articulaciones principales en conjunto.

• Específica: una articulación en concreto, provocado quizá por un entrenamiento específico.

• Activa: mayor amplitud alcanzada por la propia fuerza.

• Pasiva: mayor amplitud total, requiriendo un elemento externo (material o compañero).

ii. Desarrollo en edad escolar.

En el ámbito escolar, el trabajo de la flexibilidad irá enfocado a los métodos activos, en los que el propio individuo realiza la fuerza y de carácter:

• Estático: manteniendo la elongación muscular. En ejemplo claro es el streching de Anderson.

• Dinámico: en los que incidirá en la posibilidad de movimiento articular. Por ejemplo, circunducción de hombros.

Se deben realizar ejercicios en los que las articulaciones realicen todos los movimientos posibles, procurando siempre hacer un calentamiento previos. Evitaremos los rebotes y métodos pasivos (aplicación de fuerzas externas), así como los ejercicios forzados.

El trabajo de la flexibilidad puede ser beneficioso para conocer mejor nuestro cuerpo. Ha de ser un trabajo enfocado a encontrar una postura correcta, que nos ayudará a reducir las tensiones musculares, a relajarnos, evitando malformaciones o lesiones. Ahora bien, es necesario reconocer que algunos métodos son poco motivantes.

Su desarrollo puede realizarse a través de sesiones específicas, con intención de mejorar la amplitud articular. O introducirnos a través del calentamiento, cuyo objetivo principal va a ser la prevención de lesiones. METER AQUÍ LO DEL ESTUDIO ESE QUE DICE QUE NO………… Una tercera forma estaría determinada por los estiramientos de vuelta a la calma, cuyo objetivo es simplemente favorecer la recuperación del músculo.

La fuerza, la velocidad y la resistencia cobran protagonismo en el 3º ciclo. La flexibilidad se debe trabajar en todos los cursos. En la etapa de EP no se trabajarán ni fuerza máxima, ni resistencia anaeróbica, ni velocidad-resistencia, ni métodos pasivos de flexibilidad, ya que el organismo de nuestro alumnado no está preparado para dichos esfuerzos.

1. FACTORES ENTRENABLES Y NO ENTRENABLES

A nivel escolar, el término entrenamiento se sustituye por desarrollo. Hace referencia al conjunto de tareas, juegos y ejercicios, en base a los cuales conseguiremos una expansión de todas las posibilidades motoras, que nos harán adquirir un amplio repertorio motriz, sobre el cual se podrán aprender formas motrices con mayor facilidad, rapidez y de forma más estructurada. De ningún modo irá encaminado a la mejora de la condición física.

Por tanto, los aspectos más entrenables en la escuela van a ser los referidos a las habilidades y destrezas motrices. Debemos seguir unas normas de actuación que harán referencia al uso de un correcto calentamiento. El docente deberá dotar al alumnado de materiales adecuados, controlar posibles peligros y poner como primer objetivo, la salud integral del niño, a través de variedad de métodos y de la utilización de progresiones pedagógicas asequibles a su edad.

A continuación, se recogen factores que hacen referencia al entrenamiento en general, por lo que algunos no son propios de la etapa educativa de la que hablamos.

(a) Factores Entrenables.

i. Condición física: nivel adquirido mediante el desarrollo de las capacidades físicas básicas, que permite realizar esfuerzos físicos (habituales o deportivos) retardando la fatiga y manteniendo la calidad del trabajo.

ii. Técnica: movimientos óptimos en la ejecución de una acción.

iii. Táctica: aplicación de la técnica adecuada en cada momento.

iv. Aspecto psicológico: mejora de la personalidad para aumentar el nivel. (concentración, percepción…).

(b) Factores No Entrenables.

Aquí se ha de diferenciar entre factores relativos al propio sujeto (Intrínsecos) y los factores ajenos a él (extrínsecos).

i. Intrínsecos: vienen determinados genéticamente. Abarcan la altura, el sexo, las dimensiones del aparato locomotor, el tipo y número de fibras, etc.

ii. Extrínsecos: ajenos al sujeto. Engloban aspectos socioeconómicos, la dieta, enfermedades, el entorno físico, etc.

2. ADAPTACIÓN AL ESFUERZO FÍSICO EN NIÑAS Y NIÑOS.

(a) Concepto de adaptación

La mejora de las capacidades físicas, tanto en adultos como en niños, se debe a una adaptación al sucesivo aumento del excitante. Esta adaptación se produce en el SN, en el sistema cardio-respiratrio, en el aparato locomotor y en el sistema endocrino.

Así podemos definir la adaptación como la capacidad para mantener un equilibrio de nuestras funciones frente a la exigencia de diversos estímulos. Esto se produce gracias a la modificación funcional de nuestros órganos y sistemas.

No obstante, debemos tener en cuenta que el metabolismo del niño es diferente al del adulto. Es decir, el organismo del niño no responde de igual manera que el del adulto, ante un ejercicio físico. No son adultos bajitos. Tienen una forma especial de responder ante la actividad y debe ser conocida por todo docente de EF. Los niños van a trabajar con un ritmo cardíaco superior al del adulto. Para saber si el ejercicio se adapta bien a sus características, debemos fijarnos en las señales que nos da el propio niño. Si observamos palidez, exceso de sudoración, hiperventilación, etc interrumpiremos automáticamente la práctica.

A continuación expondré una serie de teorías que describen como se produce la adaptación al esfuerzo, aunque en este caso, en el mundo del adulto, dado que existen pocos estudios aplicables a la infancia.

(b) Teorías relacionadas con el proceso de adaptación

i. Ley del Umbral. (Ley de Schultz)

El umbral es la capacidad del individuo que va a condicionar el grado máximo de intensidad del estímulo. La adaptación funcional de los diversos órganos y sistemas se conseguirá gracias a la asimilación sucesiva de estímulos crecientes, que permitirán alejar el umbral. Además del umbral, el individuo posee un margen máximo de tolerancia.

De acuerdo con esto, podemos clasificar los tipos de estímulos, para analizar si son adecuados y por lo tanto, si entrenarán o no.

• Estímulos suaves que están muy lejos del umbral. No modifican la funcionalidad de los órganos, por lo tanto no entrenan.

• Estímulos suaves, cercanos al umbral. Producirán una modificación si se realizan bastantes repeticiones. Entrenan por repetición.

• Estímulos que superan el umbral. Entrenan ya que los diferentes órganos y sistemas se adaptan al nivel de exigencia.

• Estímulos muy fuertes, que superan el umbral, pero no el margen de tolerancia, entrenan, siempre y cuando no se realicen muchas repeticiones. Si además del umbral, superan el margen de tolerancia, no solo no entrenan, si no que agotan.

Las cargas se deben alternar de manera adecuada, alternando días de entrenamiento más duros, con otros más suaves. Respecto a los niños, su capacidad máxima se determina en una competición con iguales.

ii. Síndrome general de Adaptación (Selye)

También conocido como síndrome del estrés. Esta teoría defiende que el organismo realiza una serie de adaptaciones ante un estímulo externo, sea de la clase que sea. El organismo aumenta su actividad hormonal, se eliminan grasas para obtener energía y se pierde peso.

Estas reacciones se producen en muchas enfermedades y ante un ejercicio físico intenso. El organismo responde ante cualquier estímulo que trate de poner en peligro su equilibrio biológico. Se puede dividir en tres fases:

A. Fase de Alarma: se produce un desequilibrio (choque) y el sujeto trata de adaptarse para recobrar su estado inicial (contrachoque).

B. Fase de Resistencia: una vez recobrado el equilibrio, el sujeto resiste al estímulo, es decir, se adapta.

C. Fase de Agotamiento o Readaptación: el estímulo sigue creciendo, por lo que o bien el sujeto se agota, al no poder aguantar el aumento constante; o bien puede superar dicho aumento, readaptando de nuevo su funcionalidad orgánica.

iii. Principio de supercompensación

La eficacia de un entrenamiento está estrechamente ligada a la recuperación de las energías gastadas. Esta recuperación se produce entre dos estímulos y debe adecuarse a las cargas de trabajo realizadas. Es decir, si la carga es alta, la recuperación será más duradera que si la carga es leve. El descanso puede ser activo, realizando otra actividad más suave, o pasivo, con cese total de la actividad.

Mediante el entrenamiento, lo que se pretende es que el tiempo de recuperación de energías sea el menor posible. Es decir, que necesitemos menos descanso para recuperarnos. Si entrenamos y luego descansamos, no solo recuperaremos fuerzas, si no que, como ya he explicado en el punto anterior, obtendremos una reserva mayor de la que teníamos.

El período entre dos estímulos, en el cual el individuo descansa, se denomina periodo de Asimilación compensatoria y nos ofrece una supercompensación que debe ser renovada en menos de tres días. Es decir, debemos volver a entrenar durante ese periodo, de lo contrario, volveremos al nivel inicial y no habrá mejora.

La recuperación, se hemos trabajado la fuerza debe ser de un día completo, o bien días alternos. La resistencia requiere que se trabaje prácticamente todos los días a ritmo medio, o bien alternando días si el ritmo es alto. Teniendo esto en cuenta, hay que aclarar que si el descanso es demasiado largo, en proporción con el esfuerzo, no producirá mejora.

Otro fenómeno relacionado es el de la Hipercompensación. Se da en deportistas de élite. Estos realizan varas sesiones diarias, por lo que la recuperación es incompleta. Lo que ocurre es que alternan semanas duras, con otras más suaves, que en relación con las otras, les sirve de recuperación, pues para ellos es como una especie de descanso.

3. CONCLUSIÓN

A la hora de hablar de capacidades físicas en la escuela, hay que hacerlo desde una perspectiva alejada del rendimiento. Nos interesa la formación integral del alumno y por tanto, lo más importante dentro del trabajo de estos contenidos será, establecer una base que les permita comprender que todo movimiento tiene un componente físico, así como entender que tener una buena condición física va a contribuir a alcanzar el bienestar en su vida.

Dentro de los conceptos que han de aprender, me gustaría recalcar la importancia del descanso. Han de entender que los esfuerzos han de aplicarse de modo oportuno para permitir la supercompensación y evitar la fatiga.

Por último, decir que, todos los profesionales de la actividad física, maestros, monitores, entrenadores, debemos entender que a edades tempranas, el ejercicio físico debe abarcar el desarrollo en todos los ámbitos humanos; es decir, desarrollar aspectos cognitivos, afectivos, emocionales y sociales. No solo el aspecto físico.

4. BIBLIOGRAFÍA

(a) Álvarez del Villar. La preparación física del fútbol basada en el atletismo.

(b) Sánchez Bañuelos: Bases para una didáctica de la Ef y el deporte. Este texto, dentro de un contexto educativo de talante actual, trata de incorporar a la didáctica específica de la E.F. y el Deporte las aportaciones más fundamentales de la investigación en las áreas del aprendizaje y del desarrollo motor.

(c) Villada y Vizuete: Fundamentos teórico-didácticos de la EF. En este libro nos muestra la EF como contenido de conocimiento disciplinar. Explica su didáctica, los diferentes aspectos implicados en el desarrollo motor, así como debiera ser el diseño y su integración en el currículo escolar.

(d) Asignatura: Educación Física de Base. UC Ramón Torralbo.2000

(e) Asignatura: ——————————. UC. Cimiano. 2002

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